Capítulo 12

42 4 0
                                    

-Es obvio para aquellos que pueden verlo – las comisuras de sus labios se curvaron ligeramente – Tal vez si lo encontraras no desearías destruirme del todo.

- Supongo que no soy tan indulgente – clave mi vista en el asiento del copiloto - ¿Por qué le has dado mis flores? ¿Qué le dijiste?

- Que se encargara de cuidarlas, tal vez te gustaría colocarlas en nuestro cuarto como recuerdo de este día.

Baje mi vista y observe con detenimiento el anillo que ahora adornaba mi dedo, ese objeto había sido objeto de otra riña entre nosotras, yo quería algo sencillo, pero Emma quería algo que resaltara, así que como siempre se hizo su voluntad.

Me sorprendió que el padrino sacara dos anillos idénticos, no creí que ella deseara un recordatorio permanente de nuestro matrimonio.

-Ninguna de las dos va a olvidarlo ¿Para qué necesitaría un recordatorio? dije fría.

- De todos modos, lo haremos ¿Quién sabe? Tal vez un día cambies de opinión – cogió mi mano izquierda y observo el anillo detenidamente - El anillo te queda bien ¿Qué hiciste con el otro?

Me puse nerviosa, aunque no sabía exactamente porque, si era por el hecho de recordar nuestro anterior matrimonio o por que ella estaba tomando mi mano, intenté soltarme de su agarre, pero ella sostuvo mi mano con más fuerza.

- ¿Mi contacto te repudia Gina? – dijo con su estúpida sonrisa irónica.

- Todo lo relacionado contigo me repugna – mentí, aunque no creo haberlo hecho tan bien - En cuanto a tu anillo, se lo regalé a la primera persona que vi que necesitaba mas el dinero que yo.

- Me agrada saber que al menos ayudo a alguien – contestó irónica.

- El dinero es lo único que puedes dar.

- ¿En serio? Te lo recordare esta noche mientras te agitas entre mis brazos.

No pude evitar ruborizarme al recordar lo que aquella frase indicaba, ese asunto me aterrorizaba demasiado, por eso siempre evitaba pensar en eso, su mente entraba en un conflicto interno.

-Eres demasiado presumida... ¿Podrías soltarme por favor?

- ¿Hay algo de malo en que una esposa coja la mano de su mujer? Sobre todo, cuando están recién casadas – dijo con su sonrisa burlona.

- No seas hipócrita – respire con fuerza – Nadie nos esta viendo, por lo que no es necesario que finjas – replique con desprecio.

- ¿Y si te dijera que no estoy mintiendo? – sonrío ligeramente

- No te creería.

- Sin embargo, tengo la intención de que este matrimonio funcione – se enderezo en su asiento y soltó un suspiro, pero en ningún momento soltó mi mano. Mi corazón latía desesperado, sus palabras sonaban muy sinceras, pero ella ya me había demostrado que podía ser una gran actriz.

- No es necesario que te metas en tantos problemas por mí – cuando dije eso Swan soltó mi mano.

- No es ningún problema amor mío, esa siempre ha sido mi intención.

- Me da la impresión de que deseas este matrimonio – comenté ya que su respuesta me había dejado atónita, ella solo se limito a alzar una de sus cejas.

Incapaz de sostenerle la mirada por más tiempo, dirigí mi mirada hacia la ventanilla, no podía creer que Emma hubiera deseado casarse conmigo, no tenía sentido, solo podía ser el deseo. Pero no era necesario casarse con alguien para satisfacer una necesidad meramente carnal, al menos ya no, pudo haberla chantajeado para que tuvieran una aventura pasajera, pero no lo había hecho, matrimonio o nada ¿Qué significaba eso?

I can't believe you anymoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora