Abrí los ojos lentamente al sentir como unas manos me movían bruscamente.
— ¡Ya despierta bella durmiente! —. Los abrí por completo y me di cuenta de que era mi amiga
— ¿Que te pasa? —. Frunci el ceño molesta
Mire la hora en la mesita de noche y eran casi las ocho de la noche.
— Vine a despertarte para irnos de ¡Fiesta! —. Hablo con emoción
Negué con la cabeza, no me sentía de ánimos para salir de fiesta.
— No tengo ganas —. Dije dándome la vuelta para no verla
— ¡Ohh vamos, desde que estas con Aaron casi no nos vemos! ¡Eres una mala amiga! —. Reí ante su comentario
Pero pensándolo bien tenia razón desde que estaba con el ya no salia con ella.
Se dio la vuelta y se puso enfrente de mi.
— ¡Anda di que si! ¿Si? —. Puso cara de perrito
Rodé los ojos con una sonrisa en mi rostro.
— Si —. Afirme
Ella salto de la cama mientras se dirigía a mi armario, me levante curiosa observando lo que hacia.
Ella se movía de aquí para halla moviendo con brusquedad la ropa.
— Muy viejo —. Hablo sobre un vestido que tenia desde hace años
— Muy anticuado —.
— Muy tapado —. Reía al ver como describía a mi ropa
— ¡Ahh este sera! —. Salio y me mostró un hermoso vestido rojo ceñido al cuerpo con brillos y mas arriba de la rodilla
— ¡Este usaras! —. Hablo enérgica
Negué con la cabeza repetidas veces, no lo podía usar era muy provocador.
— ¡No puedo usarlo, es muy provocador! —. Explique
— ¡Hay y eso ¿que?! —. Arrugo la frente confundida
— Es que ahora estoy con Aaron —. Trate de convencerla
— Yo no lo veo por ninguna parte —. Hablo con ironía
Observe una vez mas el vestido, de verdad era hermoso.
Rodé los ojos y tome entre mis manos el vestido, ella sonrió como loca y se puso a buscar otro para ella.
(...)
Después de tanto tiempo ya estábamos listas, ella admiraba el vestido sobre mi cuerpo y yo el de ella.
Se puso uno negro con un escote muy pronunciado, pegado a su hermosa figura.
— ¡Wow te queda hermoso amiga! —. Dijo tapándose la boca con sus manos
Fingiendo que salían unas cuantas lágrimas, reí ante sus ocurrencias.
— ¡Jajaja ya deja de decir tantas locuras! —. Camine al espejo y me sorprendí al darme cuenta de que no me quedaba mal
Suspire pasando mis manos por el vestido recordándolo a el, al amor de mi vida.
— Sabes que el te ama y muy pronto regresara —. Sentí las manos de mi amiga en mis hombros
Mi corazón se oprimió al hablar de el, mis ojos se sintieron aguados pero no deje que ninguna lágrima saliera de ellos.
— Lo se, lo se —. Sonreí tristemente tomando una de sus manos
— ¿Y a donde me llevaras? —. Pregunte cambiando de tema
Su rostro cambio a uno de felicidad y eso me hizo sonreír.
— ¡A una de las mejores discotecas de la ciudad! —. Brinco de la emoción
— ¿Y me vas a decir donde es? —. Alce una ceja dudosa
— ¡No, es sorpresa! —. Negó repetidas veces con la cabeza
Suspire resignada ante su comentario sabia que ella era muy terca como para insistir.
— ¡Bueno vámonos, por que se nos hace tarde! —. Tome mi bolso y ella hizo lo mismo
Caminamos a la puerta y comenzamos a bajar las escaleras.
Busque con la mirada a Cristina, pero no la encontré.
Abrí la puerta y deje que el aire frío chocara con mi rostro.
El chofer no estaba, frunci el ceño al darme cuenta de que estaba estacionado el auto de mi amiga enfrente de la puerta.
— Hoy no llevaras guardaespaldas —. Hablo con entusiasmo
Rodee los ojos molesta
Caminamos a su carro y ella rodeo el auto para entrar en el asiento del conductor y yo en el de el copiloto.
Entramos y sentía que iba a hacer una noche muy larga.
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CERCANA OBSESIÓN (+18)
RomanceLIBRO 2 DE ("MI MALDITA OBSESIÓN") TERMINADA... Síndrome de Estocolmo: Trastorno psicológico temporal que aparece en la persona cuando cree que esta enamorada de su secuestrador comienza a identificarse con el antes o después de ser raptada. Abrí l...