Intuición de madre

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-Narra Mimi-
Los padres de Miriam llevan mirándome bastante desde que Miriam subió a la habitación porque se encontraba mal, parecía que intentaban descifrar en mi, lo que le pasaba a su hija, y creo que Efrén se sentía igual que yo, porque a el le estaba pasando lo mismo.

Marité: ¿Vosotros sabéis lo que le pasa no?
Efrén: ¿Eh? Si, que tiene el estómago revuelto, lo ha dicho
Marité: Efrén cariño, tu hermana actuará muy bien, pero a mi no me la cuela, algo la pasa y no es eso
Efrén: Si le pasa algo ya os lo dirá, tu tranquila
Mimi: Efrén tiene razón, supongo que si le pasa algo lo terminará contando
Marité: No se, es que lleva un día muy raro, a penas a comido, y se la ve cansada, es que se parece a mi cuando estaba embarazada de ella

-Narra Mimi-
Y en ese momento no se como, pero Efrén y yo nos atragantamos a la vez, era increíble como Marité nos había pillado.

Ramon: Ey, ¿Estáis bien?
Mimi: Si si -dije bebiendo agua-
Efrén: Si, tranquilo
Marité: ¿Está embarazada? yo la mato... -dijo suspirando y levantándose-
Mimi: Marité no -me levanté- mira creo que eso deberías hablarlo con ella, pero con tranquilidad por favor, está muy asustada...
Marité: Osea que vosotros lo sabíais
Mimi: -asentí- nos enteramos hace un rato, y después se lo contamos a Efrén, si subes a hablar con ella, hazlo despacio, tiene mucho miedo de lo que podáis pensar
Marité: De acuerdo, pero solo dime una cosa más
Mimi: Claro
Marité: ¿Te ha puesto los cuernos y la has perdonado o...?
Mimi: No no, lo del bebé es buscado...lo hablamos hace unos meses y bueno, parece que ha funcionado
Marité: Vale -sonrió levemente- voy a hablar con ella

Yo solo asentí y me senté en mi sitio esperando que Marité no fuera muy brusca con Miri, ella misma me había contado como se puso cuando se enteró de que estaba embarazada, y dice que le montó un buen pollo, y con lo asustada que estaba Miriam, no quería que esta vez fuera igual.

-Narra Miriam-
Estaba escribiendo algunas cosas en mi libreta cuando llamaron a la puerta.

Marité: ¿Se puede?
Miriam: Claro, pasa -sonreí mientras entraba-
Marité: ¿Podemos hablar? -dijo sentándose a mi lado-
Miriam: Si ¿Que pasa?
Marité: ¿Estás embarazada?
Miriam: Yo eh... -la voz se me empezó a quebrar un poco, no sabía que decirle, pero al final opté por contárselo- Si...
Marité: ¿Porque no me lo has dicho?
Miriam: Me he enterado hace menos de una hora, estaba muy agobiada y pensé que te pondrías como con Irene, lo siento...
Marité: No pasa nada cariño, pero sabes que me gusta que me cuentes las cosas, y más si voy a ser abuela -sonrió-
Miriam: Entonces...¿Estás contenta? -sonreí de forma leve-
Marité: Muchísimo -dijo abrazándome-
Miriam: Menos mal -sonreí siguiéndole el abrazo-
Marité: ¿De cuanto estás?
Miriam: No lo se, supongo que de unas 3 o 4 semanas, no estoy segura
Marité: Cuando volváis a Madrid vete al ginecólogo por favor, necesito saber que todo está bien
Miriam: Tranquila, en cuanto volvamos pido cita
Marité: De acuerdo
Miriam: Una cosa mamá
Marité: Dime cielo
Miriam: ¿Que bocazas de los dos te lo ha contado? -reí-
Marité: Ha sido intuición de madre -dijo riendo levemente- se lo han callado muy bien
Miriam: Menos mal, porque tu hijo tiene una bocaza que parece un buzón de correos -reí-
Marité: Ya ya -dijo riendo- lo se de sobra
Miriam: Papá también lo sabe ¿no? -sonreí- lo del bebé digo
Marité: Si -asintió- pero está muy contento seguro, tampoco me ha dado tiempo a verle la cara, Mimi estuvo diciéndome que hablara con cuidado contigo porque estabas asustada
Miriam: No la puedo querer más -sonreí-
Marité: Se nota -dijo sonriendo y abrazándome de nuevo-

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Holaa!! bueno, se que os dije que le quedaba bastante a esta novela, pero tengo una idea para el final, y creo que la novela en total tendrá unos 40 capítulos, es decir que le quedarían 3.
Me da pena, porque me gusta muchísimo escribirla, pero también tengo ganazas de que leáis la otra porque creo que os va a gustar muchísimo.
Espero que os guste este capítulo. ❤️

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