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𝐶𝑎𝑝𝑖́𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑡𝑟𝑒𝑖𝑛𝑡𝑎 𝑦 𝑜𝑐ℎ𝑜

                         Vladimir.

La miro moverse de un lado a otro pronto estaremos llegando a Pensilvania donde toda mi familia espera conocer a la pequeña loba. Ella se encontraba nerviosa y yo asustado, sabía que nada podría pasar que todos estará bien. Pero por otro lado mi mente se encontraba en la mejor manera de proponerle a Michelle intentarlo eso sí me tenía asustado más que mi familia. Había podido tranquilizar las aguas entre nosotros estábamos bien de vez en cuando un coqueteo —casi siempre de mi parte— sabía que a Michelle no le molestaba y más cuando sus cachete se ruborizaban

Por supuesto nada de eso significa que ya tenía el trabajo hecho.
Había pensado cuando estemos en Pensilvania pero estaba toda mi familia y aún así debía estar atento a mi hijo quién no podría evitar largar algún comentario hiriente a la loba. Podría llevarla a los Lagos subterráneos y proponerlo ahí aunque él no se caracterizaba por ser romántico sabía que con ella debía ser diferente

- puedes dejar de caminar en círculo terminaras mareada

- es que ¿Quién es toda tu familia?- pregunta

- mis padres, mis abuelos y Gael si es que quiere presentarse esta noche
No son tantos

- sin contar que tienes dos abuelos - dice sacando cuentas - serían seis personas ..

- en tu familia son más y no estoy asustado

- tu ya conoces a mi familia

- y tú la conocerás hoy deja de acerté tanto drama - le tomo el brazo cuando pasa por mi lado y tiro de el para que caiga en mis piernas - no te morderan...

- muy gracioso - murmura

Pasa los brazos por mi cuello y hace un puchero... Lo conocía cuando se arrepiente y quiere dar un paso atrás hace esa cara antes de decirlo

- no ya estamos en el avión y a más de siete horas de Moscú asique no hay vuelta atrás pequeña lobita

- ya dejaste de decirme limoncito- murmura

- no, solo que tengo muchos apodos hacia ti - acarició sus muslos  ella los aprieta suavemente al sentir mi toque ella se encontraba llevando un vestido por lo cual también sentía cuando se le ponía la piel de gallina  tomo su rostro y la acerco para besarla lo cual en deja hacerlo

Beso sus labios lento sin ninguna prisa, porque tenía toda mi vida para besarla de las millones formas que haya nos separamos acomodo su mechón rebelde dejándolo detrás de su oreja y sonrió dejo un beso en su mejilla

- estás muy meloso- murmura

- siempre soy meloso si me das la oportunidad-

Ella asiente y vuelve a besarme escucho como alguien carraspea veo a la azafata mirarnos con un poco de pena

- ya estamos por aterrizar

Los dos asentimos veo a Michelle esperando a que se sonrojara pero ella simplemente se levantó y se sentó a un lado mío colocándose el cinturón en el aterrizaje podíamos notar un poco de turbulencia por lo cual ella toma mi mano sonrió cuando un  recuerdo pasa por mi mente

                    
           Recuerdo

Miro a Michelle quién maldecía por las turbulencia

-no me culpes a mi. Yo no controlo el tiempo- murmuro desde  la otra punta del avión con los ojos cerrados

Michelle se mantiene en silencio

- seguramente lo haz hecho apropósito- dice convencida

- ¿Y por qué debería asustarte?

- para que vaya a tus brazos- dice mirándome la miro y sonrió

- no querida, yo no hago trampa para que vengas a mi, tu solita aparecerás - dice convencido

- sigue soñando vampiro- digo

Miro a Michelle que a pesar de tres años viajando en avión aún le asustaban los vuelos con turbulencia ella me mira confundida

-¿Por qué sonríes?- murmura

- veía algo que me gusta...mucho - murmuró ella sonríe y ahí está el sonrojo esquiva mi mirada para ver la ventana sonrió cuando hace ese gesto

Volviendo a lo que estaba al final ella tenía razón ella no vendría sería yo quien me arrastraría tras esta sexy mujer. Lo haría cuando vuelva a Moscú o a su manada ella sería mi mujer. No mi amiga, solo mía

                            ....

Michelle

Al llegar a la gran casa que se suponía que era de los abuelos de atticus quedó embellecida por la naturaleza que rodea aquella gran casa entramos y vemos cómo dos niños muy idénticos aparecen abrazando las piernas del vampiro .

- tío valimir - sonrió al escuchar mal su nombre los pequeños que parecían de cuatro años lo llenaban de preguntas mientras esté intentaba frenarlos

-¿Quién es eda tío?- habla el otro niño mirándome me pongo de cunclilla frente al niño y le sonrió

- hola soy Michelle

- ¿Mitel?- repite confundido

- aún le cuesta algunas palabras- murmuró atticus sonriendo - no sabía que mi hermano estaría aquí

- asique son tus sobrinos- digo sonriendo el asiente

- ya veo que llegaste - escucho la voz de Gael quién nos mira seriamente

- plimo tu papá lego- habla emocionado uno de los gemelos

- si Tyler - dice el mirando al niño - por qué no van a decirle a los demás el tío se tiene que acomodar con su amiga - le dice con una pequeña sonrisa

Los dos niños salen corriendo y gritando que habíamos llegado miramos a Gael quién nuevamente estaba serio

- hola Gael - atticus lo abraza y este lo acepta

- papá - le sonríe me mira de reojo Y suspira - Michelle -

Lo miró sorprendida y antes de poder decirle algo ya no estaba en la sala miro a atticus quien sonríe

- eso fue rápido - murmura tomando mi mano - vamos a afuera seguramente estén ahí

Salimos al jardín donde un par de hombres se encontraban al rededor de una parrilla y las mujeres hablaban en la mesa todos se callan al vernos

Bien aquí vamos....