CAPITULO VII

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Severus se encontraba desde hace unas horas en la habitación con Tobías, los doctores le habían dicho que cuando el niño despertara podría quitarle las vendas, ya que habían terminado y si todo estaba bien, el vería sin ningún problema, en ese tiempo no había sabido de Hermione, dudaba que se fuera ido del hospital, por muchos problemas entre ellos, Tobías era lo primordial, quizás le habrían avisado que el niño seguía dormido y que él estaba ahí y por eso no había entrado.

Ya el mayor se había resignado, se sentía un poco molesto consigo mismo, no entendía como luego de tantos años la castaña aun lo volviera tan... vulnerable, se había humillado y no solo frente a ella, si no frente a Weasley también, le molestaba pensar que seguramente seguían burlándose de él. Pero ya estaba, le había confesado que él seguía ahí para ella, que quería dejar las discusiones y por lo menos llevar una relación de exesposos, mejor a la que llevaban antes, así viera como la mujer que ama se iba con otro, nuevamente. Severus veía a su hijo, era idéntico a su madre. La música del hospital sonaba de fondo, como una tortura constante.

Qué bonito fue compartir un ratito nuestras vidas

Verle sonreír me arreglaba un mal día

Tuvimos mala suerte o tal vez, no nos convenía

Qué bonito fue despertar y verla dormidita

La mayoría de veces el brazo no sentía

Prefería eso a lidiar con el dolor de su partida

Qué bonito fue tomar su manita

Ver la luz de la luna reflejada en su carita

Qué bonito fue verla arregladita

Incluso, en pijama se veía bien bonita

Qué bonito fue coincidir, aunque no se vuelva a repetir

Supongo que el destino no la quiso junto a mí

Qué bonito fue ver sus ojitos

Bajo la lluvia llenarla de besitos

Qué bonito fue

El tiempo no fue en vano, lo digo en pasado porque era

Cuando me quería

No entendía porque de un momento a otro había comenzado a prestarle atención a las canciones muggles que sonaban en todos lados, pero por aun motivo las letras le dolían. Severus se acercó a la cama y puso mano en el brazo del niño, mientras movía su pulgar lentamente.

-Serás un magnifico mago hijo, tienes como mamá a la bruja más brillante de su generación, no hay nadie en el mundo mágico que no conozca tu nombre, mamá y papá siempre estarán aquí para ti, lamento si no fui el mejor padre estos últimos años, solo quería darte lo mejor, pero ya entendí que no puedo darte lo mejor solo trabajando, también debo estar ahí, viéndote crecer. Solo quiero que sepas que pase lo que pase, todo estará bien, te lo prometo. Te amo muchísimo hijo. -La voz del mago salía en un susurro. Tuvo ese impulso de decirle todo es a su hijo, a pesar de quizás no lo estaba escuchando.

Tobías comenzó a moverse en la cama, indicando que efectivamente estaba despertando. Sus pequeñas manos comenzaron a subir hacia sus parches en los ojos, pero el mayor le sostuvo las manos para evitar que lo hiciera. -Tranquilo, aquí estoy. ¿Cómo te sientes?

-Cansado. -respondió el pequeño. - ¿y mamá?

Severus iba a responder, pero una voz a su espalda sonó. -Aquí estoy. -Snape giro su cabeza sorprendido, ¿Cuánto tiempo tenía ella ahí? Hermione comenzó a acercarse a la cama y se sentó justo al frente de Severus, teniendo el único espacio entre ellos, la cama donde estaba el pequeño. -Aquí estoy mi amor.

Tal vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora