29/01/21

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Buenas días, tardes o noches. Como bien sabrás, tuve una charla con la chica más insoportable de toda la escuela, o bueno, en mi caso es la insoportable de la escuela. Como te había dicho, no tengo ánimos de ir a un lugar donde estaría rodeada de personas que no conozco y tampoco me conocen, bueno, según Liz si me conocen por mi historia clínica parece ser. Nunca me acostumbre a las fiestas... no es ahora donde debería comenzar a disfrutar de ellas. No solo me perdí de cumpleaños, de las fiestas de días en la escuela o salidas con mis amigos, sino que había perdido mi vida social. Ya no soy la Eve que solía ser, la inocente, la que creía en cuentos de hadas y finales felices. Eso pasa cuando crecemos, las mayores heridas ya no son rapones en nuestras rodillas... nuestras preocupaciones son más que pensar en que jugar con nuestros amigos, y ahora nuestros padres nos llaman por teléfono para saber cuándo volvemos de las fiestas, ya no se asoman desde la puerta de casa a decirnos que es hora de volver a casa para cenar. A veces tenemos que aceptar que el tiempo se vuelve nuestro mayor enemigo, el solo avanza, no retrocede ni se adelanta. Entonces me di cuenta que, en mi caso, el tiempo no fue mi enemigo, si no mi cambio repentino de vida... hubiera preferido luchar con el tiempo, como los demás.

Volviendo al tema de la fiesta... no sé porque quieren saber más de mi...además de que es por mi historia médica, para ser honesta. Lo único que pienso es que si rechazo a Liz sería peor que antes y si le digo que si me veo obligada a estar en un lugar donde no quiero estar con personas con las que tampoco quiero quedar, no hay una solución fija en esta situación y eso me provoca tanto estrés. No tengo una solución para esto ¿Por qué me pasa esto a mí? Liz... por favor tenías un millón de personas más para invitar y fue justo a mí a quien invitaste. Estaba tan estresada hasta que sonó mi teléfono:

- Hey ¿al final iras a la fiesta? - era Alex

- Hola Alex, lo estuve pensando y creo que mejor no, quien sabe...quizás Liz estaba bajo drogas o algo... no pudo haberme invitado a mí-

- No exageres, quizás si quiere conocerte-

- No exagero, pero y si ¿su intención es otra? –

- ¿A qué te refieres? –

- Ya sabes, a un tipo de broma pesada, como si fuera el punto rojo para un arquero o bueno algo así-

- Ya te dije que no exageres, además yo estaré ahí, no dejare que te pase nada... somos amigos y mis amigos son como una familia para mí y lo sabes-

- Está bien, pero si algo pasa te culpare hasta el fin de tus días-

- Trato...ahora ve a dormir y no te desveles escribiendo-

- Lo hare torpe, buenas noches- luego de despedirme de Alex deje el teléfono a un lado y bueno quería terminar al menos esta carta así que... te quiero y que descanses o lo que sea que vallas hacer.

Con amor, Eve

365 cartas (editando)Where stories live. Discover now