🌺05

307 34 17
                                    

El azabache corrió por los pasillos del gran hospital, sus manos sudaban como locas, su corazón palpitaba demasiado rápido, y no solo era por el hecho de que llevaba tiempo corriendo. Si, el Mau testarudo había corrido desde la camisaria hasta el hospital de Shiganshina.

¿Loco?.

Un poco.

También era por el hecho de que no sabía que había pasado, su cabeza se imaginaba lo peor de todo. Su cabeza le jugaba muy sucio, su imaginaba o su cabeza le hacía creer que ese viejo la había encontrado, y le había hecho daño. Solo esperaba que eso no fuera así.

También había lo posiblidad que su eposa haya entrado en labor de parto, bueno más bien esperaba más bien eso que lo peor, aunque una parte también de el se odiaba. El quería estar para ella en esos momentos, quería estar con ella y darle el apoyo que ella necesitaba. Aunque pesando en como es el azabache, no sería el mejor en esos casos. Muy probable, se viera desmayado.

Se odiaba por no haber estado con ella estos días, una parte de el no quería ir a ese estupido viaje que nada más sirvió para, que distraerlos del objetivo. Si, simplemente fueron a hacer absolutamente nada, o bueno eso pensaba el. Se odiaba por dejarla sola, pero era su trabajo y nada más tenía que seguir órdenes del rubio.

Se detuvo en la resección del hospital, asustando a la pequeña chica que se encontraba hay. Simplemente rodo los ojos.

—¿Desea algo señor?—escucho la vos de ella.

—¡¿Mikasa Ackerman, se encuentra aquí?!—su grito ocasionó que la chica pegada un brinco.

—Déjenme ver—el azabache rodó los ojos. Luego de minutos que para el fueron eternos, la chica se giró hacia el, trago seco—Efectivamente señor, la señora Ackerman fue traída hace dos horas.

—¡¿Dónde se encuentra!?—le preguntó exaltado.

—Esta en el área de maternidad—le respondió.

Al escuchar el área de maternidad su corazón se calmo, ella estaba bien o eso esperaba. Sin esperar más salió corriendo, escaleras arriba hacia el área de maternidad, escuchaba la voz de la chica pero no le prestó mucho atención. El nada más quería ver a su esposa.

Al llegar a la sala de espera, de ese lugar se encontró con la castaña, la rubia, la señora Jeager y el mocoso del castaño. ¿Que hacía el aquí?, ¿Acaso no sabía su lugar?, Bufo molesto y se acercó a dónde estaban todos.

—¡Levi veniste!—exclamo la castaña llegando a su lado.

—Tch, ¿Como está Mikasa?—le pregunto.

—Hace más de dos horas, entro en labor de parto. Los doctores no nos han dicho, nada esperamos que este bien—suspiro al decir todo eso.

El azabache bufo molesto y tomo asiento al lado de la castaña, no le parecía nada la idea de que el castaño estuviera hay, tenía que ser el único que estuviera en este lugar. El no era nada de ella, ¡El era su esposo y el padre de esa niña!. En estos momentos se encontraba molesto, muy molesto.

—¿Que hace el mocoso, ese aquí?—le pregunto hacia la castaña.

—Vino con la señora Jeager—confeso—Levi por favor, no le vayas a decir nada, es alguien muy importante en la vida de ella. Y no quiere que ambos estén pelados.

—Tch—rodo los ojos.

Simplemente vio de reojo al castaño que tenía una sonrisa, el azabache rodó los ojos mientras se levantaba y caminaba hacia la cafetería del lugar, pidió un te negro y tomo asiento en un la barra. Necesitaba descansar, y eso era más seguro, en sus ojos se podían apreciar unas grandes ojeras, y su cuerpo se encontraba más delgado que de costumbre, a base de que estas semanas no había podido comer lo suficiente.

~~Te Necesito Chica~~ (Levi y Mikasa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora