Capítulo 3

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La mañana lo encontró con algo de masa entre sus manos y suspiros que salían de sus labios enmarcados con una gran sonrisa.

-¿En serio Yoongi, no te duele la cara de tanto sonreír?, es decir te conozco desde siempre y creo que hoy has sonreído más que en toda tu vida- exclamó con sarcasmo mientras veía a su amigo trabajar dándole forma a los bollos para hacer el pan.

-Dejame en paz Kookie, sabes en otro momento te hubiese golpeado, pero hoy no, hoy estoy de buen humor- dijo y su sonrisa se volvió a pintar.

-¿Será que ese buen humor se llama Park Jimin?, vamos amigo cuéntame que tal te fue anoche, y por cierto me lo debes, tuve que salir a comer a un horrible lugar por dejarte a solas con él- comentó acomodándose su delantal para comenzar a trabajar.

-Bueno, eso es cierto, te debo una, pero no sé si te contaré algo de la cena de anoche- espetó burlón.

-Oye, me lo debes, no seas mal amigo- gimió frunciendo su ceño.

Yoongi se río de la actitud de su amigo y entonces habló.
-Tiene veinticinco años, se mudó aquí para poder salir de la casa de sus padres y poder hacer mejor su trabajo, y ahora que lo recuerdo no le pregunté de que trabajaba, pero eso no importa ahora, estudió en la universidad de Busan y terminó el año pasado su carrera, tiene dos hermanos menores que él y ama a su familia. Y lo mejor no tiene pareja, al parecer no llegó el indicado, lo que me confirma que si es gay- los suspiros salían unos tras otros mientras recordaba toda la información que había obtenido de aquella cena

-Imagino que lo invitaste a salir ¿verdad?-

-No- contestó cabizbajo  -No me animé

Jungkook rodó los ojos y le clavó la mirada.
-¿A qué le tienes miedo Yoongi? Realmente no lo entiendo, Jimin no me parece un tipo que intimide, es decir claro que es hermoso pero eso no significa que sea inalcanzable, mucho menos para ti hermano, ¿desde cuándo te has vuelto tan inseguro?- indagó algo ofuscado.

-¿Desde ayer cuando lo vi llegar?- respondió de manera retórica.

Jungkook volvió a bufar y prefirió concentrarse en los postres que estaba preparando.  Yoongi parecía otra persona cuando se trataba de Jimin y eso a él no le gustaba, después de todo no toleraría verlo sufrir.

La campana de la puerta sonó, Yoongi se limpió sus manos y salió a atender al cliente que acababa de entrar.
-Buenos dias- saludó mirando de arriba a abajo al joven que acababa de entrar.

-Buenos días, disculpe que interrumpa sus quehaceres pero estoy buscando a alguien y estoy algo perdido, su dirección dice que es aquí pero dudo que la persona que busco viva en una panadería- explicó extendiendo el papel donde estaba anotada la dirección.

-Es aquí - informó Yoongi  -pero ¿a quién busca?- cuestionó

-A Park Jimin,  ¿lo conoce?-

Yoongi le clavó la mirada, el tipo era un Dios griego, el típico súper modelo que atraería a cualquier persona, y estaba allí en su negocio preguntando nada más y nada menos que por su sexy vecino.
-¿Y tu eres?- preguntó con un tono seco.

-Oh, claro, no me presenté, disculpa, soy Kim Taehyung- dijo y estiró su mano para estrecharla con la de Yoongi.

Alto, cabello castaño, ojos café intenso, nariz perfecta, un cuerpo maravilloso y un perfil de ensueño, si indudablemente la pareja perfecta para el perfecto Park Jimin.  Miró al tipo y se vio a sí mismo y todas las esperanzas que había reunido el día anterior acababan de morir ante la imagen frente a él.  Carraspeo mientras se sacaba esos pensamientos de encima y entonces respondió.
-Si conozco a Jimin, es mi nuevo vecino, vive arriba encima del negocio, puedes tocar el timbre de la puerta negra que está pegada al local, allí es la entrada a su departamento- explicó y agachó un poco su cabeza.

