Sobre sus pasos

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Recordar aquello se había vuelto parte de su vida, una llena de arrepentimientos. Tenía claro que su actuar no fue lo mejor, al principio seguía pensando que solo le había regresado lo que merecía.

No obstante  con el pasar de los días su conciencia no lo dejaba tranquilo y más aún al notar la distancia entre los norteamericanos, creyendo que era normal pues escucho que consiguieron pareja y es correcto pasar tiempo con ella, sin embargo su actuar se volvió frío y cortante.

Chile no era así, la circunstancia se presentó e impulsado por los celos arremetió. Cansado de los continuos desvelos tomo las llaves del coche, iría a disculparse con el mexicano. No lo había perdonado, pero le demostraría que era mejor representación.

Masajeo rápidamente sus hombros, la pesadez de imaginar las miradas recriminatorias de los demás y
murmullos en contra de sus hermanos por el apoyo que le brindaron le hicieron querer cambiar de opinión.

Paro un minuto al lado de la carretera, reflexionó sus acciones dándose el valor necesario, él los involucró y él debía sacarlos. Tomo su celular busco los números frecuentes y llamó al argentino.
Al ser uno de los primeros en estar a su lado, decidió comunicarle lo que planeaba.

El contrario amablemente se ofreció a acompañarlo, al principio pensó en rechazarlo, más creyó prudente tener un soporte, justo le termino de dar los datos de su ubicación cuando fue víctima de un estrepitoso accidente.

Despertar del coma le llevo tres semanas, como recuerdo de aquello le quedó una cicatriz en medio del hombro y el cuello. Más no le importo, al ver a su familia reunida le hizo recordar lo que le había arrebatado a México.

Un nudo se formó en su estómago, debía confesar, los presentes guardaron silencio. Chile espero paciente sus reclamos en cambio recibió un abrazo por parte del español.

Este le comunico la desaparición de su hermano, ahora dejo de sentir molestia en su estómago para pasar a ser un fuerte dolor en el corazón. Nadie lo culpaba, solo se encontraban felices de no perder a otro integrante de la familia. Sin embargo esto le dolía mas que ser abofeteado por alguno de ellos.

Muchas veces intento comunicarse con el groenlandés y aclarar todo, pero como habrá notado no tuvo éxito. Cómo dijo al principio, no busca perdón el cargará con eso, solo quiere limpiar el nombre de México, es lo mínimo que se merece.

Groenlandia aún no hemitia palabra alguna, el chileno se levantó de la mesa sin decir nada, pero fue detenido por un agarre en su muñeca - Yo soy tan culpable como tú- Dijo el bicolor. Explico que tampoco indagó lo suficiente en el asunto dejandose llevar por sus propias conclusiones, juzgar a Chile solo sería un acto hipócrita intentando justificar su falta.

-Lad os finde Mexico ... (Encontremos a México...)- Expreso la isla, al mismo tiempo que soltaba la muñeca del contrario y extendía la mano, continuando el diálogo -Sammen og undskylder vi begge (Juntos y así ambos nos disculparemos)- El chileno no aguanto y estalló en lágrimas, Groenlandia lo abrazo a modo de consolación aún con los sentimientos mezclados entre enojo, arrepentimiento, culpa y tristeza sellaron la promesa.

Una chica interrumpió el bello momento al llamar al bicolor, puesto que la ONU estaba listo para recibirlo. El latino se despidió nuevamente lamento lo que les hizo, para después perderse a lo lejos cruzando esas enormes puertas de cristal que daban al corredor principal.

-Følg mig venligst (sigame por favor)- Indico la humana, el bicolor obedeció y continuo con su recorrido hasta toparse con las puertas caoba de la oficina de la organización, tras unos cuantos golpes de la mujer la respuesta afirmativa fue dada. Groenlandia entro, un leve rechinido se logró persibir al estar todo tan quieto, recibido por un saludo del azulado dando comienzo al interrogatorio.

Por otra parte, los hermanos habían ido al correo, pues si el sobre portaba estampilla era seguro que tendrían información del individuo que la dejo para su posterior entrega, sin embargo los humanos no recordaron nada útil que les pudiera ayudar y para colmo en las cámaras de seguridad no registraron algo sospechoso.

Después de horas buscando de un lugar a otro, decidieron regresar a casa. Para sorpresa de ambos el groenlandés ya se encontraba ahí, al parecer tardaron más de lo debido ya que muebles estaban fuera de su habitual sitio, puede que se aburriera de esperar y organizara el lugar.

En un tono apagado pero serio les dijo que tenían que hablar. Comunico de su encuentro con el chileno y las preguntas tratadas en el interrogatorio, así como la información recabada de fuentes confirmando la historia del latino, puesto que nunca se informó al exterior sobre tal acontecimiento.

No es que fuera extraño, muchas veces se omiten cosas para evitar un problema mayor, pero desde ahora verificaria cada historia o rumor, ya una vez se dejó engañar y terminó perdiendo a su amor está vez sería distinto.

Escucharon atentamente, las dudas y los reclamos no se hicieron esperar, llegaron a la conclusión de que debían mantener el perfil bajo, ninguno tomo a bien la confesión del chileno, en especial el canadiense que terminó a México por los problemas familiares que creyó causarle el apego de los norteamericanos

Hasta ahora confiaron más en lo que decían terceros que en el propio mexicano, enmendarían su error volviendo sobre sus pasos, por el momento dejarían del lado el sobre con la dirección pasando directamente al guatemalteco.

Si bien podían dividirse y cubrir mayor terreno, decidieron quedarse en grupo de esta forma si atacaban sus debilidades las cubrirían entre ellos evitando entrar en conflicto. De este modo serían más productivos esperando encontrar la verdad entré enmarañados hilos de mentiras.

Después de hacer algunos arreglos fueron a visitar a Guatemala en la habitación del hotel, por suerte la recepcionista les confirmo la estadía de la representación. Sin perder más tiempo continuaron con su camino, tocaron la puerta y esperaron.

Poco después está fue abierta dejando a la vista a un mojado bicolor celeste con la camisa abierta y una toalla envolviendo sus delgados cabellos azules. Gracias a la prisa de salir inmediatamente de la ducha vistiendo lo primero que encontró, olvidó por completo preguntar quién era, de hecho si lo hubiese sabido no les abriría.

Un gesto de desagrado se hizo presente en su rostro, recobro la compostura para preguntarles de su repentina visita, más solo lo hacía por educación, si no le convencía sus respuestas planeaba cerrarle la puerta en la cara sin importar lastimar a alguno.

USA respondió malumorado como si fuese lo más obvio del mundo, tal como lo planeo el contrario estaba a punto de cerrar, pero fue obstruido por los bicolores norteamericanos. Deseaban volver a escuchar la historia, pero está vez de los labios del guatemalteco.

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