Nuevo Comienzo

Capítulo 2

–Oh, vaya. No sabía que había llegado Shii-kun a la aldea, Sakura-san. – dirige su mirada a la pelirosa.

La voz tímida de Hinata logra romper con el silencio en el que se han sumergido durante unos segundos, pero por la pesadez que se sentía en el ambiente, se sintieron como horas.

–Si, acabo de llegar hoy mismo. Solo venia a dejarle unos documentos importantes al Hokage del Raikage, solo estaré un par de días por aquí. – responde el rubio cenizo. – Pero no se preocupen, Sakura me ha ofrecido que me quedare con ella en su departamento y yo no pude negarme.

–Oye, ¿Cómo que te quedaras con ella en su departamento? – dice por primera vez Naruto en todo este tiempo – ¿No puedes conseguirte un hospedaje en cualquier posada?

–No pude decirle que no a Sakura. Me imagino que lo comprendes bastante bien ¿cierto?

–Mas te vale qu...

–Sentimos estar interrumpiendo en su tiempo juntos chicos, disfruten su cita. –interrumpe Sakura.

Y antes de poder escuchar una replica por parte de su compañero de equipo, ambos dan media vuelta y se pierden entre la gente que esta alrededor suyo.

...

La cena en el Ichiraku no fue como se esperaba. Desde hace un tiempo que la relación entre ambos no se sentía del todo correcta y dios sabe lo mucho que ambos se han esforzado en el casi un año que ambos llevan de relación.

–Uhm, Naruto-kun ¿te encuentras bien? – Hinata es la única en hablar durante la mayor parte de la cena.

–Si, solo estoy pensando en mi mision reciente Hinata. Nada de qué preocuparse.

– Me alegra que te haya ido bien.

Durante lo que quedaba de la cena ninguno de los dos se atrevió a hablar de nuevo. Ambos sumidos en sus pensamientos, siguieron caminando las calles de Konoha directo al hogar de los Hyuga.

Ambos tenían la sensación de que algo no estaba del todo bien.

Naruto, por su naturaleza positiva, trataba de verle el lado bueno a una relación con la Hyuga. La chica era bonita, tenia buenos modales, era amable con todos, pero... de pronto se vio sumergido en una monotonía asfixiante. La mayoría de los días en que se encontraba con Hinata consistían en: ir por ella hasta la puerta su casa, recorrer por las calles de la aldea, invitarla a comer a donde él eligiera (esto porque a Hinata en todas las ocasiones que preguntaba si quería ir a algún otro lado, ella siempre contestaba que "lo que quiera Naruto-kun estaba bien para mí ") o ir a algún parque cercano, dar un recorrido corto de vuelta a la casa de la chica, para finalmente dejarla en su puerta a las 9:00 en punto por orden de su padre.

El único defecto que pudo encontrarle a la chica es que todo lo que él pensaba o quería, era la ley suprema. Podía comprenderlo un poco debido a la forma en la que regia su clan con lo suyos, pero en los primeros meses de su relación intento cambiar un poco esa pequeña ideología que tenia la chica, que las opiniones de ella también importaban y tienen la misma importancia que las de él. Lamentablemente no pudo hacer un cambio notorio en ella, comprendió un poco tarde que esa es la manera de ser de la chica y que seria completamente injusto cambiarla a su gusto, así que aprendió a sobrellevarlo con el tiempo.

Pero debido a su personalidad nerviosa de ella y su espontaneidad de él, las cosas rindieron frutos por un buen tiempo. Todo decayó al estar queriendo internamente que Hinata se exasperara o se enojara con él, o por lo menos que le llevara la contraria en algo, cuando todos en la aldea entera sabían que ella no seria capaz de hacer algo así, se dio cuenta de que esa relación no iba mas que a un final demasiado infeliz.