Me despierto de una pesadilla. Miro el reloj, son las ocho de la mañana, sólo he dormido dos horas. Al girarme, veo a Luke durmiendo a mi lado con el pelo despeinado. Me levanto para ir al baño y me lavo la cara. Cuando salgo, me encuentro a Adam en la puerta. Está sin camiseta y con unos pantalones de chándal cortos. No me distraigo mirándolo y me dirijo a mi cama.
-¿Estás bien?
No tengo ganas de hablar con él así que no contesto.
-Te oí llorar hace unas horas mientras intentabas dormir.
-¿Acaso te importa mi vida?- suelto, de espaldas a él.
-Sólo quiero que sepas que lo siento por lo del beso en la discoteca, no quería hacerte sentir mal ni nada de eso.
-Da igual, no pasa nada.
-¿Entonces por qué llorabas, por qué estás borde conmigo?
-Porque no me da la gana mostrarme feliz cuando realmente no lo estoy- me giro para verle la cara.- No me da la gana ser feliz para otros y yo sentirme como la mierda por dentro. Lo he hecho demasiado tiempo- digo casi susurrando. Las lágrimas amenazan de salir rodando por mis mejillas, no me opongo. Me he cansado de hacer ver que soy fuerte.
Adam se acerca y me da un abrazo fuerte. Escondo mi cara en su hombro y pongo mis manos en su espalda. Podría pasar así mucho tiempo. Me coge la cara con sus manos y me da un beso en la frente. Él sonríe.
-Sea lo que sea se podrá arreglar, no te preocupes.
Si supiera...
Me estiro en mi cama junto a Luke e intento dormir, pero no puedo dejar de pensar en como me miró Phoebe en esa terraza, cuando me di cuenta de que ya era demasiado tarde. Cuando perdí a mi mejor amiga.Me despierto de un salto por culpa de un ruido.
-Lo siento- se disculpa Luke recogiendo el móvil del suelo.
Vuelvo a estirarme en la cama. Me duelen los ojos de haber llorado anoche, tengo miedo de que estén rojos o hinchados. Por si acaso, me tapo la cara con la manta, así Luke seguro que no me los ve.
Cojo mi móvil y reviso mis redes sociales, nada interesante. Entro a Whatsapp y veo los mensajes de mi padre preguntándome si estoy bien. Obviamente le digo que estoy perfectamente, pasándomelo genial, no lo quiero preocupar más de lo que ya está.
Cuando son las 13, me pongo en pie y voy al baño. Quiero darme una ducha antes de bajar a comer. Veo a Adam estirado en su cama, con su móvil en la mano. Me mira y enarca las cejas, capto lo que quiere decir y me encojo de hombros, no estoy mejor que anoche, eso seguro.-Me voy a duchar, no molestéis- aviso a los chicos.
Al entrar al baño, pongo música. Quiero activarme un poco, no estar todo el día por la habitación pareciendo un zombi. El agua caliente me golpea el cuerpo, haciéndome sentir una sensación de alivio al llegar a masajearme los hombros. Me paso así un buen rato, no sé cuánto tiempo exactamente, pero se siente muy bien. Alguien me saca de mis pensamientos cuando golpean la puerta.
-¿Estás bien? Llevas una hora ahí dentro- dice Luke desde el otro lado de la puerta.
-Sí, ya salgo- me apresuro a quitarme el jabón del pelo y el cuerpo y me visto rápido. Me pongo unos pantalones cortos negros y un top de tirantes del mismo color.
Justo cuando salgo del baño entra Luke corriendo.
-Me estoy meando y yo también me tengo que duchar, huelo fatal desde anoche- dice, y seguidamente cierra la puerta de un golpe.
-Pues sí que tenia prisa- digo medio riendo.
Adam cuelga el teléfono rápidamente. Estaba hablando con alguien.
-¿Quién era?
-Nadie.
No le creo pero no quiero parecer pesada, tampoco debo entrar en su vida privada. Unos minutos después alguien llama a la puerta de la habitación, cuando la abro me encuentro a Beth ya vestida con unos tejanos azules y un top blanco.
-¿No me ibas a contar nada?- parece enfadada, muy enfadada y ya sé por qué.
-Aquí no, Beth. Salgamos fuera.
Mi amiga se gira y la sigo hasta el sofá del pasillo. Se sienta y cruza los brazos. Yo respiro hondo, no va a ser fácil contárselo.
-Lo siento, solamente pasó. No fue mi intención hacer daño a su relación, simplemente me dejé llevar por el momento y cuando me di cuenta de que estaba mal lo detuve- Beth sigue en la misma posición que antes, no se ha movido nada.- Phoebe lo entendió todo mal, yo nunca quise hacerla sentir así. Chase no me gusta, solo es- cojo aire- mi amigo.
-Lo sé, pero eso no quita que no entiendas porqué Phoebe se siente así. Ella está muy mal, se siente engañada por dos partes y no es fácil de lidiar con eso.
Me entiende. Ella es la única que lo hace siempre.
Me siento a su lado y le doy un largo abrazo, se me cae una lágrima.-¿Está muy enfadada?- pregunto. Beth asiente con la cabeza como respuesta.- Voy a hablar con ella.
-No lo hagas si no quieres que ella te dé una hostia. Porque créeme, Phoebe ahora mismo lo haría con mucho gusto.
La entiendo, aunque necesite hablar con ella le dejaré un tiempo para que pueda pensar en sus cosas y ordenar sus ideas. Cuando me despido de Beth y entro en mi habitación voy directamente a mi cama, donde también está sentado Luke.
-¿Dónde estabas?
-Con Beth. ¿Has visto a Chase?- pregunto y él niega con la cabeza.
-No lo he visto desde que se fue de la discoteca ayer. No se debe encontrar bien.
Debería contarle todo a Luke, pero no quiero que todo el mundo lo sepa ni que él me odie así que ya se lo contaré más tarde.
-¿Esta noche también salimos?- pregunta el rubio.
Tiro mi cabeza hacia atrás.
-No lo sé. No tengo muchas ganas pero si vais todos me uno.
-Adam, ven- el chico se acerca a nuestra parte de la habitación y se sienta en la cama.- ¿Sales esta noche con nosotros?
-Eh, si- cambia rápidamente de tema.- No quiero bajar a comer al restaurante. ¿Pedimos la comida para que nos llegue aquí?
-¿Podemos hacer eso?- pregunto, extrañada.
-Sí, lo pone en el papelito que nos dió la chica de la entrada el primer día.
Pedimos la comida del restaurante y un hombre del servicio del hotel nos la trae a los pocos minutos. Mientras comemos en la cama grande, miramos una chorrada de serie que están haciendo en la televisión.
-¡Bella!- grita Chase des del pasillo. Me pongo en pie y abro la puerta.- Fuera. Tengo que hablar contigo.
En este momento siento miedo. No sé lo que me va a decir, no tengo ni idea de lo que siente y tengo la sensación de que no me lo va a decir.
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THEY
Teen FictionChase y Bella siempre habían estado muy unidos pero últimamente él ha cambiado, no es el mismo de siempre. Juntos van a una fiesta, donde conocen gente nueva. Adam, así se llama el nuevo, un chico diferente a los demás, recién llegado de Nueva York...