—Hola Mina.
Dijo ensanchando su sonrisa, no tardaba en comenzar a hiperventilar, mis manos sudaban y las palabras parecían quedarse atascadas en mi garganta, eran como agujas clavándose en ese lugar, no era ni capaz de pronunciar una sola sílaba, era alarmante que este chico ahora produzca esto en mí cuando antes causaba un efecto diferente.
Parpadeo varias veces, un tanto incómoda bajo su mirada atenta, que escrutina con esos ojos negros cada partícula de mi ser, sigue igual de atractivo que la última vez que le vi, esa vez no fue la más grata pero tampoco podía alegar sobre ello.
Suspiré dispuesta a hablar aunque parecía que mi metabolismo no quería cooperar en lo absoluto con mi cometido, entonces él se adelantó.
—Yo.., supe lo qué pasó—estaba incomodo, me tensé de pies a cabeza, esto era precisamente lo que no quería—. De verdad no tienes idea de cuánto lo sie..
—N-No te preocupes—le corto lo más rápido que puedo, arrastrando las palabras que me salen nerviosas y atropelladas, realmente no quería pasar por esto y no sabía cómo lidiar con la situación, no me importaba ser abrupta o incluso sonar grosera, él tendría que entender.
Hice una reverencia que casi me deja dislocada pues fue demasiado rápido por lo que al enderezarme sentí como todo me dio vueltas, era normal, a veces pasaba pero que estuviera a punto de caer por la gravedad no era del todo común, comenzaba a sentirme muy mal y no sabía el porqué, mucho menos sabía si él que estuviese él para ayudarme cuando estuve a nada de caerme fuera bueno, me ayudó pero el contacto físico me quemaba, antes lo adoraba pero justo ahora quiero que quite sus manos de mi cintura, estaba siendo amable y yo muy tonta.
—Por dios, ¿estás bien?—me pregunta una vez he logrado recuperar la postura, por supuesto que no estoy bien, que clase de pregunta es esa.
—Sí, solo fue un mareo—digo torpemente.
Hace una mueca no muy convencido por mi ligera mentira, rezaba porque me creyera, quería estar lejos de su persona, algo en el ambiente me cortaba como cuchillos filosos, era horrible.
—No te ves muy bien, será mejor que te lleve a la enfermería—No quería pasar un segundo más con él ¿a caso no estaba siendo muy obvia?, no necesitaba su ayuda y aunque lo fuera no lo quería, joder no.
—Estoy bien, debo ir a clase—esta vez he empleado un tono más decidido y dispuesta a quitar sus brazos de mi anatomía le sonrío lo más cortes que me permite mi mal humor, pero como era de esperarse no se rendía.
Habían veces en las que realmente no me caías Taehyung.
—Creo que deberías ir con la enfermera—estaba más que cansada, la paciencia se me fue.
—Ya veré qué hago yo, suéltame—retiro sus manos de un empujón importándome poco su reacción, sí Taehyung, esta es la nueva yo—. G-gracias por la ayuda, estaré bien.
A nada de marcharme por un demonio, a nada de marcharme con la frente en alto a los baños de mujeres para llorar él me detiene con su brazo rodeando el mío, me mira mordiéndose los labios, sé que quiere decirme algo pero no quiero escucharlo, o tal vez quiere maldecirme o simplemente no quiere decirme nada, después de todo no lo conozco bien.
Siempre fue tan falso conmigo.
—Mina, yo quisiera hablar contigo—aquel era su gran motivo
—Pero yo sinceramente no quiero hacerlo—fue lo ultimo que dije antes de marcharme de ahí, no lo necesitaba, ni antes ni ahora y estaba segura que tampoco en un futuro, aunque dolía y no tenía ni la menor idea del porqué.
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𝐉𝐞𝐨𝐧'𝐬 𝐌𝐨𝐧𝐬𝐭𝐞𝐫; JJK [+18]
Fantasy"Cada que en las noches no consilio el sueño Gguk viene y me duerme con un cuento, él es mi amigo y prometió jamás dejarme, porque eso me haría llorar y Ggukie dijo que nunca me lastimaría". La muerte de Yami fue un pase libre a su más reciente obse...