Único

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Taehyung y Jimin eran novios.

Para nadie era un secreto lo mucho que Taehyung amaba a Jimin, y es que hasta el más tonto podría darse cuenta de la manera como Taehyung veía a Jimin.

¿Y es que cómo no admirarlo? Para Taehyung Jimin era lo más hermoso que podía existir sobre la faz de la tierra. -Y no solamente por su físico- Su personalidad tan única y extrovertida, su carisma, su manera de percibir la vida, su amabilidad para tratar a todos los que le rodean. Taehyung estaba tan cautivado por ese precioso rubio, y se sentía pleno al decir orgullosamente que ese rubio era su hermoso novio.

Las noches que compartían, eran realmente significativas. No importaba la hora que marcaba el reloj, Taehyung con tan sólo un mensaje viniendo de su precioso mochi era altamente feliz, no importándole madrugar con tal de seguir leyendo las anécdotas de su novio en la pantalla de su móvil.

Si le preguntas a Taehyung ¿Qué viste en Jimin que logró enamorarte tan perdidamente? Él no sabría qué responder. Jimin con tan sólo un par de acciones ya lo tenía a sus pies. ¿Será su sonrisa? Tal vez, Taehyung pensaba que la sonrisa de Jimin era una cosa hermosa e resplandeciente que alguna vez sus ojos pudieron presenciar. ¿Tal vez su belleza? Joder, claro que sí. Jimin podía ser el ser más hermoso del mundo, era tan hermoso como el universo y tan atractivo comos los anillos de Satur

Cuando recibió el mensaje de Jimin quedó meditando un segundo con su vista fija en su celular. Aquel mensaje de Park había sido escrito con tanta frialdad, simple. Mayormente sus mensajes venían decorados con apodos lindos, corazones y emojis soft. Como decía su lindo novio.

" ¿Puedes venir a mi casa? "

Para Tae no era extraño que pidiera ir a su casa, siempre terminaban en el sofá, llenándose de mimos con una película que no recibía ni una pizca de atención. Pero, esta vez su mochi había sido tan frío en su mensaje. "Tal vez estoy exagerando" Pensó Taehyung.

En su recorrido para llegar a casa del menor había parado para comprar las galletas favoritas en un local cerca del tratecto. Caminando tan tranquilo por la calle, murmurando por lo bajo "rewrite the stars" De su reciente película favorita, esa que tanto le recordaba a su Jimin.

Sus nudillos tocaron con una fuerza suficiente para hacer notar su presencia, esperando paciente a ser recibido por los bracitos de su novio, dejando sus cerezos posados sobre su mejilla como una bienvenida a su cálido hogar. La sonrisa de Taehyung se hizo visible cuando la puerta rechinó, haciéndose a un lado para dejar ver a un Jimin en pijama -Su favorita de color morado- Sobre esta, dejaba ver el lindo collar con una conchita de mar que le había obsequiado al tener una de sus escarpadas nocturnas a la playa.

"Donde nos dimos nuestro primer beso. ¿Recuerdas, Jimin?

Pero Taehyung supo que algo no andaba bien con su pequeño cuando este no aplicó su protocolo que hacía siempre al recibirlo. Se preocupó mucho, pensando de una cómo ayudar a eliminar las frustraciones de su bebé.

-¿Todo está bien, mi amor? -El más alto se adentró a la casa cuando el permiso le fue concedido, esperando por el rubio que estaba cerrando su puerta.

Necesitamos hablar. [Vmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora