Alpha Heirs (l. s.)-Omegaverse AU

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Pasaron a Louis a una habitación privada en el área de recuperación post parto y a la media hora le llevaron a la bebé para que pudiera alimentarla por primera vez. Era demasiado extraño darle pecho, siendo hombre, pero debía acostumbrarse.

Le daba cosquillas y pudo notar que la pequeña comía bastante. Harry veía con adoración como él cuerpo de Louis se pudo adaptar para darle lo mejor a su bebé y como su novio parecía un experto con la maternidad. No parecía que fuera un torpe adolescente ignorante.

—Te ves tan hermoso alimentando a la bebé- susurró con una torpe sonrisa –lo haces con tanta naturalidad que pareciera que no eres primerizo y que has hecho esto toda tu vida.

—Bueno, hago lo mejor que puedo- se sonrojó mirando a su hija que parecía que su vida dependía de no soltarse de su pecho un poco abultado por la leche acumulada.

—Pues te estás luciendo- dijo suspirando enamorado.

Pasaron unos minutos y la enfermera le indicó como acomodarla para poder sacarle el aire que podría haber entrado mientras comía. Ya que todo estuvo realizado, la bebé se durmió tranquilamente en los brazos de Louis, enterrando su pequeña naricita en el pecho del omega, sintiendo su aroma familiar.

Unos golpecitos se escucharon en la puerta y Johannah y Anne aparecieron tras la puerta con una sonrisa emocionadas.

Harry les hizo una seña para que guardaran silencio, sin borrar la sonrisa de su rostro. Es que era imposible, estaba muy feliz de poder presenciar este momento.

—Hola- murmuró Anne -queríamos ser las primeras en conocer a la hermosa bebé.

Louis sonrió y descubrió el rostro de la bebé que estaba dormida en sus brazos.

—Mamá, Anne, les presento a Carysse Tomlinson. Ella es su nieta.

—¿Carysse? - preguntó Johannah extrañada.

—Significa "amor". Queríamos que tuviera un nombre que representara el amor y, bueno, Carysse es amor en galés- sonrió el rizado –es algo original y, bueno, creo que...si...

—Es precioso, chicos. De verdad, muchas felicidades.

El día se fue recibiendo visitas de todos los seres queridos de ellos. Sus nanas, Mark, Liam y Maya, Niall y Zayn.

Harry se dio cuenta de que su papá en ningún momento llegó y entendió que él jamás iba a querer a su nieta como parte de su familia. No podía decir que no le afectaba, porque si le dolía. Al final, era su padre, y él se imaginaba que, en el momento en el que tuviera hijos, Des iba a ser el primero en aparecer y querer conocerles.

Sin embargo, estaba consciente de que ya no sería así, porque Des prefería desconocer a su hijo y a sus nietos antes que aceptar algo como eso.

Harry entendía que su papá, a quien creyó su héroe y ejemplo a seguir tantos años, jamás iba a sentirse orgulloso de él.

Estaba en la cafetería del hospital con su mamá, mientras Louis y la bebé dormían un poco.

—¿Por qué Tomlinson y no Styles, o Tomlinson Styles? - preguntó la mujer curiosa.

—No quiero que tenga un apellido tan sucio como el de Des. Lo he estado pensando y, cuando me case con Louis, el que va a llevar el apellido del otro soy yo. Y siento si esto te daña mamá, porque tú también llevas ese apellido y que te hubiera gustado que fuera mi pareja quien se cambiara el apellido al mío, pero no quiero seguir siendo un Styles, porque pensarán que soy como mi papá, y no me gustaría que pensaran eso, tampoco quiero manchar el nombre de Louis o el de mi hija o de los hijos que tengamos en el futuro.