CAPÍTULO 23

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Resacón en Amsterdam (Noa narra):

Tras pasar las dos toneladas de cocaina por las aduanas, por fin era libre y podia esnifar haciendo trios con gigolos de puticlubs en el barrio rojo, el sueño de toda mujer ninfomafana y adicta al sexo duro como yo.

Iba a comerme el mundo en esta nueva etapa, bueno mejor dicho iba comerme todos los instrumentos que quisieran tocarme una canción. Pero primero necesitaba conseguir comida y un hogar donde vivir asi que me ouse una minifalda y un buen escote con push up (hacia bastante frio, la verdad (pero para lucir hay que sufrir). Vendí dos gramos, cantidad equivalente a 250.000€, vamos lo que viene siendo un mocacoñino en el STURBACKZ. Con este dinero me compré la casa de Cristi-Ano Ronaldo de Amsterdam y contraté un par de masajistas con final feliz. La casa era hipermegaultrasuperextragrande y su superficie era de 100 metros cuadrado, todo un goso para mi body ya que mi antigua casa media 30 metros cuadrados. Aquella mansion venia provista con 20 tipos de consoladores distintos elegidos por el mismo Cristi-Ano Ronaldo y para mi enorme sorpresa había un jacuchi con forma de coño, más bien conocido como el coñocuchi. 

Esa misma noche monte party hard guapa con los holandeses, puse carteles por toda la ciudad anunciando coños gratis para todos, como no sabía hablar inglés, simplemente puse un selfie con mi coño y puse al lado: "FREE" y la hora con mi dirección. 

Sobre la una de la madrugada empezó a llegar gente de todos los estilos y edades, hasta entró un niño de 12 años diciendo " I WANNA TASTE SOME PUSSY TODAY BITCHES". Llegadas las cuatro de la madrugada, la música en mi casa estaba a todo volumen, la piscina y el coñocuchi a rebentar de putas sedientas de sexo holandés, entre ellas, una servidora, yo. Pasaron unos minutos, y alguien me lanzó el teléfono de mi casa a la cabeza, dejándome una hemorragia interna, coloreando la piscina de sangre, y mierda, estaba un poco suelta, LITERALMENTE. Mi esfínter no aguantó más, y dejé de estar estreñida en un instante, ya que, al mirar el teléfono, vi un número un poco raro, no había números, solo las palabras WEY WEY WEY, así que lo cogí y me fui al piso de arriba de mi casa, donde todos los borrachos acaban follándose a sus gatas en celo. 

Una voz dijo:
-Tengo a tu novio aquí, entre mi sinuosas curvas, si no quieres que le ahogue con mi polla, y le bañe con mi mala leche, trae aquí tu jodido culo negro, y mi puta cocaína, perra.

En ese momento mi heart hizo BOOM BOOM BOOM BOOM SEM PARAR LALALALALALAAAAAA....

Paréntesis 1[Perdón por los espasmosssss y por no haber escrito en dos siglos y medio, TENEMOS BIDA, ¿VALE?]

Paréntesis 2[Ya está disponible el segundo libro "On Fire 2: Diario de una madre gogo"]

En ese instante abandoné lo que estaba siendo mi hueva etapa y cogi el primer vuelto a Mexico DF. WEY WEY WEY  nachos...

On FireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora