28. 내기

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Pov's Jimin

Como si de una pelicula se tratara, todos voltearon a vernos. Casi parecía que nos moviesemos en camara lenta por los pasillos de la Universidad. Mi rutina habitual de los lunes por la mañana, se había convertido en una pasarela sin fin hasta mi salón. En mi cabeza gritaba como loco por toda la atención que habiamos levantado, pero aún asi me concentre en seguir las indicaciones de Jin.

Paso firme.
Mirada al frente.
Y una expresión de puto amo.

No se que tan bien me esté saliendo eso último, pero por la mirada complice que me dedico el mayor, parece que lo estaba haciendo bien.

Me instale en mi lugar como de costumbre, separandome así de los otros dos. Ignore el cuchicheo que tenían los demas, manteniendo mi expresión serena.

La clase paso sin mayores contratiempos, con la única diferencia de que todos hablaban de mi entre ellos, provocando un murmullo que duro toda la hora.

Cuando el tiempo de la materia se termino y me disponía a guardar mis cosas, una de mis compañeras se animó a acercarseme, luego de que su grupo de amigas la empujaran hacia mi lugar.

– Jiminshi, disculpa si soy descortes pero las chicas y yo estamos algo curiosas de por qué tu cambio de look, ¿Nos dices? – preguntó nerviosa la mas joven.

Me quede en silencio unos segundos pensando que responderle, hasta que me decidí por decirle.

Lo hice para cobrar una apuesta...

No sabría decir que clase de expresión puse, pero la chica se sonrojo antes de irse corriendo hacia su grupo de amigas.

Suspire, seria un día largo.

.

.

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Pov's Yoongi

Tres horas encerrado en el estudio de música, antes de poder tener el principio de una nueva melodía que estaba creando.

Salí de mi escondite, agradecido de que hoy no tuviese que presentar ninguna materia, ya que las unicae que me tocaba (Redacción y composición) habian dado el día libre para que adelantemos nuestro trabajo final.

Me acerque a la maquina expendedora de bebidas, eligiendo un café para acabar con cualquier signo de cansancio que pudiera haber en mi.

Fuí hasta mi casillero, y tome el bolon que había guardado para el menor, no era la gran cosa, pero sabia que le encantaba que le regalara cosas dulces.

Revisé su horario que convenientemente tenía para no tener que buscarlo por toda la universidad, y notando que a esta hora estaba libre, me dirigí a la cafetería.

En mi camino hacia el lugar no pude evitar escuchar una par de conversaciones mientras me hacia paso entre los demas estudiantes.

No le di demasiada importancia sino hasta que escuche un apodo bastante usado por los miembros de otras carreras para hablar de mi novio.

El mochi del departamento de baile.

Active mi sentido auditivo mientras aceleraba mi paso, captando algunas frases sueltas sobre un tema que no tenía claro.

¿De que cambio de look hablaban?

¿Cabello azul?

¿Sensualidad suprema?

Trote un poco, desesperado por llegar al comedor. Cuando al fin atravese las puertas del dichoso lugar, note que todos parecía mirar hacia la misma mesa.

𝙰ú𝚗 𝚗𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora