7 días de Dazai y Chuuya simplemente siendo ellos, la pareja más explosiva y divertida de BSD.
Ninguno de los personajes me pertenece, créditos a Asagiri Kafka y equipo❣️
Créditos a la hermosa imagen de la portada a @HiChuya (Ecru) en Twitter, vayan...
Hola precios@s, saben que yo vivo de one-shots así que la soukoku week me viene como anillo al dedo jsjsjs, les dejaré la imagen de dónde se sacarán las temáticas.
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Hice un mix de todos los temas del primer día jaja.
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—Chuuya, entiendo que sea nuestro día libre, ¿pero de verdad tenemos que estar haciendo esto?
Dazai odiaba estudiar. ¿Para qué hacerlo cuando casi siempre su cerebro capta rápido las cosas y por eso aprendía sin esa necesidad de sentarse, leer y aprender? Bien, entendía que aprender un idioma nuevo no era igual de sencillo, pero maldita sea, era su día libre, sin misiones de la mafia, sin recados para Mori, sin visitas a otros lugares. Tenían diecisiete joder, podrían estar en un parque de diversiones, viendo películas de terror, o intentando un suicidio doble (ésta última opción la favorita del castaño), no estudiando francés en el cuarto de Chuuya, tirados en el suelo con una mesita enfrente de ellos.
—Sí, nos podría ayudar por si alguna vez tenemos que ir a Francia —respondió Chuuya sin levantar la vista del libro, demasiado concentrado en entender cada letra, palabra y oración.
Y Dazai, como el niño que es cuando está alrededor de Chuuya, necesitaba atención y el pelirrojo no se la estaba dando, así que tenía dos opciones.
Una, medio leer el libro para aprender lo básico y luego presumirle a Chuuya lo bien que estaba aprendiendo, inclusive más rápido que él.
O dos, comportarse como el imbécil que es.
Por supuesto, optó por la segunda opción.
Rápidamente (y con los conocimientos que tenía en su cabeza, los que le eran útiles), escribió algo en un papel para luego tocar el hombro de Chuuya quien le volteó a ver algo confundido.
—¿Qué?
—¿Sabes cómo se pronuncia esto? —le preguntó Dazai con fingida inocencia, sus ojos expectantes, casi como los de un niño que estaba viendo su parte favorita de una película.
Chuuya, sin pensarlo dos veces, leyó lo que estaba escrito en el papelito.
—Ce soir je te ferai mienne—dijo él, sonriendo a lo último porque estaba casi seguro de que lo había pronunciado perfectamente, sin embargo...
Cuando vio la sonrisa de gato rison de Dazai, supo que algo estaba mal y, bajando la mirada nuevamente, releyendo las palabras, una por una para luego juntarlas en una oración...
"Esta noche te haré mío".
Sintió sus mejillas prenderse un poco al mismo tiempo que arrugaba el papel y volteaba a ver a Dazai que se estaba partiendo de risa con su reacción.
—¡N-no es gracioso, idiota! —le gritó como estaba acostumbrado a hacer, sus manos formando puños.
Dazai seguía riéndose como el cabrón que era, y Chuuya... Bueno, su enojo fue desapareciendo poco a poco mientras observaba a Dazai, sonriendo como rara vez hacía con otros, riendo como pocas veces se le veía cuando estaban en los cuarteles de la mafia, completamente relajado, sin esa mirada y máscara fría que llevaba puesta siempre que tenían misiones. Y le gustaba. Pensar que solo él conocía esta fase estúpida e infantil del castaño le daba una cálida sensación en el pecho de una forma agradable.
Y Dazai solo paró de reír cuando notó cómo Chuuya le observaba.
—¿Qué pasa, chibi?
Chuuya estuvo a punto de reclamarle el apodo, las palabras quedándose a nada de salir de su boca, pero cuando notó los ojos de Dazai sobre él, solo pudo pensar que, sí, el castaño era un idiota, pero ey, al menos era SU idiota. De nadie más, solo de él.
Y él también podía jugar esto. Así que, a pesar de que sentía la cara caliente, las manos temblarle un poco y sudor caer por su nuca, se acercó hasta Dazai, agarrándole del cuello de la camisa para acercarle hasta que su boca estuviera a centímetros del oído del castaño.
—Bien, ce soir je serai à toi —le susurró él con perfecta pronunciación, su voz inclusive sonando profunda, con calma, casi se podría decir que seductora.
Dazai, que había quedado estático cuando el pelirrojo se acercó tan de repente... dejó de funcionar una vez tradujo las palabras. Se sonrojó de igual manera, sus ojos ampliándose un poco y su boca abriéndose y cerrándose sin saber qué decir.
"Bien, esta noche seré tuyo."
—¡C-Chuuya, eso es injusto! —apenas logró decir, Chuuya alejándose lo suficiente para que sus rostros quedaran frente a frente y... —. ¿Me puedes hablar en francés más seguido?
Y Dazai descubrió un nuevo fetiche esa día.
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No sé francés, usé traductor JAJA, perdón si está mal escrita la wea xD.