-Oh, eres muy amable...-

-Yoongi, Min Yoongi, un gusto poder ayudarte- dijo y dio media vuelta para volver a su trabajo mientras veía salir al dios griego que acababa de hablar con él.  Estaba jodido, era imposible, según él competir con semejante espécimen que rodeaba a su precioso vecino.
Entró a la cocina y su semblante era horrible, su amigo lo miró sin entender nada.

-¿Qué pasó?, ¿viste a un fantasma o qué?- preguntó confundido.

-Algo así, un tipo tremendamente irresistible entró preguntando por Jimin- bufó frustrado mientras hablaba.

-¿Y con eso qué?-

-Si lo hubieras visto me entenderías- comentó y comenzó a golpear la masa para quitarse el estrés de encima.

Dos horas más tarde el hermoso vecino salía de su departamento acompañado del modelo que lo había estado buscando, ambos reían y caminaban muy juntos, se notaba claramente que se llevaban más que bien y se conocían mucho.

-Yoongi creo que exageras- dijo de pronto Jungkook mientras salía de la cocina con una nueva bandeja cargada de medialunas.

El otro elevó una ceja y esperó a que le explicara en qué estaba exagerando.

-Quizás sea su mejor amigo, así como lo somos tú y yo, a lo mejor se conocen de siempre y son como hermanos como nosotros- explicó intentando que su amigo no estuviera tan frustrado.

-No lo sé Kookie, te aseguro que son tal para cual, ambos sumamente hermosos, sexys e irresistibles, dudo que no tengan una relación amorosa-

-El mismo Jimin te dijo anoche que no tenía pareja porque no había llegado el indicado- exclamó cada vez más impaciente.

-Creeme acaba de llegar- respondió y siguió trabajando.

Luego de unas largas horas donde Yoongi se dedicó  a mirar por los ventanales, su hermoso vecino volvía a su casa, claro acompañado del Dios griego que lo había buscado temprano. Se mordió sus labios intentando sacarse la frustración. Jungkook lo miró y preguntó qué le sucedía.

-Acaban de regresar- bufó

-¿Quiénes?- Indagó sin entender demasiado.

-Jimin y su novio-

Jungkook rodó los ojos.
-Ok terminaré con esta incertidumbre- espetó y caminó hasta la puerta, Yoongi lo siguió espantado, intentando detenerlo.

-No lo hagas- susurró pero era tarde su amigo ya había salido.

Miró al par que estaba parado frente a la puerta, Jimin buscaba en sus bolsillos las llaves mientras Taehyung de espaldas revisaba su teléfono
-Hola Jimin- saludó con una gran sonrisa

Este giró y lo miró
-Hola Kook- respondió  -Te presentó a Taehyung- dijo señalando al otro quien giró sobre sus talones para saludar también.

Jungkook tragó aire y se quedó obnubilado con la imagen frente a él. Yoongi no había exagerado en nada, el tipo era un súper modelo, no había dudas.

Taehyung lo saludó con una peculiar sonrisa que hizo a Jungkook tensarse de inmediato.
-Hola soy Tae- dijo extendiendo su mano para estrecharla con el otro.

-Kookie- respondió y su sonrisa se hizo aún más amplia.

Jimin miraba la escena y sonrió, sin dudas ese par se llevarían más que bien pensó.
-Kook, quería agradecerles a ti  y a Yoongi por alimentarme anoche, así que si no tienen planes me gustaría invitarlos a cenar, Tae y yo cocinaremos pasta, espero les guste- comentó Jimin mirando a su vecino.

Jungkook jadeó sorprendido  y entonces respondió.
-No hay planes, dime a qué hora, llevaremos vino y por supuesto el postre-

Taehyung volvió a sonreír encantado
-A las ocho estaría bien- dijo Tae con su voz grave que hizo a Jungkook babear de inmediato.

-A las ocho entonces- afirmó y giró para entrar al negocio no sin antes volver a dar una mirada al precioso chico que acompañaba a su vecino.
-Yoongi, prepárate, iremos a cenar con tu sexy vecino y mi hermoso modelo- explicó

Su amigo arqueo una ceja
-¿Estás de joda?-

-No, Jimin quiere agradecerte por darle de comer anoche y acaba de invitarnos- comentó.

Yoongi sonrió ampliamente, sería interesante pasar el tiempo con el par y de paso averiguar qué relación tenían y qué posibilidades podían tener tanto él como su amigo.

Dime quién eresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora