Capítulo 4

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Mientras Hermione subía, Tobías salió del cuarto y el Mago mayor lo agradeció mentalmente, si el niño se negaba a salir iba a tener que dormir en el sofá aunque siendo sincero, no durmió esa noche, ni siquiera subió a la habitación, su mente no le dejaba de repetir todos esos años con Hermione.

Ella fue rayito de esperanza luego de la guerra, él no tenía ningún propósito para seguir viviendo, es más no hizo absolutamente nada para demostrar su inocencia durante las audiencia en su contra, y ella siempre estuvo ahí, a pesar de lo cruel que él había sido con ella durante su época de profesor, ella siempre fue una estudiante excepcional, aunque nunca lo admitiera en voz alta, era impresionante todos los conocimientos que tenía la chica sabelotodo, pero no podía negar que lo sacaba de sus casillas, además de tener un don para meterse en problemas con sus dos amigos, hacía que se colocara de los nervios, no pudo evitar recordar todo su inicio.

La bruja no era tonta, sabía que él no era malo, intentaba ayudarle, siendo su profesor de defensas contra las artes oscuras, sabía lo que se venía y aunque le hubiera gustado tener un aliado, alguien en quien confiar, intento prepararla sin que nadie se diera cuenta, exigiéndole más. Ese año dejó de verla como una niña, la veía como una mujer, muy valiente, talentosa y hermosa, se reprochaba constantemente por eso último, se sentía sucio, un pervertido, pero no podía negarlo, la bruja le atraía.

Para él fue sumamente difícil asesinar a Dumbledore, era su amigo, era quien realmente sabía todo lo que estaba haciendo y porque, era su apoyo y sabía que al asesinarlo, se quedaría solo nuevamente, sabía que ella confiaba en él, su mirada valiente se lo decía y lo confirmó ese día cuando los mortifago entraron al colegio y ella bajo a buscarlo, en vez de buscar a su jefa de casa, lo buscó a él, para que protegiera al colegio. Ese día quiso escapar, no quería romper su confianza, pero tenía que hacerlo, la hechizo y la encerró en su oficina hasta que todo terminara, era lo menos que podía hacer, protegerla. A pesar de que muchos años luego, ella le dijo que lo perdonaba, que entendía porque lo hizo, él aún no se lo perdonaba.

Todos los meses posteriores a la muerte de Dumbledore, fueron un infierno, todo lo que debía aguantar por los Carrow, las reuniones con el Lord, que todo el personal y los estudiantes lo odiaran, pero había algo que lo preocupaba aún más, ella, intentaba por todos los medios saber si estaba bien, respiraba cada vez que tenía alguna noticia, sufría mini infartos cuando descubría lo mucho que se exponía y se sintió a morir luego de saber lo que ocurrió en la mansión Malfoy, quería buscarla, llevársela lejos, pero no podía y tampoco se dejaría, además ¿Por qué se iría con él? Si él fue quien mato a Dumbledore, él era un mortifago más, pero ella era fuerte, ella sobreviviría.

Ya en su lecho de muerte a quien menos espera ver era a ella, se reprochaba su aspecto tan lamentable, pero su viejo y pervertido corazón se alegraba de verla sana, minutos después de que el trio abandonara la casa de los gritos, ella regreso, sus manos temblaban, intentando cerrar la herida, él no se negó a sus atenciones, sin saber el motivo por el que lo hacía, solo quería aprovechar si esos iban a ser sus últimos minutos de vida, lo invertiría en solo verla. No recordaba mucho más, despertó en la enfermería del colegio con una venda en cuello, había sobrevivido, ella lo había salvado.

Seguía siendo el mismo Severus Snape, obstinado, pero algo cambio con ella, le debía su vida, y si de por sí ya sentía algo por la bruja, ese sentimiento en vez de disminuir, aumentó. Pero, se lo guardaría, su bruja salía con el pelirrojo, aunque era un alcornoque, definitivamente era mejor partido que él.

Regresó a Hogwarts ese año, se sentía perdido, fueron tantos años haciendo lo mismo, siendo manipulado por ambos lados, que ahora que era libre, no sabía qué hacer. Regreso a su puesto de profesor de pociones, era lo que más le apasionaba y el pobre Horace ya tenía que descansar, el rumor de que el trio dorado no regresaría ese año a terminar sus estudios no le sorprendió, habían vivido y sobrevivido una guerra, que más aprendizaje que ese, pero para su sorpresa ella sí lo hizo, como no. Hermione volvió para presentar sus EXTASIS, ella no creía en la ventaja, eso era para flojos, y no se iba a aprovechar del título "Héroe de Guerra" para no culminar correctamente sus estudios.

Tal vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora