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❛❛Addiction — Female name❜❜
— No puedes fumar aquí, lo sabés Suna. — cerré la puerta y me dirigí hacía el.
— No puedo evitarlo, me hace olvidarme de todo — dijo Suna volviendo a fumar.
— Solo ten cuidado, si Kita te ve, te sacarán del equipo —
— ¿Me extrañarías si me voy, no es así? — exclamo Suna sonriendo pícaramente.
Reiste ante el comentario, pero en realidad no lo sabías. Estabas confundida respecto a el, te había dado tantos problemas y ahora están en un gimnasio solos viendo como el está fumando.
Aunque drogarse siempre te pareció algo innecesario, tus padres te inculcaron que si lo hacías serías una decepción para ellos, y para la familia. Así que ni siquiera te haz puesto a pensar en hacerlo. Pero en este momento, cuando ves a Suna haciéndolo, piensas que parece divertido, te da igual ser la niña que ellos siempre quisieron, por primera vez quieres hacer algo sin importar que te dirán o como reaccionarán.
Tus padres siempre controlaron tu vida, haciendo que apengas tengas infancia, siempre fuiste una niña muy reservada y callada, arrogante y algo egocéntrica. Pero las personas cambian y tu lo habías hecho, para bien o para mal, lo habías hecho.
— ¿Se siente bien? — comenté viendolo exhalar humo.
— Algo así, es jodidamente adictivo
Sonreíste y agarraste el móvil, querías evadir completamente el hecho de que querías probar, querías saber cómo se sentía, que se sentía olvidarte de todo, relajarte, tener los ojos rojos.
Pasaron minutos y el dejo de hacerlo, para empezar a decir cosas incoherentes y coquetearte. — Eres linda — Me gustan los gatos ¿sabés? —Los gemelos son un fastidio —
Siguió así por unos minutos hasta que dijo unas palabras que hizo que erizarán tu piel — Siempre me doy cuenta que me estás observando, desde el primer día que llegaste aquí, pensaba que solo eras una chica que quería estar conmigo, pero tus ojos me miraban con odio y eso apesta porque ninguna chica nunca me miro así ¿sabés? — dirigió sus manos hacia tu cachete para apretarlos y mirarte como si fuera una amenaza.
Te sonrojaste y lo apartaste lo más rápido que pudiste, estaba drogado y decía cosas tontas, pensabas, aunque en realidad tal vez tengan mucho sentido.
— Estás demasiado drogado, creo que me iré. — agarré mis cosas y salí lo más rápido que pude del gimnasio. Suna solo sonrió y río, dudo mucho que haya entendido le acabo de decir.
[...]
Habían pasado 2 horas desde lo que ocurrió, estabas en clases, escuchando al profesor de Matemáticas hablar. Suna no se había presentado. Te sentías aliviada, lo que hizo hoy te incomodo bastante, y rogabas para que no recordará lo roja que te habías puesto por sus palabras.
Al salir de clases tenias que ir al gimnasio de vuelta, los verías practicar, debido a que en un mes tendrán un partido de práctica con Fukurōdani, un muy buen equipo que fue a las nacionales. Por lo que te dijo Kita está no es la primera vez que juegan con ellos. La última vez que jugaron Inarizaki perdió 2-1.
Aunque eres mánager desde hace como dos semanas, tienes un gran aprecio por tu equipo, tal como ocurrió en Karasuno, ves como se esfuerzan cada día más, cuando fallan un saque ves la decepción en sus ojos, pero nunca se rinden, eso es algo que amabas del vóley y de los chicos de Inarizaki.
Suna Rintarou
— La cabeza me da vueltas, siento que voy a morir — lavo su rostro bruscamente.
Suna durmió treinta minutos después de que te fueras del gimnasio. Aunque el no recordará detalladamente todo lo que pasó, tenía recuerdos esparcidos por su mente. Recordaba que te estaba coqueteando y que te hablo en un tono amenazante, pero no recuerda las palabras que dijo.
— Maldita sea, tendré que disculparme con ella — pensó dn voz alta.
Suna decidió ya no presentarse a clases hoy, tenía los ojos rojos e hinchados, era muy evidente que el estaba drogado. Si lo descubrirían su vida se arruinaría, junto a los privilegios que le dan sus padres. Fue al parque a relajar su mente, y esperar a que el efecto se fuera. Mientras utilizaba el celular y comía unos chuupet.
— Hey, pásame el balón, haré un nuevo saque —vbufó el rubio listo para sacar.
Atsumu hizo un excelente saque, era perfecto, y la fuerza con la que se dirigía su saque era brutal — Le sacarás el brazo al libero o jugador si intenta detenerlo — felicité, tuvo un gran progeso en solo dos semanas.
Kita estaba ayudándote a escribir cosas que consideraba bastante importantes para el equipo, mientras los demás seguían practicando. Suna tampoco se presentó a las clases de vóley, para tu suerte o desgracia, así que Atsumu te pidió que intentarás bloquear uno de sus saques, al principio te negaste completamente, pero sabías que no se iba a rendir sino aceptabas.
Atsumu estaba listo, está vez haría un saque normal, Osamu se posicionó a lado tuyo para que no te lastimarás. Saltaste cuando viste el balón dirigirse hacía ti, la tensión en el ambiente se podía notar a kilómetros, Atsumu encontraría una forma de burlarse de ti aunque fallarás o lo bloquearás. Dejaste cualquier pensamiento detrás, levantaste los brazos junto con Osamu, el bloqueo de ambos era bueno, tenía aperturas, pero para ser la primera vez no estaba mal aunque el balón cayó igualmente. El bloqueo falló.
— Bien hecho — felicitaron Kita y Osamu. Atsumu río por unos segundos, hasta que Osamu le pidió que se callará, y termino felictandote.
