❛❛ 보상 ❜❜ ❀

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Pov's Yoongi

Sentí frío de repente, y luego un peso sobre mi cuerpo. No era aplastante, pero se sentía raro.

Intente removerme, sólo quería estar cómodo otra vez.

Quien diablos es el que no me deja dormir.

El peso sobre mis caderas no desapareció. Al contrario, este empezó a moverse haciendo presión.

Como relámpago la excitación llego a mi. Casi creía estar en un sueño húmedo por lo bien que se sentía.

Pero algo... algo andaba mal.

Levante mis manos y tome las caderas que bailaban sobre mi erección.

La presión que hacian mis dedos contra la piel era demasiado realista para ser un sinple sueño.

Por lo que aún algo confundido, abrí los ojos.

Sintiendome desorientado. Pestañee un par de veces para adaptar mis ojos a la escasa luz.

Para asi poder apreciar la chispeante mirada que Jimin me regalaba.

– ¿Que esta pasando aquí pequeño mochi? –

– ¿Acaso no se nota? –

Menciono altivo, antes de mover sus caderas de forma celestial.

– Estas jugando con fuego,
¿Lo sabes? –

Dije mientras el agarre de mis manos se incrustaba sobre su cálida piel.

– Si, lo sé –

.

.

.

{10 minutos antes}

Pov's Jimin

Envuelto entre los delgados brazos del mayor, no sentí frío alguno.

Tras nuestra complicada charla, habiamos hecho las pases.

Al parecer, somos pareja ahora. Cosa que todavía no termino de aceptar.

En verdad estoy jodido. Aún mas cuando caí en cuenta que nunca recompenze al mayor.

Me di valor tantas veces, y al final no hice nada.

Pero como si la suerte me sonriera. Recibí una enorme señal de ayuda.

Representada como un firme pedazo de carne que se presionaba contra mis nalgas.

Eran apenas las 6 de la mañana, si acaso habiamos dormido unas 5 horas.

Pero eso no me detendría, estoy seguro de que a yoongi le encantará esta forma de despertar.

Es así que acomode al mayor de espaldas en la cama. Retirando con cuidado sus pantalones largos de dormir.

Silbe cuando observe el prominente bulto tras sus boxer negros.

Preguntandome como es que siendo tan delgado la puede tener así de gruesa.

Estuve tentado a tomarlo en mi boca, pero la discusión de ayer, habia hecho mella en mi.

Además, aque lado morboso de mí, estaba curioso de como se sentiria tener tremendo manjar entre las piernas.

Con cuidado monte sus caderas. Dejando caer mi peso suavemente.

La fina tela de mi ropa interior me dejaba sentir a la perfección la silueta de su miembro. Llenandome de entuciasmo y placer.

Cuando despues de un par de minutos en los que agarraba confianza, las venosas manos del mayor tomaron mis caderas.

Supe que estaba por empezar la actuación. No iba a dejarme llevar por el mayor. Yo tendría el control esta vez.

𝙰ú𝚗 𝚗𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora