SUEÑO LIGERO

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09 de abril de 1998

El día de ayer mis compañeros de clase hablaban sobre la última edición de la revista PARANORMAL que salió a la venta aquí en Árbol Negro, en una de sus páginas contaba la historia de un colegio qué hay en mi pueblo, se llama SAN ÁNGEL es un establecimiento privado, donde por lo general llegan estudiantes de otros lugares ya que tiene internado. Esta es una localidad muy mágica por decirlo de alguna manera y no solo ese lugar tiene horribles historias, nuestras aulas también las tiene, Escuela N•666 Ríos de Lisperguer, eso si... todavía no comienzan a desaparecer los estudiantes uno por uno como en aquel colegio... bueno al menos aquí encuentran los cadaveres. Un escalofrío recorrió mi cuerpo cuando Ari un amigo, contaba que pronto iría a estudiar allí... de hecho todo el curso tenía ojos de lechuza cuando él lo dijo en clases, ahora que lo pienso es casi un tema tabú ese colegio.

Si ustedes me preguntan a mi, creo que Ari está destinado a estudiar allí. El otro día nos quedamos a limpiar la sala por lo que fuimos los últimos en salir, llegó un momento donde nos dimos cuenta que faltaban bolsas de basura por lo que mi compañero bajó al primer piso por ellas, unos segundos después veo que ingresa a la sala nuevamente... pero venía de espalda... caminando de espalda y emitía un extraño ruido de su boca, como si estuviera ahogado con algo... pasó lentamente a mi lado y noté que tenía los ojos blancos. Me acerqué hacia el y comencé a preguntar si estaba bien... pensé que me jugaba una broma pero en mi interior algo me parecía muy extraño. De pronto escuché pasos en el pasillo sabía que algo venía... quizás lo que le hizo esto a Ari. Me volteé protegiendo a mi amigo que estaba completamente ido, mientras la puerta se comienza a abrir lentamente con ese característico rechinar de una bisagra vieja, de pronto una mano asoma por el umbral y veo entrar a Ari con las bolsas de basura. El me queda mirando muy extrañado y me pregunta si estoy bien... yo asustado me volteo y no hay nadie en la sala, mi cuerpo comenzó a temblar repentinamente, nunca le he contado a Ari lo que vi, lo que me sucedió... ya no sé ni quién es Ari.

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