2. Obsesión

775 29 4
                                    


Agito las manos aliviando un poco de la tensión que mi cuerpo sufre desde que aleje el celular como si fuera la peste

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Agito las manos aliviando un poco de la tensión que mi cuerpo sufre desde que aleje el celular como si fuera la peste. Ha pasado una hora y sigo sentada en mi cama con la vista pegada en la pantalla en negro, el aparato electrónico que tiene lo que quiero, pero no sé si es lo que necesito. 

No tendría que ser un problema querer ver el Instagram de alguien que te gusto, pero dentro de mi sabia que es después de esto no había vuelta atrás.

A la mierda.

Estoy 100% segura de que no soy la primera persona que se ve afectada por este ser humano y tampoco seré la última. 

Desbloqueo el celular y bajo por su perfil. Me muerdo el labio en una sonrisa para nada enamorada apretando la primera foto. Se veía realmente bien, mi estómago se hunde cuando paso a la siguiente foto, su sonrisa me hacía cosquillas en el cerebro.

De repente una idea apareció en mi cabeza pinchando cualquier ensoñación. Solo podía rogarle a todos los santos que no tenga novia por favor.

La sola idea de verlo compartir saliva con otra persona me ponía enferma y ¿Por qué? Era solo un famoso más, no tendría por qué importarme si está casado con cinco hijos, pero el corazón se me partiría en un millón de pedacitos si esa es la realidad.

Rápidamente, mando esa idea al fondo de mi mente. No me importaba si tenía novia, no tenía por qué afectarme... Miro el techo suspirando hondo, esto no es normal.

Empiezo a bajar ahora con miedo de encontrarme algo horrible como él besando a una chica y poniendo el amor de mi vida con un montón de corazones en el pie de las fotos, pero para mi salud mental, nada de eso pasa. De hecho, termino bajando tanto que sin darme cuenta llego a fotos de 2018.

Vuelvo a respirar con normalidad al saber que no tiene ningún interés amoroso y me siento estúpida al instante, como si yo tuviera alguna vez la oportunidad de estar con él.

— Oye, hay que decirle a mamá que...— mi hermana interrumpe en mi habitación. Bloqueo mi celular y lo escondo detrás debajo de mi almohada. Para nada sospechoso.— ¿Qué estás haciendo?

— Nada.— mi voz suena más aguda de lo normal.

— ¿Qué te pasa?— se ríe de mí.

— Estoy un poco cansada.— miento.

Mira el televisor donde todavía estaba la serie terminada.

— Oh, realmente viste la serie.— asiento tratando de actuar normal.— ¿Te gusto?

— No mucho, muy fantasiosa.— digo como si no estuviera desarrollando una obsesión por el protagonista.

— Mhm...— entrecierra los ojos.

— ¿Querías decirme algo sobre mama?

— No importa.— mira el celular, luego la televisión y se va.

Esa misma noche volví a ver la serie, y también al día siguiente y al siguiente. No podía tener suficiente. Cada día me despertaba con la necesidad de verlo, al menos una vez por día. Escuchaba el soundtrack de la serie, lo buscaba en YouTube, en los detrás de escenas, en películas que hizo antes de Julie and the phantoms y en las que estaba trabajando.

Era todo tan extraño y hermoso a la vez, no podía describirlo con palabras, pero me sentía de alguna forma conectada con él.

No se lo había dicho a nadie, obviamente, pero mi hermana ya me atrapo una o dos veces mirando el celular como una niña enamorada.

Todo este enamoramiento me pareció normal al principio, ¿Quién no se había sentido atraída a un famoso alguna vez? Yo lo hice mil veces en mi adolescencia, había pasado por cada nuevo chico pop que salía, los amaba, les dedicada mi tiempo y pensaba que era el chico más lindo del mundo. Pero ya no era una adolescente, mis prioridades eran otras y no podía fantasear sobre un nuevo chico. 

Todo cambio, cuando después de meses la obsesión no cesaba, me sentía de la misma manera que esa tarde que vi la serie. Había empezado las clases en la universidad, pero mi mente estaba en que video vería al llegar a casa. Inconscientemente, ocultaba este enamoramiento porque dentro mío sabía que la situación era extrema, sin embargo, no podía parar. Nunca me había sentido de esta manera.

Lo peor empezó poco después cuando no podía dejar de pensar que éramos iguales, dos gotas de agua que pensábamos las mismas cosas, teníamos los mismos objetivos de vida y el mismo sentido del humor. Era como si fuéramos hechos el uno para el otro. La idea era ridícula al principio, que estaba desquiciada por pensar asi de un famoso, pero luego empecé a considerar la idea de estar juntos, cada video que veía alimentaba más y más mi delirio. 

En un momento no pude más y le tuve que contar como me sentía a Ivy, me estaba ahogando en esta sensación de estar perdidamente enamorada de alguien que no conozco. Ella no lo entendió, solo me decía que se me pasaría, todo el mundo está enamorado de Charlie Gillespie. Tenía ganas de llorar de la frustración cuando escuche su respuesta, pero no podía culparla, yo tampoco le había dicho toda la verdad. 

Mi hermana me decía que estoy obsesionada, no lo pude negar. Pero se sentía más que una obsesión o un crush famoso. Sentía realmente amor por este ser humano que no conocía, cada día me convencía más de que es el amor de mi vida y no de manera platónica. Ya no tenía control de nada, solo fluía en mis sentimientos incomprendidos.

Pensé en empezar terapia, necesitaba ayuda para superar esto. Tenía que superar esto sí o sí, porque no hay manera en la que en esta vida Charlie y yo estemos juntos. 

Es realmente jodido que lo más cerca que estoy de enamorarme es de una celebridad que no sabe que existo y probablemente nunca conozca en mi vida. Gracias universo.

Todo paro cuando supe que había ido muy lejos al sentir celos al verlo con otra chica, se sentía como traición, como si él realmente me hubiera sido infiel. Ahí entendí lo mal que estaba y que si no paraba esta locura ahora iba a terminar en un psiquiátrico.

Tuve que bloquearlo de todos lados. No quería saber nada con Charlie Gillespie, ni su vida, ni su carrera, solo quería olvidarme de esta desastrosa etapa y seguir con mi vida. Alejarme de esta obsesión es lo mejor.


Soulmates || Charlie Gillespie.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora