Cuenta atrás

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Ya.

POV Ninna

Miro confiada a mi amiga y asiento con la cabeza, es la hora de empezar. Ella me guiña el ojo y ambas tomamos nuestras llaves. Abrimos las puertas con el máximo cuidado posible, los guardias estaban cenando pero es mejor evitar todos los riesgos. Hacemos una cuenta atrás con los dedos para empezar a correr. Definitivamente, esto sería imposible de olvidar en el futuro, ya sea para bien o para mal. Llegamos al final del pasillo y nos paramos a tomar aire, la parte más peligrosa comienza ahora. Empezamos a subir las escaleras con cuidado, cualquier ruido podría delatarnos.

Logramos llegar arriba, no parece haber nadie pero por si acaso vamos por la sombra, debemos darnos mucha prisa si queremos salir sin demasiados riesgos. Entramos en el pequeño almacén que hay y empezamos a agarrar chubasqueros y cosas que puedan flotar en el agua, no podemos cargar con demasiados pues deben caber por el hueco y no tenemos tiempo suficiente.

Salimos del pequeño almacén y veo la puerta donde esta el despacho del guarida jefe. Recuerdo el colgante que me había mostrado un día, hace demasiado que no lo tengo, necesito llevármelo, es mi último suyo. Hago unas señas a Kat de que se detenga.

"Necesito recuperar una cosa." La susurro. Ella se señala la muñeca y niega con la cabeza.

"Lo necesito, baja y ayuda al resto, en cuanto lo recupere bajo con vosotras." susurro en forma de suplica. Vuelve a negar y me tiende lo que lleva en sus brazos.

"Iré yo. ¿Qué necesitas?" suspira con frustración.

"Un colgante, de ella" respondo con urgencia, se nos agotaba el tiempo y no podíamos perder esta oportunidad, pero yo no podía perder el collar. Katherina asiente y antes de alejarse se acerca a mi oído y susurra:

"удачи, я люблю тебя " besa mi mejilla y se aleja dejándome sin entender lo que significa.

"Спасибо " susurro yo al aire antes de bajar con cuidado otra vez las escaleras. ¿Cuánto quedaba, cinco minutos? ¿Menos? Llevo lo que habíamos sacado del almacén encima cuando empiezo a escuchar un poco de barullo en el comedor. MIERDA. ¿¡Justo hoy tenían que salir antes de comer!? ¡Llevo meses estando atenta a los horarios de los guardias y tienen que salir hoy antes! Empiezo a soltar todas las maldiciones en italiano que conozco en una voz apenas audible.

Me quedo quieta en la mitad de las escaleras con todos mis músculos en tensión, cuando empiezo a escuchar una canción. Trato de contener la risa nerviosa y sigo bajando mientras escucho como los guardias cantan el cumpleaños feliz a uno de los de la sala. Cuando estoy abajo me acerco a las celdas en las que se encuentran el resto. Sonrío y las hago una señal para que salgan. Thaira y Mabel parecen un manojo de nervios, Mèlanie tiene un rostro inexpresivo, después muestra una fría sonrisa que me provoca un escalofrío. Esa chica a veces daba verdadero terror.

Las tres salen pero la española parece que no se tiene en pie. Le papillion la sujeta para que no se caiga, Mèlanie había apoyado mucho a Mabel desde que había matado a aquel chico. Le susurra algo al oído, ella trata de ponerse recta y de avanzar lo más rápido posible hacia nuestro hueco. Mientras tanto entrego a Thaira unos cuantos chubasqueros. También avanza hacia la salida.

Miro hacia arriba, esperando ver a Katherina bajar, ¿debía subir a ayudarla? Estaba tardando bastante, o al menos es lo que me parece. Veo que las chicas me hacen señas de que vaya, no queda demasiado para que los guardias salgan y de ahí pueden pasar dos cosas distintas, o bien nos pillan intentando huir y estamos todas muertas o nuestras caras aparecen en todas las noticias mientras nosotras estamos fugadas. Al final decido ir con ellas, Kat es una profesional, ha escapado de muchas situaciones y ha practicado mucho, ella es capaz. Corro hacia el pequeño baño para sacar las cosas que llevo encima, el resto ya estaban fuera.

POV Katherina

Corro hacia el despacho del jefe de seguridad, allí debería estar lo que busco. Con algo de frustración y desesperación intento abrir la puerta. Cerrada, ¿por qué pensé que tendría la suerte de que estuviese abierta? Bufo un poco cuando escucho el ruido de abajo. Con todas mis fuerzas empujo la puerta con mi cuerpo, solo espero que no se haya escuchado.
Entro y rápidamente empiezo a buscar, en todos los cajones, no puede estar demasiado lejos.

Un recuerdo me viene a la memoria, el día que entré aquí dentro, y de pronto recuerdo donde están todas nuestras cosas. Un mal sitio para visitar ahora mismo, la entrada.

Salgo de allí, tratando de ir lo más rápido pero silenciosamente posible. ¿Cuánto tiempo me queda antes de ser descubierta? ¿5 minutos? No creo, seguramente se menos tiempo. ¿De verdad me estoy jugando la vida por un colgante? No, es por ella.

Corro todo lo que puedo, porque mi vida depende de ello. Una pequeña sonrisa asoma por mis labios, siempre que estaba en una misión me gustaba pensar que el espíritu de mi padre me acompañaba y esto me ayudaba a mantener la calma. Hoy, en la que seguramente sería mi última misión vuelvo a pensar en él. Puede que la adrenalina también me ayude a mantener una sonrisa. No tardo prácticamente nada en llegar a la salida, donde un guardia solitario come mientras observa el teléfono, sus carcajadas resuenan por la sala de control. Con rapidez logro llegar a la zona con los efectos personales y procuro buscar con velocidad el objeto que podría matarme en cualquier momento, pero por desgracia, somos demasiadas las presas en este húmedo y frío lugar. Descuido un poco el esfuerzo que estaba haciendo por que no se me escuchará mientras busco con frenética desesperación.
Vamos, lo tengo que encontrar rápido, me repito a mí misma. Apenas me doy cuenta de que las risas han cesado cuando escucho como el mango de la puerta comienza a girar. Todo parece ocurrir a cámara lenta a partir de ese momento.

¡¡Hola!! Hacía mucho tiempo que no publicaba y ya tenía ganas. Esto va llegando a su final y ya estoy con el siguiente capítulo, casi terminado para publicarlo pronto.
Si sigues leyendo esto espero que te esté gustando.

AlcatrázDonde viven las historias. Descúbrelo ahora