Capítulo 1

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- No Harry, no digas nada - las lágrimas ya amenazaban con salir - se acabó.

Estaba en el parque con Harry, mi novio, bueno... mi exnovio. Era de noche, hacía frío. Él me miraba, y me lo decía todo con mucha sinceridad, haciéndome todo cada vez más difícil, pero yo ya no confiaba en él. Me fui directa a parar a un callejón, Harry me estaba siguiendo, pero yo no le hacía caso. Estaba llorando, tenía frío y me quería ir a casa. Noté una mano que me cogía del brazo y me hacía detenerme.

- Jade, escúchame, por favor - quiso seguir hablando pero no le dejé - yo no...

- Pero tú que entiendes... ¿Te lo digo en chino para que te enteres? - le empezaron a salir las lágrimas, nunca lo había visto llorar así, eso me dolió decírselo, aun sentía algo por él, aun lo amaba, pero nunca perdonaré lo que me hizo.

- Jade - seguía insistiendo - solo quiero que sepas que yo no fui... no hice nada...

Ni me paré a escucharlo, me fui, sin mirar atrás, solo para el frente. Desde hacía rato que Harry y yo estábamos en el parque me sentía intimidada, pero no justamente de Harry, sino de otra persona, notaba que alguien me estaba mirando, pero... ¿Quién? Seguí andando hacía delante, donde llegué a una pequeña plaza. Una de esas por donde pasabas siempre cuando eras pequeña con tal libertad que nunca pasaba nada, pero ahora ya era distinto, por estas calles si no ibas con cuidado... mal asunto. Sé que es peligroso, pero me fui por aquí para llegar antes a casa, además, tampoco quería dar media vuelta porque sabía que me iba a encontrar con Harry, y no me daba la gana. Me paré de pronto, justo cuando vi a lo lejos una silueta de alguien, juraría que era un hombre, por su aspecto, pero ya era de noche y la oscuridad reinaba en ese sitio, no pude ver nada. Me temblaban las piernas, tenía miedo y estaba muy nerviosa. Seguí caminando y escuche unas voces provenientes de los matorrales. No podía ser más cotilla, se me ocurrió ir a ver que era.

- He visto por aquí a una jovencita - dijo una voz borracha - tiene buen cuerpo... - todos los que habían allí empezaron a reír.

¡Yo era esa jovencita!, al pensarlo, di un grito ahogado, que por lo visto se escuchó bastante, empecé a correr, escuché a los hombres que empezaban a correr ellos también. En eso me topé con alguien, levanté la mirada y me topé con esos ojos verdes que tanto me gustaban. Harry estaba allí, para protegerme. Inconscientemente lo abracé, agradeciéndole que estuviera allí conmigo y que no se hubiera ido.

Escuchamos unos pasos que se acercaban cada vez más donde estábamos nosotros. También se escuchaban voces, eran ellos. Los hombres estaban a la vuelta de la esquina y nosotros aun estábamos ahí parados como estatuas. Reaccioné. Harry me cogió de la mano y empezamos a correr. Las ramas de los arbustos que había me empezaron a arañar la ropa rompiéndomela, y podía notar como me herían la piel. Escuchamos un gran grito que venía de al lado nuestro, nos paramos enseguida. Noté como los arbustos de nuestros alrededores se movían cada vez con más rapidez. Pude ver la cara de ¿Perrie? ¿Qué hacía ella aquí?

- ¿Qué haces tú aquí? - le dije histérica.

- Es que... - Perrie no continuó, se le enrojeció la cara - sé que rompieron y eso...

- ¡¿Eras tú la que nos estaba espiando?! - dije. Perrie asintió - ¡¿Pero a ti que te pasa?! ¡Eres una cotilla!

- ¡Jade! - chilló esta - lo hice por tu bien. Yo ya sabía que iban a romper la relación, se te veía rara con él, y sabía que si lo hacías te quedarías sola, y volverías sola a casa...

- Lo siento... - me disculpé, estaba muy alterada por lo que estaba pasando.

Seguimos escuchando voces acercarse, nos miramos y nos fuimos. Llegamos a un pequeño solar, donde no había ni entrada ni salida, estábamos atrapados.

Just a dream...? (Jarry)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora