第7章

4.6K 649 129
                                    


𝗖𝗛𝗔𝗣𝗧𝗘𝗥 𝟳; 𝗆𝗂𝗑𝖾𝖽 𝗏𝗈𝗅𝗅𝖾𝗒𝖻𝖺𝗅𝗅

Estaba excitado, no morbosamente —al menos no del todo—, estaba excitado por el voleibol, la pasión que sentía por ese deporte y todo lo que lo involucrara. Y en ese momento ver a esa chica luciendo el mismo buzo que él, sosteniendo con firmeza un balón mikasa en su mano izquierda y con una mirada desafiante que le decía en silencio que iba a aplastarlo como si se tratara de un insecto.

Le gustaban los desafíos y en ese momento estaba aceptando el suyo con la sonrisa amenazante que empezaba a extenderse por su rostro.

—Tengo miedo, tengo miedo —repitió el pelinaranja a su lado temblando— Kumi-san da mas miedo que tú.

—La atmósfera se siente familiar —comentó Asahi, Daichi asintió. Aquella mirada la habían visto antes.

—Su presencia es como la de Ushiwaka —respondió el capitán de los hombres.

—Era de esperarse, es su hermano —habló también Sugawara—. Me pregunto si estarán al mismo nivel.

Todos mantenían su vista en el grupo de chicas pero específicamente en la castaña de cerquillo, días atrás la habían visto recorrer su gimnasio observando sus jugadas sin creer que en algún momento la tendrían como su oponente.

—Apuesto que si —susurró Tobio llamando la atención sus compañeros de equipo—. Digo, se ve que sostiene bien el balón.

Tenía la mano firme.

—Si, el balón —soltó con ironía Kei, recibiendo una carcajada por parte de Yamaguchi.

—¡Sawamura! —llamó Michimiya mientras alzaba su mano saludando a su amigo de la infancia.

—Sugawara —susurró la subcapitana con sus mejillas ligeramente sonrojadas, la castaña menor a su lado río ligeramente.

—Ara, ara —susurró Kumi codeando suavemente a su capitana y su amiga de tercero, ambas eran más que evidentes— que encuentro más interesante.

—Oi, tú no hables.

—¡Bienvenidas! —exclamaron los tres de tercer año acercándose al grupo de chicas con los menores siguiéndolos de cerca.

La presencia de una mujer mayor los detuvo, los ojos negros de la entrenadora de voleibol femenino les advertían que si daban un paso más, no vivirían para contarlo.

—Mantengan su distancia, bestias —gruñó la mayor cruzando sus brazos sobre su pecho— no crean que porque nuestros equipos se fusionarán un tiempo, tendrán la libertad de hablarle a mis chicas.

Los chicos palidecieron dando dos pasos atrás ante la temible entrenadora.

—¡Yamada! ¡Cuánto tiempo!

—Ukai, animal, tenias que estar tú aquí —volvió a gruñir Maru al ver al rubio parándose al lado de los estudiantes de Karasuno, mantendría la distancia impuesta por su ex-compañera, si no quería que sus preciados amiguitos pagaran por ello.

Y no, no hablaba de una persona en específico.

—También es bueno verte, Yamada-chan.

—¡¿A quién le dices Yamada-chan, Ukai, maldito?!

—Si que no has cambiado —susurró con temor el entrenador mientras rascaba con ligereza su nuca.

—Me alegra que todos se conozcan —intervino el profesor Takeda llamando la atención de todos los presentes— para que podamos dedicarnos a reforzar aún más la confianza que tienen sobre el otro en estas dos semanas antes del torneo. ¿Empezamos con el partido?

𝗺𝗶𝘅𝗲𝗱 ━━𝖪𝖠𝖦𝖤𝖸𝖠𝖬𝖠 𝖳𝖮𝖡𝖨𝖮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora