Trece.

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—Mamá, de verdad podemos regresar solos.- reprocha Hyungwon a su madre, quien dejaba a sus dos hijos en la puerta de la escuela.

—Deja de discutir, Hyungwon.- gruñe Kihyun a su vez antes de dar la vuelta y emprender su camino al interior del instituto.

Sus padres los habían castigado a los dos. A Hyungwon por lo de la ventana y a Kihyun por ser el que estaba a cargo de la casa y no hacer nada por impedir tanto la fiesta como el incidente. ¿El castigo? Sus únicas salidas por las próximas dos semanas, serían exclusivamente a la escuela. Su padre los recogería incluso a la salida para evitar que vayan a otra parte.

El más molesto con la situación definitivamente era Kihyun. Y es que no sólo tendría que soportar a su hermano las veinticuatro horas del día de los próximos catorce días de su vida reprochando y tratando de negociar el castigo con sus padres, sino que también tendría que soportar esos catorce días el no volver a su casa en compañía de Changkyun.

¡Y no es con todo lo que debería lidiar! Por sobre de todo, debía lidiar con la culpa de que Changkyun se sintiera mal cuando le dijese que no volvería con él esas semanas. ¿Qué tal si pensaba que sólo había encontrado la excusa perfecta para, como él dijo, alejarse? Eso es lo último que quiere que su amigo piense. Lo único que le falta es hacer sentir mal a Changkyun.

Suspiró con pesadez mientras caminaba a su primera clase. En su andar se podía sentir su rabia y sus ganas de romper todo. Incluso durante su primera clase, no lograba concentrarse.

— ¿¡Qué te pasa hoy, Kihyun!?- había reprochado su profesor de química al notarle tan distraído. — ¡Ten cuidado con eso! ¡Kihyun! ¡Allá!- nuestro rubio no erraba desastre, algunos de sus compañeros se burlaban, otros lo veían confundido y uno sólo de ellos lo miraba preocupado y sin hacer nada.

Éste único era Minhyuk. Pero Kihyun en verdad jamás lo volteaba a ver en clase, así que esa vez no fue excepción.

Abrumado, Kihyun trataba de acatar todas las órdenes de su profesor, además de comprender la clase, pero ambas cosas eran difíciles cuando todo lo que tiene en mente es a Changkyun y lo que le había contado la noche anterior.

Se había pasado toda la mañana pensando distintos argumentos de por qué lo que le había contado podía ser mentira. Cuando se lo dijo, eran cerca de las tres de la mañana. Ambos tenían sueño. Eso le daba dos opciones: la primera, que Kihyun haya estado muy dormido y haya entendido mal, o que Changkyun haya estado muy dormido y que lo haya dicho sin pensarlo.

O también pudo ser simplemente una broma. Una de muy mal gusto, pero una broma finalmente. ¿Changkyun haría bromas de ese tipo?

—Ugh...- se queja un poco desde su asiento del laboratorio, posando una mano en su frente.

—Kihyun, ¿estás bien?- Jeongin, su compañero de banco le susurra por lo bajo.

— ¿Hah? Sí, todo bien.- contesta él con una sonrisa corta, aunque no parece una respuesta genuina. Su mirada era triste y sus ojeras dejaban en evidencia cuán agotado estaba.

— ¿Estás seguro?- sin terminar de escuchar la respuesta, suspira pesado y se levanta de su asiento, yendo hacia su profesor.

— ¿Puedo ir al baño?- al obtener respuesta positiva, sale rápidamente del laboratorio, corriendo por el pasillo.

— ¿Qué ganas haciendo esto, Taehyung?- Gruñó Changkyun hacia aquel acosador. Intentaba mantener un tono de voz firme, pero en verdad estaba muriendo del miedo.

Ese chico era una caja de sorpresas. Una puta caja de Pandora. Nada de lo que ese loco haga por su propia diversión le sorprendería ya a decir verdad. Ese imbécil y sus dos seguidores eran un peligro y tenían especial inclinación por molestar a Changkyun.

Love Playlist for Kihyun - Changki.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora