Capitulo 10

613 49 1
                                    

Capítulo 10

Harry

Los días eran los mismos, la contemplaba desde lejos no podríamos decir que las cosas su hermano no habían mejorado por que todo era tan difícil con él cerca, desde que la conocí mi mente se ha convertido en un sinfín de preguntas que no sabría responder correctamente. Sentía algo por aquella chica, pero aún no lograba descifrar mis sentimientos, mis amigos muchas veces creían tener la razón de los errores que había comentado a lo largo de estos años, pero de eso se trata la vida, de cometer errores e intentar aprender un poco de ellos para mejorar.

Yo no he mejorado del todo, sigo llevado cada noche a una chica diferente a la cama, robándome su placer solo haciendo que me complazcan, el sexo que lograba darles a ellas era duro y sin límites, solo me daban placer el cual mi pequeño amigo agradecía que trabajara con el cada vez que se me pegaba la

gana.

—Tenías razón —Max llega a mi lado— Ella supo manejar a la bestia.

—¿Cuál de todas? —levante la ceja.

—Nadie, más que Karime ha podido domar —se sienta a mi lado.

—Ya vienes con tus pendejadas —Mateo llega con nosotros— Te enamoras de una cada semana.

—No, esto es diferente amigo —saca un cigarrillo— La he invitado a salir.

—Ella aceptó —ya presentía cuál era la respuesta.

—No —fuma— pero no me rendiré, no con ella.

—Debes entender que no todo gira a tu alrededor —Samantha pasa por su lado— Harry, Mateo.

Ella saluda y se va con sus amigas.

—Enserio debo soportar —dice entre dientes Max.

—Es buena amiga —encojo los hombros.

—¿Qué le hiciste? —Mateo le pregunta— Nunca nos dijiste.

—Ese día ambos estábamos listos para coger —el ve que lo miramos con atención— nos excitamos demasiado, que pude haber dicho el nombre de su mejor amiga.

—¿Yass? —mateo dice.

—Si, me acosté con Yass —tomo una cerveza— Y entre lo caliente que estaba, le dije Yass a Samantha.

—Idiota, ni yo he caído tan bajo en confundir a las mujeres —me rio de él.

—Mateo no se queda atrás —los dos se miran— ¿Mariela?

—Eso fue antes de que Harry se la cogiera —le pega en la cabeza.

—Eso lo sabía —tome otra cerveza— Y a Samantha la verán seguido.

—No jodas, Harry —reclama Max.

—No necesito tu permiso, son mis mejores amigos —los apuntó con el dedo— y ella es mi amiga, así que se aguantan pendejos.

Él era un completo inmaduro al dejar que una mujer le dañara su ego de vez en cuando, pero entendía a Samantha y sabía que ella iba a molestar hasta que vea en Max una pizca de madurez en él. Todos en este mundo nos movemos así, tenemos que aprender por las buenas o malas a ser personas que viéramos la pena en esta sociedad, para mí eso estaba sobrevalorado el cambiar mi actitud, ya me había criado con un caparazón imposible de romper, ni una de esas mujeres puedo cambiarme.

Veo como todo el mundo corre desapareciendo del callejón, todos habían desaparecido de un momento a otro lo que significaba que los policías en cualquier momento. Subo a mi moto y salgo del callejón y la veo esperando a que algún auto pasara, pero viendo la hora eso sería imposible.

—Te juro por dios que te matare —decía con su teléfono en la oreja— No me importan, Chad ni dinero he traído para irme en un taxi.

—Si, ¿quieres te llevo? —la interrumpí.

—¿Ese es Harry? —se escucha del móvil— Voy por....

Ella colgó.

—Vamos —subió a la parte de atrás de mi moto

Arranqué con ella, mientras me abrazaba tocando mi estómago, su tacto hace que mi piel se erice y un escalofrío recorre mi espalda cuando apoya su cabeza. Me desvió del camino a su casa sin que ella se diera cuenta, llevándola a mi escondite el único que lograba darme paz en los momentos más oscuros, pero mi moto y ella me ve y detalla el lugar.

—Hermoso —ella suspira.

—Es un buen escondite —me encojo de hombros y giró para verla— Es mi lugar de paz.

—Todos tenemos secretos que no sabemos revelar —baja la mirada.

—Los del barrio francés, más que amigos somos una familia —me encojo de hombros— Nos llevamos como la mierda, pero si sabemos proteger a los que amamos.

—De él no podrán protegerme —susurro para ella— Hay personas que no necesitan ser protegidas.

—¿Por qué lo dices? —le pregunte.

—Tengo un pasado oscuro —sus ojos se llenan de lágrimas— Mi familia no sabe de él, nadie sabe. Escape, pero tarde o temprano me encontraran.

—Mírame —tomo su cara— Nadie volverá a dañarte.

—La que más daño me ha hecho soy yo —mira mis labios— y si me encuentran no me rendiré hasta ganar.

Ella se acercó a mí y unió sus labios a los míos, un beso lleno de deseo y miedo de su parte sentía la necesidad de protegerla y abrazarla para no soltarla, me gustaba, lo sabía por que el beso me lo había confirmado.

—Llévame a tu casa —se separó de mis labios— y demuéstrame que tan lejos puedes llegar.


**************

Tenemos portada nueva, muchas gracias a clau por hacer esta maravilla para mi historia

Chicas me ayudarían muchísimo comentando y votando!!!


instagram: @elpeligrodelamor


Twitter: @RuthGalleguill2


TikTok: @elpeligrodelamor


Grupo de wssp: tambien encuentran el grupo en mi perfil.

El Peligro Del Amor (En edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora