25

59 3 0
                                    




❄️




Madie

Estaba en la biblioteca buscando un libro para estudiar, los exámenes se acercan y Aunque no descuidé los estudios han pasado muchos sucesos los cuales me han impedido dedicar me al 100%.

La señora Andrews me agradeció por haberla sustituido las semanas pasadas pues su nieto estaba enfermo, me dió una caja de sus galletas caseras, son deliciosas.

Alcancé unos libros que estaban hasta arriba, los bajé y puse contra mi cuerpo.

Necesito concentrarme.

Ayer fue el mejor día de todos, tuve una cita con mi novio, Lucas.

Acomodé mejor mi mochila para ir hacía las mesas, no me fijé mucho estaba un poco distraída pues choqué contra una chica.

Sus cosas y las mías cayeron por todos lados, haciendo que la mayoría volteara a vernos. No me dolió, pero parece que ella se golpeó un poco el rostro.

- ¡Discúlpame! De verdad lo siento - Susurré recogiendo nuestras cosas mientras ella sostenía su rostro - ¿Estás bien? Que pena, perdóname no te ví - Le di sus hojas y estuche.

«"Madre Santa....pero....se parece mucho a mi"»

- No...te preocupes solo fue un leve golpe, estoy bien de verdad - Me sonrió, pareciera que los golpes no le hicieron mucho, pero tenía unos moretones en el cuello, trataba de ocultar los con una bufanda pero alcancé a verlos, no quería incomodar la - Discúlpame tu a mi, no te ví - Me dió mi bolso.

«"Estoy asombrada por la similitud, pero parece simpática"»

- Madie, un gusto en conocerte, aunque no fue en la mejor situación - reí.

- Megan, el gusto es mío - Estrechó mi mano.

- ¿Eres nueva aquí? Nunca te había visto, ¿En qué año estás? - Su ropa era neutra , tenía una gorra y caminaba algo erguida como si quisiera pasar desapercibida.

- No tanto, llevo un meses aquí aunque no conozco a muchas personas, no suelo relacionarme con facilidad, estoy en último año.

Y vaya que logró su cometido, no la había visto.

- ¿En serio?, Si quieres acompáñame a almorzar, te debo un café o algún batido por el golpe en tu rostro de verdad lo siento - Le hice una leve reverencia en modo de juego, se veía simpática.

- Ah, no es necesario...

Pareciera que no le gusta la atención.

- Insisto, por favor déjame invitar te algo.

Dudó un poco pero me aceptó la invitación.

- Está bien...

- Perfecto, vamos a tomar lugar en la cafetería podemos estudiar después.

[...]

- Dime, ¿De dónde eres?

Waiting for youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora