Capítulo 12

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Estaba en la habitación de Maki, muy cerca de ella. Nuestros labios estaban a punto de rozarse. Pero, justo antes de que algo pasara, entró la madre de Maki en la habitación.

Maki estaba tirada en el suelo, completamente sonrojada, arrepintiéndose de todo lo que acababa de suceder.

Le había pedido perdón cuentos de veces, pero creo que eso no le servía.

—Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda...—Susurraba Maki repetidas veces.

Yo me arrodillé y me puse frente a Maki mientras le acariciaba el pelo.

—No lo pienses tanto, tu madre no parecía tan enfadada. Seguro que podemos explicarle todo esto.—Le dije, tratando de calmarla.

—Vale que ella no esté enfadada, ¡pero fue demasiado vergonzoso!—Me respondió ella, tapándose la cara de la vergüenza.

—Tampoco es para tanto, no llegamos a hacer nada en ese momento.—Le contesté.

Ella se levantó y me miró.

—Vamos a explicarle todo...—Me dijo ella, siguiendo sonrojada.

—¿Te refieres a explicarle la verdad o contarle alguna excusa?—Le pregunté, mientras me levantaba.

—¿No es obvio? Vamos a inventarnos una excusa. Le diremos que solo somos amigas, tú viniste a estudiar y luego te caíste. Fin del malentendido.

—¿Y si no apoyo esa excusa...?—Le pregunté, agachando la mirada.

Maki me miró extrañada.

—¿Quieres que...? ¿Le digamos que estamos saliendo juntas...?

—Ella no parecía enfadada, seguro que lo entiende... Quiero que sepa la verdad, no tiene sentido mentir, en algún momento tendríamos que decirle la verdad.

Maki suspiró y miró hacia el suelo.

—Si insistes...—Me respondió ella finalmente.

Yo sonreí y me puse frente a la puerta.

—¿Vamos?

—Vamos.

Abrí la puerta y fuimos hacia el salón, donde estaban los dos padres de Maki.

Maki empezó a ponerse nerviosa y se sonrojó mucho.

—Mamá... Papá...—Dijo ella, mientras se ponía frente a sus padres y yo me paraba a su lado.—Que... Queríamos... Queríamos deciros...—Maki había comenzado a temblar de lo nerviosa que estaba.

En un intento de intentar calmarla, la agarré de la mano.

—Buenas tardes, me llamo Yazawa Nico. Quería informarles de que actualmente estoy saliendo con su hija Maki.—Me presenté, tratando de sonar lo más formal posible.

—Ah, bueno, okey...—Respondió el padre de Maki, completamente desinteresado, volviendo a lo que estaba haciendo.

—¡Cariño!—Le gritó la madre de Maki.

Ella suspiró y nos miró a ambas.

—De verdad, estoy muy feliz de que una chica como tú esté saliendo con mi hija, pero, no tienes por qué ser tan formal.—Me dijo, mientras me miraba.—Bienvenida a la familia Nishikino.

—Muchas gracias...—Le contesté, mirando hacia el suelo sonrojada por lo que me había dicho.—Y... Ya son las siete... Debería volver a mí casa, adiós.

—Vale, ten cuidado.—Me respondió la madre de Maki sonriendo.

—Yo te acompaño.—Me dijo Maki.

—Gracias.—Le respondí sonriendo mientras me dirigía a la puerta.

Ambas salimos de la casa de Maki.

—Bueno... Entonces, oficialmente estamos saliendo juntas...—Le dije a Maki, mientras andábamos.

—S... Sí...—Me respondió sonrojada.

—Ya no tienes por qué avergonzarte, ya estamos saliendo.

—¡Y...! ¡Yo me avergüenzo cuando quiera!—Me respondió aún más sonrojada que antes.

Ella miró hacia otro lado, mientras yo me reí un poco.

—Estoy realmente feliz de salir contigo... Yo de verdad te amo.—Le dije sonriendo mientras miraba hacia el frente.

—Yo... Yo también... Te amo...—Susurró ella, a un volumen adecuado para que pudiera escucharla a la perfección.

Ambas sonreímos al escuchar las palabras de la otra, mientras estábamos algo sonrojadas.

¡Fíjate en mí, Maki!//NicomakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora