Caroline Holden, directora de Zepelin Studios. Es enviada a Venecia para asistir en un aclamado festival de cine y televisión.
Conciente de que no queda otra alternativa, viaja a Venecia. Sin saber que dicho viaje terminaría cambiando muchos aspecto...
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Caroline
Me encontraba en la cama con mi portátil viendo algunos guiones que me habían mandado por correo.
Después de haber pasado la mañana seleccionando las cosas que me pondría esta noche y arreglárme, me había tomado lo que quedaba de tarde para revisar los correos del trabajo.
– ¿Qué te parece mi atuendo?
Levante la vista de mi computador para observar a Scarlett con un vestido rojo largo que le marcaba perfectamente en la cintura.
Scarlett quiso arreglarse en mi cuarto para que la ayudara con su atuendo para esa noche. Ya se había probado tres vestidos diferentes y aun no sabía cuál usar, lo bueno era que aún faltaban como cuatro horas para el baile de bienvenida y todavía le restaban unas cuantas horas para terminar de decidir que vestido usar.
– ¿No está un poco ajustado? – ese vestido estaba tan ajustado que dudaba de que pudiera respirar con él.
–No, está justo como debe estar.
–Creo que me gusta más el verde, resalta más tu piel. – le comente para luego bajar mi vista al portátil y seguir revisando los guiones.
– ¿No te vas a arreglar? – dijo después de notar que seguía en la cama mirando el computador.
–No, yo arregle todo lo que me iba a poner hace unas horas atrás y aún faltan como cuatro horas para tener que bajar. – le conteste mientras seguía leyendo los guiones. – así no termino volviéndome loca por encontrar que ponerme como tú.
Se llevó las manos atrás para bajar el cierre y quitarse el vestido, que dando en roma interior. Tomo el vestido y lo puso en un gancho con los otros que se había probado. Miro por un segundo el verde tratando de decidir si usaría ese u otro, dio un suspiro de derrota y se acostó a un lado de mí con los brazos extendidos a los lados.
–necesito ese poder de organización que tú tienes.
–No existe tal poder, es solo sentido común. – despegue los ojos de la pantalla para mirarla. Se encontraba mirando el techo mientras se reprochaba a sí misma no haber pensado en que se pondría antes. –además tener un poder así sería muy inútil.
–Lo que tú digas. – dijo tratando de sonar sarcástica. Se giró para verme mejor pero en su lugar vio la pantalla. – ¿qué estás haciendo?
–Reviso los guiones para la semana que viene.
– ¿puedo ver? – pregunto haciéndome ojitos.
–Claro, de todas formas eres tú la que dirá estas cosas.
Gire la computadora para que pudiera ver. Lo miro con cautela leyendo lo que tocaría decir en el programa de la semana que viene.
Scarlett siempre me ayudaba a revisar los guiones, así de esta forma se corregía el guion para que sonara más como ella y no como cinco guionistas en un escritorio. Ellos no se lo tomaban para mal el que nosotras lo corrigiamos, siempre que ellos terminaban uno me lo mandaban por correo para así revisarlo y que fuera más con la esencia del programa y la de Scarlett.
