Buenos días, tardes o noches. Te había mencionado que el día de hoy comenzaba la escuela nuevamente, después de tres años no considero la posibilidad de sentirme a gusto con la idea, ya que no recuerdo mucho como era la vida dentro de ella. No recuerdo como socializar, si es que lo hacía, ni tampoco como es que era yo antes del psiquiátrico. No puedo recordar las cosas simples, pero si recuerdo lo mucho que éramos molestadas por ser "extraordinarias" como decías. Creo que es así como pasa, a veces olvidamos las cosas simples, pero no las que nos fue difícil superar.
Liz y su grupo siempre decían que éramos extrañas, que nadie nos aceptaría nunca si seguíamos siendo como éramos, solo que no logro reconocer el hecho de que solo me lo decía a mí, tu solo aparecidas y siempre tenías las palabras correctas en el momento indicado , solo que me decías que las repitiera y que algún día aprendiera a defenderme sola, solo que nunca van a saber que la que se le ocurrían respuestas tan ingeniosas eras tú.
Comencé la mañana de lo más normal posible, solo con la diferencia que esta vez un médico no tocaba mi puerta a decir –hora de levantarse, primera hora del medicamento- esta vez, mi mama entraba a mi habitación a decirme –cariño, es hora de levantarse o llegaras tarde a tu primer día de secundaria- que raro, un día soy la hija loca que abandonaste sin razón específica y al otro soy tu cariño de nuevo. Nunca voy a saber que se sentiría el verdadero primer día de secundaria, ahora solo me quedan 3 años para terminarlo.
En fin, quiero decirte que finalizare esta carta con un deséame suerte.
Con amor, Eve
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365 cartas (editando)
CasualeEve dedica una carta cada día del año a su mejor amiga desaparecida, contando su día a día intentando averiguar dónde pudo haberse ido después de que Eve fue llevada a un hospital psiquiátrico por tres años e intentar averiguar el porqué.
