~~Te Necesito Chica~~ (Levi y Mikasa)

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Erwuin entro a su oficina tomando asiento en su escritorio comenzado a leer cada papel que llevaba en sus manos, con mucho cuidado y determinación. Paro su lectura en uno muy peculiar, comenzadolo a leer con mucho cuidado de no soltarse alguna letra. Sus ojos se abrieron mientras una sonrisa se formó en sus labios. Tomo la hoja de papel y salió corriendo hacia la oficina de su esposa, entro sin pedir algún permiso viendo también al azabache sentado al frente de la castaña. ¡Genial!, Estaban los dos.

Retomo su postura y camino hacia el sofá que se encontraba aún lado, tomando asiento cruzando la pierna con la otra. Intentado mantener la postura, al final simplemente termino sonrió. Ganandose la mirada de sus dos mejores amigos.

—¿Pasa algo, Erwuin?—se atrevió a preguntar el azabache.

—¡Les tengo una gran noticia!—exclamo. Ambos enarquaron una ceja—Recuerdan que gracias a los muchos candidatos que está vez ingresaron, nos quedamos sin personal de alto rango—ambos asintieron—La sucursal  central de Tokio, nos envío dos superiores más. ¿Saben quiénes son?.

—¿Y como mierda, vamos a saber?, ¿Acaso somos adivinos?—el azabache siempre con su buen humor.

—Dinos Erwuin—animo su esposa.

—Adivinen—levanto sus cejas.

—¡Mierda Erwuin¡, Dinos ya—lo fulminó el azabache.

—¡Mike y Nanada!—exclamo con emoción. La castaña fue la única en reaccionar, corrio hacia su esposo abrazándolo.

—¡Oooh, por dios!—exclamo—¡¿Levi no estás emocionado?!.

—¿Esos idiotas?—se cruzó de brazos—Mas mocosos en el lugar.

—Levi tanto Mike y Nanada, son mayores que tú—soltó la castaña.

—¡Cierra la boca!—la castaña soltó una carcajada—¿Ya acabaron?, ¿Me puedo retirar?, Mikasa me espera para cenar.

—Puedes irte Levi, mañana tienes que estar temprano aquí. ¡Debemos recibirlos!—exclamo. Levi rodó los ojos.

—¡Me saludas a Mikasa!—el asintió Saliendo del lugar.

Salió de la oficina hasta la planta baja, dónde las miradas de los reclutas se pusieron encima de el, y específicamente la única persona que por el momento el odiaba en su vida. Se acercó a el con una sonrisa traviesa, la ignoro y comenzó a caminar hacia la salida y ir directamente a su auto. En ningún momento se alejo de el, más bien lo acompaño hasta su auto. ¡Que fastidió!.

—¿Capitan, podía llevarme a mi casa?—sonrio coqueta—No está tan lejos de la suya.

Levi rodó los ojos.

—Date prisa—le ordenó.

Con una sonrisa la chica se subió, Levi bufo y arranco el auto. Todo el camino fue un silencio absoluto, cosa que agradeció. Se estacionó, quitó el segura y espero a que la chica se bajara, esta seguía intacta.

—Baja, tengo cosas que hacer—bufo.

—Capitan...

El pelinegro se volteó, al momento de hacerlo sus labios toparon con los de ella. Uniéndose en un beso, no se alejo simplemente siguió el ritmo de aquel beso, tan apasionante. Reaccionó minitos después, rápidamente se alejo de ella y rápidamente obligandola a salir. Era casi suplicando.

—¡Vete!—exclamo molesto.

—Capitan...

—¡Maldira sea vete!—suspiro—Tengo una esposa y una hija, las cuales las amo con todo mi corazón. No te rebajes, ¿Okey?.