Love Playlist for Kihyun - Changki.

Cuatro.

Y el día finalmente había llegado. Domingo. Kihyun era un manojo de nervios en su totalidad. Su habitación estaba ordenada, sus padres estaban trabajando aún, así que estarían tranquilos. Había preparado un plato con galletas que había hecho junto a su madre la noche anterior, al igual que dos vasos con jugo de manzana. Todo parecía estar listo para la llegada de su modelo.

Pero tardaba. Ya eran las doce, hora acordada. El reloj continuó hacia las doce y media, las y cuarenta y las y cincuenta.

Y a la una, se hizo presente el sonido del timbre. Kihyun, muriendo por dentro, corre hacia la puerta y la abre.

— ¡Hola! Uhm... pasa. — exclama en un tono quizá más entusiasmado de lo planeado. Changkyun iba vestido casi como Kihyun le había pedido, pantalón y playera negros junto a un par de tenis blanco. Lo único que el chico había modificado era llevar una sudadera. Pero ésta era negra, así que no dijo nada. Y, gracias al cielo, traía la guitarra. Kihyun se hizo a un lado, dejando al contrario pasar a la casa. Éste último se encontraba callado y se le notaba bastante tímido.

—Es una linda casa. — se escuchó por fin la arrulladora voz de Changkyun. Miraba a su alrededor, sonriendo ante los adornos y la decoración en general del lugar en el que se encontraba.

—Gracias. — Kihyun estaba parado en el centro de la sala, traía la cámara en las manos también. –estaba pensando que quizá podríamos salir a alguna parte a tomar las fotos. No sé, el parque es una linda escenografía. O quizá el lago, o... algún lugar así.

Changkyun volteó por fin a verle, dejando ver una sonrisa sutil. Es que es tonto. Es que Changkyun es tontísimo. Conoce a Kihyun hace un día o dos y ya le gusta.

Pero, ¿qué le gusta? ¿Serán sus tiernos ojitos levemente bizcos? Quizá son sus finos y rosados labios... o tal vez... ¿Podría ser su ternura? ¿Aquella actitud tierna e inocente que mostraba? Sepa Dios qué es lo que le gusta de Kihyun, pero le gusta.

En cambio, Changkyun era un error de nacimiento. Su piel tan pálida y llena de moretones le causaba gran conflicto. Sus labios, al contrario de los ajenos, estaban secos y más morados que rosas. Sus ojos eran una parodia, al igual que su anatomía en general. En cuanto a su personalidad, también dejaba mucho que desear. Changkyun no era simpático, en verdad. Él no lo veía así, pero eso es lo que la gente veía en él. Changkyun no habla con nadie que no pertenezca a su círculo social conocido y con los que se siente en confianza. Es inseguro, tímido, miedoso y un largo etcétera plasmado en su currículum.

—Claro, vayamos al parque. — Mentiría si digo que Changkyun no fantaseaba aquel momento como una cita. En su mente, todo era una gran cita romántica, la cual terminaría con un beso. Un beso de esos largos y tendidos. De esos en los que tienes tus manos entrelazadas con las de tu pareja todo el rato, de esos que cuando terminan, ambas partes se miran con ojos enamorados y desvían después la mirada tímidamente. Mentiría si no fantaseaba con que aquello era una cita que terminaría con un beso sellado con un "te amo, me gustas" al final.

— ¡Perfecto! Iré a buscar mis cosas y nos iremos, ¿bien? Aquí hay galletas y jugo. El jugo es de manzana, espero esté bien.

—Está perfecto, gracias, Kiki.

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Los dos últimos dos capítulos fueron más un relleno para continuar la historia, pero a partir del próximo las cosas empiezan a tomar un rumbo. ¡Estén pendientes!

-A.