Capítulo 4 THARU

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09 de septiembre de 1999

Hasta el mismo infierno se estremeció con la voz del niño. Ari y Nahra nunca habían sentido tanto miedo en sus vidas y el monstruoso ser quedo inmóvil emitiendo un extraño sonido semejante al llanto de un bebé. Nahra inclina la cabeza y murmura
- Tharu, señor mio, ¿esta aquí?

Ari con un nudo en la garganta escucha susurros por todos lados y un aroma semejante a la espelma de vela y azufre
- Explota - Susurra Tharu.

El monstruo revienta en mil trozos
- Desaparece - Murmura Tharu y cada pedazo de carne junto a la sangre del Monstruoso ser se desvanece como arena y luego como el más fino polvo en el viento.

Al otro día cuando Nahra y Ari se calmaron y pudieron procesar lo vivido, llevan el cuerpo irreconocible de Kein frente a Tharu y le piden por favor que vuelva todo a la normalidad, Tharu no reacciona y observa fijamente a Ari, quien entiende que la petición significa que ya no se pertenecerá más
- Trae a Kein, a sus padres y destruye el monstruo de mi casa, acompáñame hasta el día que muera de viejo rodeado de familia, amor y que todo sea felicidad para mí, yo seré completamente tuyo.

Tharu se levanta y sonríe, se posiciona a los pies del cadáver y susurra
- Vive.

Kein respira de pronto, frenético, como si hubiera estado aguantando la respiración. La casa ya no tenía rastros de sangre, estaba ordenada y limpia.

Al correr a la habitación de sus padres, ellos estaban allí, durmiendo como si nunca hubiera ocurrido nada, así mismo los recuerdos de su pasado estaban todos en su mente, los padres se despiertan por el ruido de la puerta al cerrarse y observan a Kein entre dormidos, para luego sonreír
- ¿Qué pasa hijo? - Pregunta la madre con los ojos entrecerrados.

- Acabo de soñar algo horrible - Murmura el joven.

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