𝗺𝗶𝘅𝗲𝗱 ━━𝖪𝖠𝖦𝖤𝖸𝖠𝖬𝖠 𝖳𝖮𝖡𝖨𝖮

第10章

𝗖𝗛𝗔𝗣𝗧𝗘𝗥 𝟭𝟬; 𝗆𝗂𝗑𝖾𝖽 𝗏𝗈𝗅𝗅𝖾𝗒𝖻𝖺𝗅𝗅

—¿Te gusta?

—¿Están saliendo?

—¿Cuánto tiempo llevan juntos?

—¿Tú eres la activa, no Kumi-chan? ¡Kageyama-kun es el pasivo aún con esa cara de miedo que tiene! ¡No tengo pruebas y tampoco dudas! Apuesto diez a esto.

—Que sean veinte.

Kumi se mantenía apoyada en su muñeca con los ojos entrecerrados esperando a que sus compañeras terminaran de vestirse para ir al gimnasio de voleibol y empezar el entrenamiento. Soltó un largo suspiro ordenando en su mente las preguntas para responderlas sin entreverarse por la vergüenza de hablar de Kageyama en voz alta y lo peor, frente a otras personas.

Desde que llegó esa tarde después de la jornada estudiantil, sus compañeras de equipo primero dejaron que se cambiase para después asecharla con preguntas sobre su relación con el colocador de primer año.

—Sí, me gusta —afirmó.

Llevaba pensando los últimos días, el momento en el que le dijo que la ponía nerviosa fue más bien una declaración de amor, si recién se daba cuenta de eso y si, también sabía que se excedió al revelarlo un día después que empezaron a hablar pero por alguna razón tuvo el impulso de hacerlo y no hubo respuesta mala a su repentina confesión, al contrario podía decir que eso la acercó más al azabache. Así que no se arrepentía, al contrario, lo agradecía. Luego analizaba la primera vez que Tobio la acompañó a casa, revelándole que él también se sentía nervioso cuando estaba a su lado, ¿eso también era una declaración? Esperaba que si, porque sino, ellos dos estaban yendo en sintonías diferentes.

Quizás debería aclararlo, hablarlo, entre ellos dos y llegar a un acuerdo. Como... ¿salir o.. —sus mejillas se sonrojaron— o ser novios?

—No estamos saliendo —respondió la Ushijima sacudiendo su rostro y volviendo a la realidad fuera de su mente— aún —agregó sonriendo. Pensó en la última pregunta—. ¡Tampoco soy la activa! —Pausó unos segundos pensando bien lo que significaba eso— creo..

—¡Ay, son tan lindos! —exclamó con emoción la de cabello corto—. ¡¿YA LO HICIERON?!

—Michimiya-senpai, ¿no me ha escuchado? —preguntó Kumi, la capitana soltó una pequeña risa nerviosa y el foco sobre la cabeza de la chica se primer año se prendió—. ¿Y usted, senpai? ¿Ya lo hizo con Sawamura-san?

—¡Oi, niña!

Las chicas rieron y el bombardeo de preguntas para su líder empezó, hasta que una de segundo año, tosió falsamente logrando que todas se callaran.

—Entonces, ¿no estás saliendo con Kageyama-kun, verdad Ushijima? —preguntó Himiko. La de ojos olivos negó seriamente, ya había dicho que aún no—. ¡Qué bien! ¿Crees que quiera salir conmigo?

—Oye, Sakurai, ¿no has escuchado que a Kumi le gusta-

—No importa lo que Ushijima piense —volvió a hablar la castaña de segundo año— sino lo que Kageyama-kun quiera, ¿no lo creen? —Las presentes callaron—. No deberían verlo como una rivalidad, deberíamos apoyarnos mutuamente y que gane la mejor.

—No es una competencia —susurró Maiko, la libero del equipo.

—No lo es, si Ushijima piensa que ya perdió —dijo la Sakurai con una sonrisa arrogante.