Médico Cirujano💉❤️ [EN EDICIÓN]

|•🖤CAPÍTULO 7🖤•|

Maratón 3/4

Yang Mi miraba con enojo y odio a las tres personas que platicaban cómodamente, quería venganza, ¿De que?, prácticamente su excusa de venganza era barata, pueda que haya perdido a su bebe, pero, ¿Acaso Jungkook o Jimin lo provocaron?, claro que no, ella no tomó las medidas necesarias para el cuidado de los 3 meses más riesgosos para el bebé, su malicia y su orgullo no la dejaban aceptar el error que cometió, mataría a esos bebés o incluso mataría a Jimin y a Jungkook para quedárselos y criarlos como si fueran suyos, su sed de venganza aumentó cuando vio cómo Jungkook acariciaba con una grande sonrisa el vientre grande de Jimin que también sonreía con dulzura y felicidad, si ella no era feliz, ellos tampoco.

Yang Mi...

Era la escena más repugnante que había visto en mi vida, ese mocoso se interpuso entre mis planes para seguir jodiendo la vida de Jeon, le otorgaba felicidad y arruinaba todo mi avance, estoy que me hierve la sangre de verlos así de juntos.

Iba a hacer mi primer movimiento contra el mocoso, pero como mi día a sido de la patada, sentí como alguien me jalaba con fuerza y me metía a una camioneta negra, ¡Tenían que estarme jodiendo!, ¿Secuestrada en mi propio plan?, nada podía ser peor, me quede quieta al ver que no me hacían nada malo, solo me llevaban a algún lugar que para mi por ahora era desconocido, habíamos salido de Seúl y eso solo me hizo saber Que sería un largo viaje.

3 horas después...

¡Tenían que estarme jodiendo!, mis planes estaban saliendo mal gracias a estos grandulones que cada que yo me movía me regañaban.

—Deja de moverte de una buena vez maldita niña! ¡Párese que tienes pulgas en culo!—Abrí mis ojos como platos y me indigné, ¿Quien se creía este para hablarme de ese modo? ¿Mi padre acaso?—Cierra la boca maldito guardaespaldas sin bolas, no estoy de humor para aguantar a personas que jodan tanto como lo haces tú—Eso lo Dije más que molesta y me sorprendí un poco por mis palabras, aunque no me arrepentí de ellas, me asusté cuando vi que este hombre me apuntaba con un arma a la cabeza ¡Que demonios!, nadie me deja tener un día tranquilo.

Después de unos 5 minutos más de camino llegamos a una gigantesca mansión, ¡Joder!, aquí podría caber un pueblo entero, los hombres que anteriormente me habían subido a la camioneta me bajaron y me jalearon hasta llevarme adentro de esa mansión, ¿Que carajos estaba pasando?, me aventaron literalmente a la oficina de alguien que ni conocía—¡USTEDES DOS MALDITOS IDIOTAS ME LAS PAGARÁN!—Grite eso mientras veía como estos hacían una reverencia y se iban, eso solo me confundió, hasta que escuche una voz que me hizo voltear.

Seho...

Si tenía que matar a ese odioso mocoso llamado Jimin lo haría, me sirvió mucho venderlo a los clientes hasta que comenzó a ser tan rebelde, me debía demasiado ya con lo que le daba, era con lo que me estaba pagando todo lo que él usaba en casa, ¿Que carajos había hecho mal para que se comportara de ese modo?, nada, por eso seré muy precavido con los movimientos que haga de ahora en adelante. Mi verdadera hija ahora estaba parada frente a mi, la había investigado por mucho tiempo y lo que descubrí solo desató más ira dentro de mi, la mande traer porque pienso unirme a ella para la venganza que quiere, ambos salimos ganando y estoy seguro que no perderemos la batalla, he visto cómo es mi hija y estoy más que orgulloso de ella, la ayudaría mil veces más sin pensarlo.

—Hija más vale que te acostumbres a su presencia, ellos son tus guarda espaldas y tienes que ser condescendiente con ellos—Verla indultarlos de ese modo causaba gracia y orgullo dentro de mi, era igual a su madre y no podía estar más que maravillado con lo que pronto haría mío en la cama, solo debo hacer que confíe en mí para así poder masajear ese cuerpo a mi antojo, no me importa que sea mi hija...
—¿Estas loco o algo así?, ¿porque me llamas "Hija"?—Pregunto eso haciendo comillas con los dedos algo irónica, cosa que solo me hizo sonreír en grande—