Ambos se encontraban mirando el paisaje en aquél mirador. Degel le contaba cada detalle de su vida y como fué que terminó casado con ese hombre que no ama.
También le comentó sobre Kardia y el accidente que tuvo junto con la señorita Seraphina.
Sentía una punzada en el pecho porqué no merecía sufrir de esa forma, ese joven de cabellos verdes no puede vivir así toda su vida.— Degel... ¿Has considerado algún día escapar? — Cuestionó el moreno intentando cambiar un poco de tema.
— Si, pero Unity me ha dicho que no puedo escapar, de lo contrario... Me buscaría hasta donde me encuentre.
Deuteros no podía creer que ese sujeto que lo contrató sea tan altanero y manipulador, una cosa era segura y eso era que Degel no es feliz.
Sin pensarlo dos veces se acercó hasta donde estaba Degel y lo abrazó con suma ternura — Te prometo que haré todo lo que este a mi alcance por sacarte de ese lugar.
— Deuteros — Susurró el joven galo, esa calidez que comenzaba albergar era muy similar a la que Kardia alguna vez le dio.
Ahora sus mejores momentos con él quedaban solo en sus pensamientos...La tarde cayó, Deuteros nuevamente regresaba para llevar a Degel a su casa.
Se había quedado dormido en su hombro, esa calidez del contrario lo hacía verlo de otra manera, a pesar de llevar un día a su lado, se había robado completamente su corazón.
.
.
.
.
.
Pasaban los días, Deuteros siempre procuraba llevar a Degel a distintos lugares para que pudiera despejar su mente. Unity no se daba cuenta de lo cercanos que se estaban convirtiendo porqué tenía toda la confianza depositada en ese joven de tez morena ya que siempre le daba explicaciones sobre los lugares a donde iban y como era de esperarse, Degel afirmaba todo lo que su nuevo chófer decía cuando rendía cuentas frente a Unity.Con lo que ganaba podía ayudarle a su hermano con su rehabilitación después del incidente con la movilidad de sus brazos.
Aspros siempre escuchaba la plática de Deuteros y lo animado que estaba cuando compartía su día a día con Degel.— Deuteros, si mi intuición no me miente... Diría que estás enamorado del joven al que le sirves como chófer — Contestó el gemelo mayor mientras seguía intentando tomar algunos objetos con sus manos, gracias a su hermano pudo apoyarlo en sus terapias para que nuevamente vuelva a trabajar sin estarle cargando todos los gastos de la casa a Deuteros.
— Como no enamorarse de Degel... Si parece un ángel — Dejó escapar un suspiro como joven enamorado mientras miraba por la ventana de la cocina.
— Como sea, solo te daré un consejo Deuteros, eres mi hermano y te aprecio mucho... — Le susurró preocupado — No juegues con fuego, las consecuencias pueden ser muy malas para ti.
.
.
.
.
.
.
.Al día siguiente Deuteros esperaba a Degel en la entrada, no demoró mucho en salir el joven de cabellos verdes con una molestia de los mil demonios.
No sabía si había tenido una fuerte discusión con Unity o que le habrá pasado, ya se encargaría de preguntarle en el camino, si algo que tenía era que no le gustaba verlo de esa forma.El único lugar donde podía ser muy abierto con él, era en el auto. El gemelo menor fué el primero en romper esa tensión ya que Degel no decía nada.
— Degel... ¿Que ocurre? No sueles ser así — Cuestionaba mientras miraba por el retrovisor al joven de cabellos verdes con una mirada retadora.
— Siento mis actitudes Deuteros, pero... — Tuve una discusión con mi madre que ya me tiene harto — Contestó Degel tratando de tranquilizarse, claro que el moreno no se merecía sus malos tratos por un coraje que le haya hecho pasar su familia con sus arreglos.
— Entiendo... ¿Entonces donde gustas que te lleve hoy? Para que olvides este mal día.
Eso era lo que amaba de Deuteros, le recordaba mucho a Kardia porqué de la misma manera siempre procuró darle ánimos aunque su vida se estuviera cayendo en mil pedazos.
— Me gustaría ir a un lugar abierto, lejos de la ciudad.
El gemelo menor asintió y tomó camino rumbo a la carretera, esta vez no irían al mirador, esta ocasión haría el esfuerzo por llevarlo a las afueras de la ciudad, en un sitio de reserva donde rentan cabañas a costos accesibles. Al menos así podría darle un respiro a Degel.
No demoraron mucho, cuando llegaron les asignaron una cabaña pequeña pero con todos los servicios, cerca de ahí corría un río y el lugar era tranquilo, un aroma peculiar a pinos y árboles del lugar.
— Y bien Degel ¿Que te parece este lugar? — Preguntó Deuteros mientras extendía su mano para ayudarle al joven de cabellos verdes a bajar.
— Es precioso, tú si sabes como relajarme — Respondió muy animado mientras observaba todo su entorno, maravillado con el canto de varias aves y respirar aire limpio.
— Tenemos seis horas antes de que Unity llegue — Contestó el menor mirando su reloj.
— Lo sé, por eso le diremos la mentira de siempre — Al decir esto Degel le sonrió a su joven chófer.
— Si, debemos ser discretos... Si alguien aparece, tu y yo no nos conocemos, simplemente, no saludamos.
Mientras hablaban ambos caminaban rumbo a la cabaña que les habían asignado. El gemelo menor sacó las llaves para poder abrir, al entrar Degel quedó maravillado por ese sitio tan tranquilo, era todo lo que necesitaba.
El moreno cerró la puerta y dejó las pertenencias de Degel en la mesita.
Dejó escapar un suspiro y se armó de valor, quería confesarle su sentir.— Degel — Lo llamó en un susurro.
El mencionado al escuchar su nombre dejó de recorrer el sitio y se acercó a él — ¿Si?
Cerró sus ojos y apretó los puños, esto sería sumamente importante para él, también estaba preparado por si sufría un rechazo.
— Yo... Antes de decir esto no quiero tratar de ofenderte ni pretendo arriesgarte, pero ya no puedo con todo esto que siento.
Degel sabía a donde iba todo esto, no era tonto, las miradas y las preocupaciones del gemelo menor eran muy notorias cuando estaban solos. Lo tomó de las manos para brindarle confianza ya que lo notaba muy nervioso.
— Deuteros... Llegaste a mi vida en el momento indicado, me has robado el sentimiento. No me importaría guardar el impulso cuando estemos frente a los demás. También siento lo mismo por ti — Al decir esto colocó su mano sobre el rostro de moreno con mucha ternura.
— Sólo te ruego... Callemos este secreto frente a los demás, cuando sea el momento... Te juro que buscaré la forma de sacarte de ahí. Sé que tampoco puedo ocupar el lugar que ocupó Kardia en tu corazón pero yo por ti, daría mi vida entera — Al decir esto tomó de la cintura a Degel lo pegó más a su cuerpo y poco a poco fué acercándose a esos labios de los cuales sin querer sería el dueño de cada beso y caricia de ese joven que le roba sus pensamientos.
Unidos en un solo beso que los llevaría más allá que un simple roce entre ambos...
❄🔥❄🔥❄🔥❄🔥❄🔥❄🔥❄🔥❄🔥❄🔥❄
ESTÁS LEYENDO
Sentimientos.
FanfictionTe miro de lejos, sueño contigo, me has robado el sentimiento... De amarte inmensamente. Si este tipo de lecturas no es de tu agrado, simplemente ignora por favor. La historia es mía Aries_9322, los personajes no me pertenecen son de Saint Seiya (Ma...