1 - My Vampire System

158 - Hola Quinn

158 - Hola Quinn

Tan pronto como Vorden entró en la habitación y vio a Quinn y los demás, hizo todo lo posible por averiguar qué estaba pasando. A juzgar por el hecho de que el jefe de los primeros años, el general Nathan, estuviera aquí, sugeriría que se trataba de algo muy serio. Sin embargo, Vorden no pudo establecer el vínculo entre él y Quinn ¿Cómo había llegado a la conclusión de que los dos estaban involucrados en algo?

Si alguien los hubiera visto cuando escapaban con Peter, tendría más sentido que llamaran a Layla y Peter, no a Quinn. Lo único que habían hecho los dos juntos fue dirigirse al planeta portal rojo.

Desconocido para ambos, lo que los había unido eran las marcas de mordiscos. Fue demasiada coincidencia ver marcas de mordeduras en varios estudiantes, así como en uno en el planeta portal rojo. La única conexión que todos tenían era Quinn. Pero tenían sus dudas de que pudiera ser él, así que ahora el sospechoso número uno era la persona que estaba con Quinn en el momento de estos eventos.

"Por favor siéntate." Nathan dijo cortésmente.

Una cosa era segura, Vorden estaba feliz de que fuera Nathan en la habitación y no Duke. Después de enterarse de todo lo que Duke había hecho para intentar deshacerse de él por alguna razón. Vorden habría estado tentado de atacarlo allí mismo.

Vorden se sentó en la silla frente a la mujer, mientras estaba sentado, le echaba una mirada extraña a Quinn. Podía ver que Quinn tenía una expresión de preocupación en su rostro, lo que significaba que iba a pasar algo que no les gustaba.

"Ahora sólo estamos aquí para hacerte algunas preguntas Vorden, simple ¿verdad?" Nathan dijo con una sonrisa. Por lo general, Vorden era bastante bueno para leer a la gente, pero por alguna razón Nathan lo asustaba con esa sonrisa. Porque era casi imposible para él saber si era genuino o no. "Pero te advierto que respondas con sinceridad ahora, porque nuestra hermosa dama aquí puede saber cuándo estás mintiendo o cuándo estás diciendo la verdad".

De repente, Vorden se dio cuenta de por qué Quinn se inquietaba tanto y por qué parecía tan preocupado. Claramente estaban cuestionando a Vorden sobre algún tipo de evento, si hubieran descubierto lo que era y solo querían que lo confirmara, o tenía algo que ver con Peter. El problema era que el propio Vorden no sabía cuánta información había revelado Quinn.

Luego, la mujer extendió su mano para que Vorden la tocara. Cuando los dos se tocaron las manos, Vorden había copiado las habilidades de las mujeres, pero realmente no sabía cómo funcionaba y no era algo que pudiera entender en este momento. Si pudiera, tal vez hubiera una manera de usarlo contra ella.

"¿Tenías algo que hacer relacionado con la muerte del estudiante llamado Earl Hampton?" Ella preguntó. Vorden no respondió de inmediato, porque estaba tratando de pensar.

Al escuchar ese nombre, Vorden finalmente supo por qué lo habían llamado. No sabía por qué le habían pedido a Quinn que viniera aquí o qué había dicho Quinn, pero lo mejor que podía hacer ahora era mentir y no dejarse atrapar. Todo lo que Vorden podía hacer era esperar que Quinn hubiera hecho lo mismo.

Los profesores habían cometido un error antes de interrogar a Vorden, y eso le decía las habilidades de la mujer frente a él. Si su habilidad funcionara de manera similar a la de los detectores de mentiras del pasado, siempre que la persona que respondiera creyera en su propia respuesta, o si realmente no supiera el par, entonces aún sería visto como la verdad. Aunque Vorden estuvo allí, no se podía decir lo mismo de Sil.

No podía confiar en Raten porque Raten a menudo apoyaba a Vorden cuando estaba en la silla viendo todo lo que hacía mientras lo criticaba y también le daba consejos. Pero fue diferente para Sil. Sil pasó la mayor parte de su tiempo durmiendo en la habitación o simplemente sentado en la parte de atrás mirando fijamente al frente de él.

Esta era la única opción que tenía y esperaba que funcionara. Cerró los ojos y dejó la silla. Mientras lo hacía, se acercó a Sill, que estaba en posición fetal meciéndose hacia adelante y hacia atrás como solía hacer.

