Trilogía O'Conner Extras

01.- "Walker y O'Conner"

"Sin Miedo. O'Conner #1"

Escena ocurrida luego de que Jaylan Sellers; el alcohólico asqueroso, besara a Yered Payne enfrente de nuestro Zahir.

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Zahir O'Conner

Ya no quiero nada.

—O'Conner, lo mejor sería que fueras a casa ahora —soltó Walker, deteniendome del brazo, antes de salir del bar al que escapé después de la fiesta—. Estás muy ebrio, tú jamás te pones así, ¿Qué pasó?

—Un vaso con hielos me pasó —respondí, alejándome de él.

—No te entiendo, voy a llevarte a casa, es un peligro que estés en ese estado.

—¿Qué acaso no puedo tener algo más de diversión aunque sea una noche? ¿No puedo despejarme de los problemas bebiendo? Tengo entendido que eso es lo que hacen las personas desde hace mucho.

Las palabras que salían de mi boca, ni siquiera yo sentía que fueran cosas que yo diría en una fiesta normal.

Pero, el alcohol estaba subiendo considerablemente en mi, y ya ni siquiera me importaba.
Digo, era la primera vez que estaba en ese estado, y a decir verdad, prefería eso a estar consciente de la realidad.

No era que mi realidad fuera horrible, solo no me gustaba en este momento, yo también tenía derecho a quejarme, a estar triste.

¿O acaso era malo que yo también sufriera?

Porque, sufrir como tal no realmente, pero había cosas, cosas de mi vida que no me gustaba que pasaran, porque parte de ellas lastimaban a los que quería.

Y hoy no estaba en condiciones de decirle al mundo que todo estaba bien.

Jonathan me había seguido, eso era seguro, irme de una fiesta sin avisar, no entraba en las cosas que yo normalmente hacía.

Y justo cuando sentía que ya había estado mucho tiempo aquí, quise irme, pero no contaba con que él iba a estar esperándome cerca.

Solo por una ocasión, no quería pensar en nadie.

—No es eso —señaló, guiandome a la salida—. El problema es que tú no eres así sin razón, ¿Es por Jaylan?

Dudé. —¿Tú cómo sabes de Jay?

Y como siempre, Jonathan Walker puso esa expresión de seriedad y vacío.

—Soy tu mejor amigo, y no eres discreto, sé que tú estás estúpidamente enamorado de Sellers, lo has estado siguiendo desde que te conozco o antes. ¿Y crees que no voy a saber que has estado cerca de él?

Finalmente, soltó mi brazo.

—No es nada —añadí—, voy a caminar y listo, vuelve a la fiesta, deben estarte esperando.

Rió amargamente. —Están esperando a que él gran O'Conner vuelva, no a mí. Y no creo que sea lo mismo sin ti.

—Diles que morí —finalicé, yendo firmemente por otro lado.

Veía el suelo borroso, mi realidad un poco más distorsionada, y solo escuché la última petición de mi amigo de fondo.

—¡Al menos avísame cuando llegues!

Pero claro, que yo sabía que seguramente él iba a seguir detrás de mi.
Porque así era Jonathan, cuidaba a las personas sigilosamente, y a veces tenía una manera cruda de hacerlo.