>> TE AMO <<

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Diario de Mauricio —nota 10—:
"Tendremos nuestra venganza, Joaquin".

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Hi! Well... Aclararé una cosa que tal vez no se entendió en el capítulo anterior. Bueno, Joaquin SIEMPRE habla consigo mismo o con su lobo a través de su mente, pero, cuando se desmayó, se comunicó con la Luna por primera vez.

Bueno, ahora sí podemos comenzar. No se olviden de votar, comentar y compartir 🤗


—¿Qué?

—Te creo, Emilio. Mauricio está dispuesto a todo para cumplir con lo que planeamos, incluso, matar a los que se opongan —dije en voz baja, acomodándome en la cama para estar sentado—. Sin embargo, todo es mi culpa. El plan fue mío y merezco pagar por lo que hice.

—Joaquin... —contestó, acariciando mi rostro— Esto no es tu culpa. Mauricio tomó sus propias decisiones, no lo obligaste a nada.

—Si nunca le hubiera propuesto...

—No, Joaquin. Si no lo hubieras hecho, vivirías lleno de rencor y no estarías reconociendo tus errores como haces ahora.

—¿No me condenarás? —pregunté, sin atreverme a mirarlo a los ojos.

—Eres un Rey, Joaquin. Te casaste conmigo y tu deber es velar por la seguridad del reino, así que te necesito a mi lado para encontrar a Mauricio.

Ayudemos a nuestro Alfa.

No quiero que Mauricio sea encarcelado; nos ha apoyado y cuidado desde siempre, no sé si pueda hacerle esto. No obstante, el plan se salió de mis manos y, ahora, él es un peligro para todos.

—Se supone que te pediría perdón esta tarde, pero como parte de un engaño. Mauricio le pondría algo a tu té, para que fuese más sencillo matarte, y acabaríamos contigo —confesé.

—Si ya lo habías planeado, ¿por qué cambiaste de opinión?

—En parte fue por ti... Sin embargo, noté que su mirada no era la misma que antes... Entonces, me asusté porque sentí que por mi culpa lo había perdido... —dije, algo asustado, con mis lágrimas a punto de brotar por la cólera— No lo reconocí... No es la persona de la que me enamoré años atrás...

—Tranquilo —contestó suavemente, sujetándome entre sus brazos y liberando su aroma para calmarme. Realmente, de no ser por su presencia, ahora estaría perdido. Incluso, puede que no haya escogido estar unido a él, más es lo que siempre he necesitado—. Todo estará bien.

—Está infiltrado en el castillo —añadí un poco más tranquilo—. Está usando un uniforme de guardia, aunque no sé de dónde lo sacó.

Entonces, unos golpes llamaron a la puerta, lo cual causó que Emilio me soltara. Era el general Diego, quien traía noticias urgentes para el Rey Alfa.

—Encontramos el cuerpo del guardia Leandro en el cobertizo del ala izquierda —informó—. Sus prendas fueron robadas y también su insignia de Agustina.

Mauricio, ¿de eso fuiste capaz?

—¿Tienen alguna pista sobre quién fue el responsable? —preguntó Emilio.

—Encontramos unos restos de cabello negro, pero no tenían olor alguno. Suponemos que el responsable fue un Beta.

—Fue Mauricio —aseguré.

—Al Beta Mauricio Mariscal no lo hemos localizado en el Reino ni en el camino, tampoco en el bosque. Podría ser él, su majestad.

—Ayer fue a mi celda... Está infiltrado en el castillo.

—Entonces, debemos proseguir de inmediato y encontrarlo. Debemos bloquear todas las salidas y revisar a todos los guardias —dijo el general.

—Hay que realizarlo de una vez. Reúna a todos los coroneles que se encuentren aquí en la sala de juntas. Hay que proseguir con discreción. Ningún guardia debe enterarse de esto hasta que sea el momento —ordenó Emilio.

—Sí, su majestad.

Entonces, se retiró de la habitación y nos dejó solos. De hecho, se dirigía a cumplir el imperativo, pues era de urgencia. Sin embargo, también me di cuenta de que Emilio me dejaría solo en un par de minutos. Y, sé que suena egoísta, pero necesito su cercanía, pues sigo muy débil.

—Tengo que ir —susurró.

—Todos te necesitan.

—Mandaré a un coronel para que te proteja. ¿Crees que estarás bien?

—Sí, no te preocupes. Ve —contesté, tratando de no sonar decaído— Y, por favor, quiero verlo antes de que lo juzguen.

—Lo entiendo... —respondió antes de besar mi frente con delicadeza— Me encargaré de que puedas hablar con él.

—Gracias.

—Te amo, Joaquin —dijo antes de retirarse y dejarme solo.

—Yo también te amo Emi —contesté, a pesar de que ya no me escuchó.

El Omega del Rey [✔] © # [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora