𝕊𝕨𝕒𝕝𝕝𝕠𝕨𝕖𝕕 𝕓𝕪 𝕕𝕒𝕣𝕜𝕟𝕖𝕤𝕤

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟛.- ℙ𝕒𝕟𝕤ā𝕛𝕒𝕟𝕘𝕦𝕣𝕦

{NOTA DE AUTORA}

Hola personitas!! Sí, sí.. ya sé... es sólo un capítulo por lunes pero me emocioné y... bueno, ya me conocen...

Feliz lectura!

-Andyes98

Xoxo

NARRA MAKO

Caminé lentamente hasta el lugar en el que siempre entrenaba con Hirou.

La noche anterior no había podido conciliar el sueño pensando en todo lo que me había dicho luego de la prueba. La noche se hizo eterna, por lo que, en el minuto en el que consideré que estaría por salir el sol me puse de pie, me vestí y me dirigí a aquel prado con la intención de meditar un poco antes de que llegara mi sensei. ¿Cómo fortalecer mi voluntad?

Suspiré al no encontrar respuesta. Tal vez Naruto podría ayudarme con esto... No conozco a nadie con una voluntad más fuerte que la suya.

Sin embargo, en ese momento no podía contar con su ayuda. Sentí nostalgia por mi hogar nuevamente, por mis amigos y por la simplicidad que solía tener mi vida. Además, pude notar claramente al temor hacerse un lugar en mi pecho. Me aterrorizaba perderme a mí misma y verme envuelta en una imparable sed de sangre. Sacudí la cabeza alejando aquellos pensamientos. No estaba cerca de llegar a ese punto aún, así que, de momento, no era necesario pensar en eso.

Una vez en el prado me senté en el centro con las piernas cruzadas, puse mis manos en mis rodillas y cerré mis ojos concentrándome.

Pude sentir casi de inmediato el chakra de alguien que se acercaba a mí a paso calmado.

Sonreí de lado unos segundos antes de decidir ignorarlo, después de todo, se encontraba bastante lejos y, por su velocidad, tardaría bastante en llegar por lo que tendría al menos veinte minutos más de paz.

Perdí la noción del tiempo en mi meditación hasta que sentí que el dueño del chakra que había percibido hace un momento se sentaba a mi lado.

-¿Desde cuándo madrugas, Mako?

Abrí uno de mis ojos observándolo de lado para luego volver a cerrarlo y sonreír con suficiencia.

-Desde que no paso las noches en vela conversando contigo - respondí burlona - tener tiempo para dormir saca lo mejor de mí.

Dejó salir una suave risa.

-Sabes que te encantaba encontrarte en el lago conmigo.

-Nunca dije que no me gustara, Sasuke - dije abriendo los ojos al fin, sabiendo que no dejaría que medite en paz.

-Me gusta este lugar - dijo mirando tranquilamente a su alrededor - ¿entrenas aquí?

-En realidad entreno en todas partes, pero aquí venimos a meditar antes de entrenar. Luego íbamos a buscar algún animal herido o algo para practicar. Mantuvimos el número de víctimas al mínimo.

-Ya veo...

Dejé salir un suspiro y me recosté sobre la hierba. Vi de reojo a Sasuke imitando mi acción. Se veía como alguien que quería decir algo y no encontraba la manera.

-Nunca hablamos de ese día - suelta de repente, llamando toda mi atención de inmediato.

-¿De qué día? - evidentemente sabía de qué hablaba, pero prefería hacerme la desentendida en ese tema.

-Del día que nos fuimos... De el día en el que lo escogiste a él y aún así viniste conmigo.

Su tono de voz era frío, distante, y sonaba claramente celoso. Jamás había pasado por mi cabeza que pudiera sentirse de aquella forma respecto a ese día, después de todo, había dejado todo por él, incluyendo a Neji.