INNOCENT | DRACO MALFOY ✓

𝐍𝐈𝐍𝐄

Aria Rowen.

—Luchando por mantener el ritmo, ¿verdad?.—Dylan Hernandez nos devolvió la llamada cuando saltamos sobre un montón de escombros.

—No todo el mundo es un buen jugador de quidditch físicamente como tú.—refunfuñó Indy mientras agarraba más fuerte mi mano para estabilizarse.

Las cuatro continuamos tropezando con los trozos de piedra que alguna vez estuvieron conectados a Hogwarts.

Todo el ala sur del castillo había sido destruida en la Batalla de Hogwarts, y este era el único lugar en la escuela que aún no se había reconstruido. Dado que la mayoría de sus salas y pasillos han sido abandonados, los profesores y voluntarios dedicados tiempo a reparar áreas más importantes que han sido dañadas, como el gran comedor o la Torre de Astronomía.

Por lo general, se suponía que los estudiantes no debían estar aquí, pero todos nuestros maestros y miembros de la facultad estaban cenando, lo que nos vendrían bien colarse en el área prohibida.

Miré hacia el cielo, donde las estrellas ya comenzaban a brillar a pesar de que ni siquiera era demasiado tarde.

—¡Ah!—Indy dejó escapar un grito ahogado mientras tropezaba, haciendo que su cuerpo cayera en picado sobre una pila de rocas.

—Perra torpe.—Jenna soltó una carcajada mientras bajaba los brazos para ayudarla a levantarse de nuevo.

Indy también se rió, a pesar de que era culpa suya por caer en primer lugar.

—Joder, estás sangrando.—Trepé sobre una piedra grande mientras miraba su mejilla, que tenía un pequeño corte. Un pequeño chorro de sangre corría hasta su barbilla, pero no era nada demasiado serio.

Ella levantó su propia mano, apartando algunos cabellos sueltos en un intento de mantenerlos fuera de la sangre.

—Oh, estaré bien.

—¿Estás segura?.—Dylan se apresuró a regresar también.

—Sí.. sólo un pequeño rasguño, eso es todo.—se limpió la sangre con el dobladillo de la manga de su suéter.

Todos continuamos nuestro camino a través de los escombros restantes que alguna vez fueron un pasillo. Era extraño estar aquí, pero las cuatro habíamos venido a este lugar con bastante frecuencia desde el comienzo del año.

Nuestro grupo llegó al final del 'pasillo' donde había un pequeño claro de concreto que miraba hacia el cielo abierto.

Dylan fue la primera en sentarse sobre la grava mientras sacaba una pequeña bolsa de su bata y se la arrojaba a Jenna, quien se dejó caer a su lado.

Me acerqué a la pared de piedra que se desmoronaba, metiendo el pie en una pequeña grieta que tengo trepar a la superficie con facilidad.

Extendí mi brazo hacia Indy, quien lo tomó y me dejó ayudarla a sentarse en la pared a mi lado.

Dylan y Jenna tomaron cada uno un cigarrillo de la bolsa y usaron una caja de fósforos muggles para encenderlo antes de arrojar la bolsa a Indy.

Una vez que consiguió el suyo, me lo pasó, pero lo rechacé cortésmente. No me gustaba mucho fumar como ellas, pero de vez en cuando me unía.

—Mírate, siendo la buena influencia.—Ella arqueó las cejas burlonamente antes de arrojarle la bolsa a Dylan, quien se la guardó en el bolsillo.

Vi como Indy ahuecó sus mejillas, lanzando una bocanada de humo gris al aire fresco.

—Me sorprende que Luke incluso te deje fumar.—Jenna la llamó mientras fumaba su propio cigarrillo.

Indy puso los ojos en blanco en broma, pero yo sabía lo sensible que podía ser al tema.