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Siempre... Siempre debo de tener una sonrisa falsa frente a ustedes dos, quienes sin decir mucho obedecen y así se van mientras me dirigen una sonrisa que para ustedes... También es real.
Nadie se ha preocupado por mi, nadie me ha venido a buscar porque quiera saber más sobre mi persona.
Yashiro intentaba acercarse a mi, sin embargo, no es porque ella se quiera acercar a mi, solo lo hace por curiosidad, yo en verdad no le importó, jamás le importe, solo vino a tocar la puerta del cubículo pidiendo que le uniera con Minamoto Teru, un asco de persona si podría agregar.
Luego de eso... Solo porque comparto un vínculo con ella y por eso sigue aquí, de lo contrario me pregunto, ¿donde estaría Yashiro? Digo, ella de seguro se hubiese olvidado de mi y jamás hubiese vuelto, por ello decidí al menos tener un poco de bella compañía, pues ya me aburría de estar completamente solo todas las noches, viendo como los demás se gradúan cada año... Deseando que ellos pudieran verme y así festejar a su lado, pero hasta entonces, solo me quedo viendo como si fuera un espectador...
Y Kou... Ese niño... Jamás me ha demostrado preocupación tampoco, pues por lo que se solo apareció para intentar exiliarme, pero, como también dije antes, solo te hiciste mi amigo por que no querías que le hiciera daño a alguien “inocente”. Aunque, lo admito, siempre me salvo cuando lo necesite y ahora dice no querer exorcitarme y que no soy... Un mal espectro.
Aún no entiendo sus palabras, él... Dice que tengo razones para haber asesinado, pero, no importa lo que digas, siempre y cuando hayas matado a alguien... No hay justificación para eso...
— ¡No. 7! ¡No. 7! —
Esos llamados me hicieron reaccionar notando como unos dos Mokke estaban frente a mi a lo cual por clara diferencia de alturas me coloque de cuclillas en el suelo que era menos frío que mi cuerpo.
Se notaba el terror y preocupación en los pequeños seres a lo que solo pregunte de que se trataba todo ese alboroto que creaban, sobre todo el porqué acudían a mi en primer lugar.
— ¡Uno de los nuestros fue tomado por el demonio! —
Me quedé callado unos momentos... ¿Un demonio? Si se trataba de Tsukasa yo...
— Muestrenme en donde es. —
Dije a lo que ellos comenzaron a correr y así yo solo los seguí flotando, mi hermano era el único demonio que rondaba por esta academia, así que suponía que se trataba de otro de sus “juegos” donde solo él es merecedor de divertirse en ellos.
Note como esos conejos rosados giraron en una de las esquinas a lo que yo solo copie la acción, sin embargo oí que dijeron que ese demonio estaba dentro del salón.
Suspire, a veces por esto me arrepentía ser el líder de los siete misterios, pues de vez en cuando debía tratar trabajos así y... En verdad no me agradaban.
