❄️Noah Brown
- ¿Me da daría unos del 8 por favor? - Regresé los tacones color rosa metálico a la vendedora.
- Claro que sí, ya vuelvo.
Me senté a esperarla mientras tanto recordé el día en que Dominic y Lucas discutieron, nunca habían llegado a los golpes, ciertamente Jason y yo no los conocemos desde siempre pero si lo suficiente para saber que eso no era normal entre ellos.
Recuerdo el día que Dominic llegó a la escuela, Jason y yo estábamos hasta atrás del aula y en eso la maestra lo presentó, se veía muy serio y solitario pero tenía un aura dura, así que Jason y yo decidimos hablar con el después de la clase para llevarnos bien, se veía buen chico y vaya que lo es, solo que a veces se le sale un poco lo estúpido, es hombre ¿Que esperaba?, Okey ya fuera de broma, charlamos en la hora de receso y nos hicimos buenos amigos después de unas semanas. Sin embargo, seguía serio a veces, se veía muy solo aún con nuestra compañía, pero todo cambió cuando Lucas llegó.
Fue un Viernes cuando Lucas llegó, estábamos en educación física corriendo alrededor de la cancha cuando Dominic se detuvo a mirar a la entrada, fuimos con él y escuchamos un "¿Creíste que te ibas a librar de mi tan fácilmente?" un chico alto, castaño, ojos grises, un acento británico muy marcado y con aura amigable venía con el uniforme y una gran sonrisa.
Dominic corrió y se le tiró encima feliz, revolviendo el cabello del chico para molestarlo, Jason dijo que parecían muy amigos así que nos acercamos, se trataba del amigo de toda la vida de Dominic, Lucas.
Desde ese entonces los 4 nos hicimos muy amigos pues los amigos de Dominic son nuestros amigos, forjamos una amistad muy linda.
- Aquí tiene - Una voz femenina me sacó de mis recuerdos.
- Gracias - Contesté y fuí a pagar los zapatos, una vez fuera de la tienda me puse mis gafas de sol, era un día muy soleado, saqué las llaves de mi coche y subí dejando la bolsa con los tacones en el lado del copiloto, toqué un poco mi cabello para luego disponerme a conducir hasta la casa de los Evans, está tarde quedamos para ir a la playa al auto cinema, pasarían "IT: Capítulo II", no soy muy fan de las películas de terror pero para pasar un rato agradable con los chicos nunca diría que no.
Después de 20 minutos llegué a la residencia de los Evans y bajé junto con la bolsa, toqué el timbre mientras sacaba mi celular de mi bolsillo, miré que tenía varias llamadas perdidas de los chicos y muchos mensajes sin leer en el chat grupal que tenemos.
Sin mirar escuché que la puerta se abrió.
- ¡Ya vine mamá!
Una vocecita que bien conozco me abrió la puerta, una Rosaline todavía en pijamas y con una mascarilla rosa me miraba algo apenada, la conozco bien aunque ella a mi no, es muy glamorosa y no le gusta que la vean en fachas, aunque en lo personal me parece muy lindo.
- Noah.... Hola, pasa - Talló su nuca mientras bajaba la mirada, no la miré, pues se veía incómoda.
Pasé en silencio después de responderle con un simple hola y un gesto con la mano, me senté en la sala mientras la señora Evans veía hacía mi.
- Noah querido, ¡Que gusto verte de nuevo! - Me abrazó.
- Igualmente señora Evans - Correspondí.
- ¿Gustas agua, galletas o algo?
Ciertamente me encantaría pero vamos de salida y comeremos allá.
- No, gracias señora los chicos y yo comeremos más tarde.
- Pero si ellos ya se fueron - Dijo Rosaline.
- ¿Qué? - La miré, ¿Se fueron sin mi? ¿Se atrevieron a abandonarme? Que traidores ya ni Judas.
- Si, dijeron que te avisarían por el camino pero llegaste aquí.
Me puse a revisar mi celular, ¡MIERDA! Todos esos mensajes decían que ellos se adelantarían para agarrar un buen espacio.
- Mierda - Susurré.
Rosaline rió.
- Tengo que irme - Estaba por irme cuando recordé que tenía la bolsa de los zapatos en mano, hasta ahora siempre había Sido muy serio con ella pero no sé por qué ahora mismo me puse un poco tímido.
- Ah por cierto Rosaline - Le estiré la bolsa y ella lo tomó.
- ¿Qué es esto? - preguntó.
- Son unos zapatos, la vez de la pelea entre Dominic y Lucas miré que te echaron a perder tus tacones nuevos así que, aquí están - metí mis manos a los bolsillos.
Rosaline sacó la caja de la bolsa y la abrió, sus ojos brillaron pues parece que dí tanto con la marca y con el diseño, eran los mismos zapatos.
- ¡Ahh! ¡Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias! - Sonrió y me dió un abrazo, no lo esperaba así que me tense un poco, tragué saliva y desvíe la mirada - ¡Oh! Lo siento, no quería.... incomodarte
Se separó y tomó distancia.
- No, está bien solo me tomaste por sorpresa - Sonreí levemente.
- Eres muy lindo, gracias no fue tu culpa y aún así tú los compraste - Volvió a sonreír.
En eso me entra una llamada, es de Dominic.
📳
- ¿Hola?
- Viejo, ¿Dónde estás?
- Estoy en tu casa, no miré los mensajes hasta que llegué acá
- Pues date prisa, la película no tarda en empezar
- Está bien, voy para allá
📲
- Bueno, ya me voy - Me dirigía a la puerta cuando la señora Evans venía hacia acá - ¿Sabe que señora Evans? Siempre si quiero galletas para el camino - Sonreí.
La señora Evans me dió un toper con varias galletas para el camino, salí de la casa y casi llegando al coche Rosaline me habló.
- ¡Noah! - Corrió hacía mí - Tengo una duda, ¿Cómo supiste mi talla?
Mierda, ¿Qué le digo? ¿Qué le digo? O.o
- Ahh, bueno Dominic calza del 12 así que me imaginé que tú calzas la mitad - Sonreí.
Rosaline soltó la más grande de las risas y sonrisas que pude ver.
- Eres muy gracioso, de verdad gracias, que se diviertan - Se despidió y regresó dentro de la casa.
Sonreí, subí al auto y comí una galleta.
¿Qué si como supe tu talla? Pff, ya lo sabía, no es algo que no pueda saber.
Pensé.
❄️
ESTÁS LEYENDO
Waiting for you
Teen FictionCuando menos te lo esperas te das cuanta de que no todas las personas son malas y que puede haber lugar para el amor~ Madison Davis una chica de 17 años amante de la lectura y apasionada de las cosas pequeñas de la vida, siempre con una linda sonri...