"Sil, hay una señora que quiere hacerte algunas preguntas." Dijo Vorden. "Todo lo que necesitas hacer es responderlas y luego podemos ir a jugar".

"¿Jugar?" Sil respondió mirando a Vorden.

"Sí, Quinn también está en la habitación y le hicieron la misma pregunta. Así que necesito que hagas lo mejor que puedas, para que contestes. ¿De acuerdo?"

Siempre que Vorden hablaba con Sil. Hablaba con voz lenta y paciente, como lo hacía una madre cuando habla con su hijo. Esto se debía a que la mente de Sil era bastante infantil. Una palabra incorrecta podría provocarle una rabieta, aunque por lo general los padres eran más fuertes que sus hijos y si esto sucediera, podrían controlarlos. Pero en este caso, Sil es más fuerte que Raten y Vorden, por lo que siempre tenían que hablar con Sil de manera cuidadosa.

"Está bien, ¿y luego Quinn y yo podemos jugar juntos?" Sil preguntó

"Sí, pero tal vez solo por un poco de tiempo." Vorden respondió.

Sill se sentó allí como si estuviera pensando en eso.

Mientras tanto, fuera de la mente de Vorden.

"Si no responde Vorden, tenemos que tomar su silencio como una confesión de que estuvo involucrado de alguna manera". Nathan dijo.

Justo cuando Vorden estaba a punto de darse por vencido y volver a sentarse en la silla, Sil respondió.

"Trato." Sil dijo con una sonrisa en su rostro.

Sil se puso de pie y corrió hacia la silla con una sonrisa en el rostro.

De vuelta afuera, Sil estaba sonriendo felizmente mirando a la gente a su alrededor. Cuando vio a Quinn, comenzó a saludar. Quinn encontró las acciones extrañas, especialmente cuando se encontraban en una situación difícil como esta, este comportamiento era diferente a cómo Vorden solía actuar.

Aún así, Quinn decidió devolver el saludo, lo que puso una sonrisa aún más grande en el rostro de Sil.

"Tienes una pregunta para mí." Sil dijo señalándose a sí mismo.

Incluso la mujer se sorprendió un poco por el cambio de actitud, pero decidieron seguir adelante. Ella repitió la pregunta y volvió a preguntar.

"No, yo no estaba allí." Sil respondió. "Ni siquiera sé quién es este Earl, la única persona que conozco es Quinn". Sil dijo señalando en dirección a Quinn.

La mujer continúo haciendo preguntas que Nathan había presentado y Sil continuó respondiendo de una manera ingenua y infantil. "Está diciendo la verdad, ninguno de los dos mintió ni una sola vez".

Nathan luego fue a ajustar las gafas en su rostro, un hábito suyo cuando estaba estresado. "Tal vez realmente tengamos una bestia deambulando por la escuela". Nathan luego los miró a los dos, su instinto le decía que algo andaba mal. Pero era imposible, la habilidad de la chica les decía claramente que estaban mirando en la dirección equivocada.

"Ustedes dos permanezcan aquí por ahora." Nathan dijo. "Te mantendremos aquí por un tiempo, y detendremos a algunas personas que estaban alrededor de la escena en ese momento, a ver si alguien te vio allí también".

"Eh, pero ya respondimos a tus preguntas." Quinn se quejó.

"Mira, si no eres culpable, entonces no tienes nada de qué preocuparte, ¿verdad?" Nathan respondió. "Todo lo que te pido es que te quedes aquí un poco más."

Con eso, la mayoría de los sargentos habían abandonado la habitación para intentar reunir más información. Los únicos que quedaron adentro fueron ellos con Fay y la chica. Ahora que los dos ya no estaban bajo interrogatorio, eran libres de sentarse en el sofá y relajarse juntos. En este momento, Fay estaba ocupada revisando algunos documentos con la chica mientras los dos chicos estaban sentados uno al lado del otro.

Pero mientras lo hacía, Sil no pudo evitar seguir sonriendo a Quinn.

"Umm, Vorden, ¿estás bien?" Preguntó Quinn.

Sil luego giró la cabeza hacia la izquierda y la derecha para verificar si había alguien cerca, antes de colocar su mano sobre su boca y susurrar. "Oh, no soy Vorden, mi nombre es Sil".