Capítulo 3: Los Ángeles

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Estábamos en el avión, una de las azafatas le estaba pidiendo a un señor su lugar para otro pasajero, al parecer se sentía mal y necesitaba estar al frente, el señor no quería dar su lugar así que yo me ofrecería, papi Harry me ha dicho que tengo que poner en práctica el mood TPWK.

—Disculpe — levanté la mano llamando su atención — Si quiere yo le puedo dar mi lugar

—¿De verdad? — yo asentí con la cabeza — Muchas gracias, jovencita

Agarré la mochila con mis cosas, me levanté del asiento pero papi Lou me detuvo del brazo.

—¿Segura?

—Si, papi. En unas horas nos volvemos a ver

—Cualquier cosa estaremos aquí

Me fui con la azafata y llegamos a unos asientos de atrás. Por suerte me había tocado la venta, el destino quería que viera desde lo alto a Los Ángeles por esa ventana.

Saqué mi celular y los audífonos, los conecté y puse la reproducción de la banda de Madd "sick sick sick" es muy buena.

—¿También te gusta esa banda? — señaló mi celular una chica peliroja que estaba a mi lado. 

—Si, son muy buenos — le contesté

—Mi amiga sale en esa banda

—¿De verdad? Mi mejor amiga igual toca en la banda

Platicamos un rato y nos conocíamos más, resultó ser Hannah McCloud, no la había visto al principio y nunca la había tratado o hablado pero es muy buena onda. Ella es una de las razones por las cuales dejaría de ser hetero.

Llegamos a Los Ángeles luego de cinco maravillosas horas de vuelo, me encanta ver los paisajes desde lo alto. Bajamos del avión y me despedí de Hannah, se iba a ver con un amigo, eso fue lo que dijo. Me junté con mis papás ya una vez abajo.

—¿Puedo ir por una bebida, papi Lou?

—Te apuras

—Nos tienes como tus esclavos, nosotros vamos por las maletas y tú por una bebida. — se quejó papá mientras jalaba y arrastraba mis maletas junto con las suyas

—Nadie te está obligando, papi Harry. Byeeee — Fui a una tienda en dónde vendían bebidas.

—¿Me da una de café, por favor? — pedí amablemente

—Por supuesto

Casi no tardó en prepararla y me la dio, me dijo el precio y saqué dinero de una mochilita que llevaba en mis hombros.

«Oh, no. Solo traigo 50 pesos»

¿Acepta dinero mexicano? — le enseñé los 50 pesos de mis "ahorros"

No, solo dólares, niña — se veía molesto

«Genial, lo que me faltaba»

Si no tienes con que pagar vas a tener que... — un hombre lo interrumpió

—Yo pago la bebida por la chica, señor — le enseñó dinero

Un señor pagó mi bebida y el encargado me la dio.

—Gracias, de verdad gracias. — le agradecía al señor que pagó por mi

—No hay de que, cortesía de un estadounidense

—Que amables son los estadounidenses, bueno... algunos — señalé con la mirada al encargado quién aún me veía feo, como si le hubiera robado algo

El chico de ojos verdes (Aidan Gallagher) [Pausada Por Falta De Imaginación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora