"Todo Por Un Acuerdo".

Cap 21.

Capítulo #21

Tardé en quedarme dormido hasta que pude conciliar el sueño, al día siguiente desperté muy temprano y Saeng, estaba dormido frente a mí y en mis brazos, quizá se acurrucó inconscientemente dormido en la noche.

No me moví para no despertarlo quería tenerlo así conmigo, a pesar de ese golpe que se hizo, una pequeña herida en un lado de su frente y su labio inferior lastimado, mi Saeng, era hermoso.

Ahora se miraba mayor a como lo miré la última vez, ya tenía 22 años era todo un hombre, no podía dejar de verlo, moría de ganas de besarlo, así que me acerqué con cuidado y le di un pequeño besó en sus labios.

Él se lamió sus labios después de que los bese, seguía dormido y se acomodó mas a mí, lo abracé, no quería que que ese momento acabara jamás, rencargué mi barbilla en su frente y me quedé mirándolo dormir.

Pero a alguien se le ocurrió molestar y llamo al celular, no me había dado cuenta de que el celular de Saeng, aparte de tener el mismo tono era igual al mío y éso que en la noche lo había puesto junto al de él, en el buro.

—¡Hola!. —Dije casi en un susurró para no despertarlo y sin siquiera ver quien llamaba.

—¡Hola! ¿Quién habla? —Preguntó un tipo del otro lado de la línea.

—¿Con quien quiere hablar? Y ¿Quién es usted?.

—¡Soy HyunJoong! Y quiero hablar con Saeng ¿Sí estoy hablando al celular de él o me equivoco?.

Ahí fue cuando me di cuenta de que no habían llamado a mi celular si no al de Saeng, y sin querer había contestado y el tipo que llamaba era con el que lo miré besarse afuera de ese restaurante y lo supe cuándo dijo su nombre.

—Sí, éste es celular, espere un momento. —Le dije al tal Hyun.

No me importaba que Saeng, se enojara más conmigo y me dijera hasta de lo que me iba a morir, estaba dispuesto a recuperarlo y si tenía que jugar sucio lo iba hacer.

—¡Saeng, amor!. —Le dije al mismo tiempo que lo empecé a despertar. — príncipe despierta.

Saeng, se empezó a mover y yo sabía que el tal Hyun, seguía al teléfono y estaba escuchando.

—¿Qué pasa Siwon?. —Me preguntó Saeng, con un ojo abierto y el otro cerrado. — sigue durmiendo todavía es muy temprano, anda acomódate. —Me dijo dando unas palmadas en la almohada.

—¡Amor despierta, alguien te habla por teléfono!

Abrió sus ojos por completo y sabía que me iba a decir cosas, así que le tape la bocina al celular.

—¿Contestaste mi celular?. —Me preguntó mirándome feo.

—Fue sin querer, lo que pasa que pensé que era el mió, como tiene el mismo tono y es igual al tuyo. —Me defendí y le mostré mi celular para que me creyera, y al parecer me creyó.

Después de que miró mi celular ya no me dijo nada.

—Deja me levanto para preparar el desayuno, tú no te levantes te voy a traer el desayuno a la cama. —Le dije entregándole el celular, el cual ya no le estaba tapando la bocina. Saeng, ¡Te amo mi amor!. —Le dije con una sonrisa.

Él sólo me miró, porque ya había visto en la pantalla quien estaba del otro lado de la línea, pero no me dijo nada.

—¡Hola!. —La escuché decir.

—Pásame mi camisa. —Le dije en voz alta porque se encontraba mi camisa de su lado.

La agarró y me la aventó en la cara y yo quise soltar la carcajada pero me aguanté y salí de la habitación, bajé a la cocina pero apenas puse un pie en la planta baja de la casa me quedé sorprendido de que no había un tiradero, al parecer HyonKo, había limpiando la casa después de que todos se fueron.

Me puse a preparar el desayuno, hice pan tostado, huevos revueltos con jamón, tocino, jugo de naranja y café.

—¡Buenos días! —Me dijo HyonKo, entrando a la cocina.

—¡Buenos días! Al parecer te dormiste hasta que limpiaste toda la casa.

—¡Sí!. Saeng, siempre me ayuda hacerlo al día siguiente de las fiestas, pero con lo que le pasó no iba a poder, así que lo hice yo antes de irme a la cama, pero dime ¿Mi hermano ya te perdonó? ¿Por eso pasaron la noche juntos?. —Me preguntó.

Pero antes de que le respondiera escuchamos unos pasos, era Saeng, quien bajaba las escaleras.

—¡Siwon!. —Gritó fuerte y furioso mi nombre.

HyonKo, y yo nos miramos, Saeng, llegó hasta la cocina con mirada asesina.

—¡Creó que todavía no te perdona!. —Dijo HyonKo, quien se sentó en la mesa de la cocina, yo sólo negué con mi cabeza.

—¡Que sea la primera y la última vez que contestas mi teléfono Siwon. —Me lo dijo apuntándome con su dedo índice.

—Ya te dije que pensé que era el mío. — Me defendía.

Saeng, se empezó acercar a mí y yo empecé a rodear la mesa porque sabía que tenía ganas de apretarme el cuello ahí mismo. HyonKo, sólo nos miraba con media sonrisa en su labios, mientras se comía un pedazo de tocino.

—Si no me doliera todo el cuerpo en este mismo momento te apretaba el cuello hasta que se te saltaran los ojos. —Quise reírme pero me amenazó. —Y quita esa sonrisita de tus labios si no quieres que te de un sartenázo y te tumbe los dientes. —Mi pequeña sonrisa se me esfumó cuando miré que agarró un sartén.

—¡Ok...ok... Discúlpame mi amor!. Mejor relajate y siéntate a desayunar.

—No me digas mi amor y tu deja de burlarte HyonKo. —Le dijo a su hermano.

—¡No le diste anoche amigo! Por eso se levantó con ese mal carácter. —Me dijo con burla mi amigo.

—¡Deja de decir estupideces! Éste se metió a mi cama en contra de mi voluntad y no, no me dio y fue porque solo durmió en mi cama. —Respondió él.

—¡Si ese fue el problema mi amor! Porque solo dormí contigo y no te di, ahora mismo subamos a la habitación y te doy hasta que quedes satisfecho para que se te quite el mal genio.

Saeng, me miró más feo y preferí cerrar la boca, le serví su plato de comida y un vaso de jugo, yo me serví lo mismo y me senté lejos de él, dejando en medio de los dos a HyonKo, no me iba a arriesgar a que me clavara su tenedor en los ojos.