Renacer de Cuervo [Haikyuu y tu]

Un nuevo comienzo

Narra ___

La gran estructura educativa se alzaba con gran vigor frente a mis ojos. Mi madre había mencionado que Karasuno era bastante grande. Viniendo del Shiratorizawa no creí pensar que otras escuelas eran grandes, pero la escuela de los cuervos me sorprendió definitivamente. Mi nombre es Goshiki ____, mido alrededor de 1,54 cm. Alégrense, me estiré 2 centímetros más a comparación del inicio de vacaciones. Durante la escuela media solía ser estudiante del Shiratorizawa con mi hermano mellizo. En efecto, esa escuela con el mejor equipo de voleibol de la prefectura; y esa era exactamente la razón por la cual dejé la escuela.

Me pregunto, si habrá sido realmente una buena idea venir a esta escuela para la preparatoria. Había hecho una promesa cuando dejé el Shiratorizawa y no la rompería por nada del mundo, ni aunque se me presente el mismo Jesucristo de frente lo haré. Una pelota chocó contra mi brazo izquierdo mientras caminaba, haciéndome tirar mi termo de Doraemon.

"Joder, era nuevo… que no se haya rayado"

Miré la pelota de voleibol, que ahora estaba a mis pies y miré el grupo de chicos que miraban angustiados, esperando mi reacción. Tomé el balón y les hice un saque hacia su dirección, siendo recibido por un chico de ojos pequeños, cabello largo y un poco de barba. Como la imagen de Jesús. Ellos habían quedado sorprendidos, pues había sido un saque limpio.

"¿Es esta una señal del cielo?"

Noté como se dirigían hacia mí con prisa, en especial un chico de cabello naranja que destacaba bastante, pues era más bajo que el resto. Caminé rápido por un camino contrario al que debería ir, todos ellos eran muy grandes, me recordaban a… ellos. Miré hacia atrás y los había perdido. Así que esos eran los cuervos que no pueden volar. Triste que hayan decaído tanto. Aún recuerdo cuando vi ese equipo por primera vez. Pequeño gigante era asombroso, verlo jugar era todo un poema. Al caminar sin saber a dónde iba terminé perdiéndome. Esto ya era costumbre hacerlo en el Shiratorizawa, pero necesito llegar rápido a mis clases. Dos chicos, que muy animadamente entraron en el pasillo donde estaba, se detuvieron a revisar algo en sus teléfonos. Uno era alto y con la cabeza rapada y el otro era un poco más alto que yo y con un mechón de diferente color que resaltaba en su oscuro cabello negro. Me acerqué con cautela y toqué el hombro del más alto.

—Perdona, de casualidad ¿Sabes donde queda la clase 1-2?. —Pregunte enseñándole mi horario dónde indicaba que mi clase era la 1-2.

—Claro angelito. Noya ¿Ese no es el número de la clase de Kageyama e Hinata?. —Preguntó a lo que el otro asintió, tenía un pequeño rubor en sus mejillas y lo hacía verse muy tierno. —Bien, llevemos a este angelito hasta allá para que no se pierda.

—Se los agradezco profundamente. —Agradecí haciendo una reverencia, viendo como el rapado que había tenido tanta confianza se sonrojaba un poco y desviaba la mirada.

Ambos me guiaron hacia el salón y tuvimos la oportunidad de presentarnos. El rapado se presentó como Tanaka Ryūnosuke y el bajito como Nishinoya Yuu. Ambos nombres eran tan geniales, ellos eran un año mayor que yo, pero realmente no lo parecían. Llegamos al salón cuando aún faltaban 10 minutos para comenzar.

—Muchas gracias Nishinoya senpai y Tanaka senpai. —Agradecí otra vez con una reverencia. —Espero y lleguen bien a sus clases.

—¡Noya-san, Tanaka-san! —Una voz un poco fuerte se escuchó en el salón. Todos dirigimos nuestra mirada hacia el propietario de la voz. Era el mismo chico de cabellos naranja de esta mañana. —¿Qué hacen aquí? ¡Oh! tú eres la chica de esta mañana, fue increíble como le pegaste al balón fue tan fush y luego pow.