Love Story - Erich Segal

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Él era rico, ella era pobre. También eran muy diferentes en sus gustos, en su forma de encarar la vida. Sin embargo, se enamoraron y se casaron. Lo que aquí se cuenta no es nuevo, pero sí tierno, triste a veces, y sentimental en una manera muy actual y sofisticada, con un soplo de cosa maravillosa, tal como debe suceder en todas las historias de amor.

Cuando descubrí este libro, estaba limpiando la biblioteca de mi papá. Él tiene muchos libros de filosofía, ya que estudió durante tres años la carrera, así como libros de ciencia ficción. Sin embargo, cuando vi este nombre sobresalir por entre los demás manuscritos, algo me dijo que tenía que leerlo. Así que lo tomé, dejé todo lo que estaba haciendo por la mitad y me senté en el medio del patio de mi casa a leerlo.

Al comenzar la lectura, noté una narración muy especial, que no sé si es exclusiva del autor porque no leí otro libro de él, pero sí puedo decir que me sentí prendida a él en el mismo instante en que posé la vista en la pregunta ¿Qué puedo decir de una chica de veinticinco años que murió? Uno siente, en el momento, la curiosidad picar por nuestra cabeza, siente esa interrogativa de por qué un autor comienza un libro por el final.

El autor desplaza su mente a través de palabras sencillas con un poco de cultura general, tanto en música como en deportes, así como también nos transporta a la sociedad Norteamericana con respecto a su cultura universitaria. Segal nos presenta a Jennifer Cavilleri (o Cliffie) y a Oliver Barret IV (o Preppie), dos jóvenes que cursan dos carreras completamente diferentes en dos universidades opuestas. Uno proviene de la pobreza y el otro de la riqueza, simple como el agua y el aceite.

"-Oye, necesito ese libro de porquería.

-¿Podrías controlar tus guarangadas, Preppie?

-¿Qué te hace estar tan segura de que fui a una escuela preparatoria?

-Pareces estúpido y rico -dijo ella levantándose los anteojos.

-Te equivocas -protesté-. En realidad soy inteligente y pobre.

-Oh, no, Preppie. Yo soy inteligente y pobre"

Los problemas se avecinan y cada vez aumentan sus tamaños, lo que antes era un papá millonario en contra de su hijo, después de convertirá en la pesadilla que dará fin a la historia. El drama reina, claro, pero así también la comedia y astucia con la que la pareja convive constantemente. Tengo que admitir, que a pesar del desenlace de la historia, nunca me dejé de reír ante los insultos y/o momentos que convivían entre los dos. El amor estuvo en todo minuto, así como las peleas.

Declaro que es una historia muy bien equilibrada en todos los aspectos. No vas a llorar sin antes haberte reído, no te vas a molestar sin antes sentir cariño. Así mismo, esta maravillosa novela me dejó una increíble enseñanza, que no se lee en cualquier escrito. Una que por más cruda y realista que sea, es la verdad. Y no lamentaré compartirla con ustedes:

"-Jenny, lo siento...

-¡Para! -Ella cortó bruscamente mi apología, y luego dijo

muy serenamente-: "Lo siento" no siempre implica

tener que pedir perdón."

Digan lo que digan, leí esta historia más de ocho veces y todas ellas lloré con el final. No me malinterpreten, sí, soy una llorona de nacimiento, pero esta historia me llegó al corazón por la simplicidad y lo espontaneidad de ella. Siempre será mi historia favorita del género romance. Ojalá puedan leer esta hermosa novela y compartir mi opinión.

Evalúo a esta historia con cinco estrellas, de cinco.

Dato curioso: la novela se escribió en la década de los '70 y cuenta con una película que tiene el mismo título (también tengo la película).

@LucilaMartinez

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