El Muñeco de Porcelana [Atsushi&Shibusawa]

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♢Título: "El Muñeco de Porcelana"
♤Personajes: Shibusawa Tatsuhiko, Atsushi Nakajima.
♡Pareja: Ninguna en específico.
♧Género: ¿Angst?



Había una vez, en una lejana, lejana tierra, un hombre de ojos rojos, tez pálida, y cabello de igual color. Era un hombre bien conocido en aquella lejana, lejana tierra, quien consigo, siempre traía un muñeco de porcelana.
Era un muñeco sin color, blanco y negro, bien pulido y cuidado con la mano de un coleccionista. Era precioso, siempre que alguien venía de visita, lo recibía con aquel muñeco de porcelana, gustaba de presumirlo de más.

Tanto era el cariño que le tenía a aquella pertenencía, que incluso le había puesto nombre como ninguno de sus otros juguetes tenía. Su nombre, era Atsushi.

Siempre se jactaba de cada mínimo detalle del muñeco, le había costado mucho conseguirlo, y quería que todos supiesen que aquel precio había valido mucho la pena.
Su pelo era real, el mismo traía como color 'blanco', pues es que el hombre de ojos rojos quería que sea a su humilde semejanza, y pidió que lo hicieran a medida para ello mismo; es por eso, que el resto de su ropa era de igual color, a excepcion de sus pantalones, cuales eran negros como la noche.
Su ropa, era la de un estudiante de primaria, era una linda estética, aunque había sido él mismo quien había confeccionado dicho atuendo, pues solo se lo habían vendido en arapos.

El hombre de ojos rojos, gustaba de prepararle deliciosas comidas dignas de un rey, más el muñeco de porcelana era muy tímido a la hora de cenar, pues es que podría romperse con solo un bocado. Siempre le preparaba una comoda almohada a su lado a la hora de dormir, y es cierto que al principio el muñeco de porcelana se notaba angustiado de tal invitación, pero más tarde aceptaría gustoso, que mejor que dormir con aquel hombre de ojos rojos.

En sus tiempos libres, gozaba de escribir fantasía , más ¡el pequeño muñeco ocupaba demasiada de su atención!.
Negar sería mentir si dijera que nunca le había leído alguna de sus historias de temática oscura al muñeco para poder dormirse. Siempre que el hombre mayor leía de éstas, el muñeco disfrutaba de mirar esas largas e imponentes uñas al pasar de página, eran tan hermosas como él, pues también habían sido elegidas a medida.

El primer día de clases había sido el más díficil, pues es difícil para un muñeco de porcelana adaptarse a tantos niños de carne. El hombre de ojos rojos lo recompensaría más tarde por ello.
Cocinaba platillos excentricos para aquel muñequito blanco, platos que él no podría probar por ser un humano real. Siempre gustaba de ver las caras de asco que el muñeco hacía, eran horribles.
A pesar de que aquella pertenencia se quejara y rehusara, aquel hombre de ojos rojos haría oídos sordos a sus peticiones, pues es que era un pequeño muñeco ¡debía de obedecer!

El vanidoso hombre de ojos rojos nunca lo dejaría jugar solo, siempre estaría ahí para él. "Lo siento, ¿Te lastimé?"  preguntaba con frecuencia, siempre lo hacía, la respuesta de igual forma, siempre era la misma "no", los objetos no suelen sentir.
Le dolía la mandíbula, ¿qué había ingerido? ¿Qué le había hecho ingerir?
Oh Dios Santo, ¡Dolía tanto! pero siempre era así, quizás algún día sanaría.

¿Eran aquellas vanidosas navajas de los dedos del hombre de ojos rojos las que darían por terminado aquel juego entre un muñeco y un humano?
Nunca supo el como, nunca supo el porqué de sus movimientos, ¿Cómo era que su querido niñito le había hecho semejante barbarie?
El fuerte vino con sabor a perdición escurría bajo sus ropas, quizás solo era la hora de dormir.












Esta historia es una entera metáfora acerca de cómo Atsushi era un niño abusado física y mentalmente, de cómo Shibusawa experimentaba con él. La parte de que le duele la mandíbula no es por casualidad. Y naturalmente lo último es la muerte de Shibusawa.
Solo por si quedaban dudas.

Bungou Stray Shots [Multishipp]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora