-¿Pero que diabl...?
-¡Nada de malas palabras Tessa!- dijo mi madre, interrumpiendome por completo.
-Mamá...¿por qué me despiertas?, falta...- dije mientras revisaba mi celular.- media hora para que suene mi despertador. Ah, y dudo que "diablos" sea una grosería.
-Número uno: aún no son ni las siete, así que nada de lecciones de gramática, Tessa. Y número dos: Elyse esta aquí.- respondió. Me levante y salí de la cama perezosamente y hasta ahora no me había percatado de que mi madre seguía en pijama. Dios, vaya que Elyse había madrugado.
-¡Hola!- exclamó Elyse cuya cabeza se asomaba por el marco de la puerta de mi habitación.
-Voy... a preparar el desayuno.- dijo mi madre bostezando y saliendo de la habitación.
Bostecé profundamente. Por lo general siempre intentaba no despegarme de mis horarios, eran sagrados y respetados por todo aquel que me conociera. Claro que mi mejor amiga podía ser la excepción.
-¿Dónde esta tu decencia?- le pregunté- Sabes que mi tiempo de dormir es sagrado.
-Lo superarás.
-Como sea-le dije-. ¿Qué haces aquí tan temprano?
-Te lo digo en el auto, apresurate.
-Pero...- comencé pero ya era tarde, Elyse se había ido.
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-¿Y bien?- le pregunte ya en su auto de camino al instituto.
-¿Qué no puedo querer llegar a tiempo a clases?- dijo con una sonrisa angelical pegada a su rostro.
-Elyse, te conozco y estarás loca, pero no tan loca como para madrugar, así que dime.
-Pensé que sería buena idea llegar temprano. Además, bueno... hay un chico, Jordan, es ayudante en la biblioteca en las mañanas y pensé...
Oh no.
Elyse estaba desesperada. Y no por tener novio, mas bien por conseguirme uno.
Elyse se habia vuelto novia de mi mejor amigo Matt Duncan y quería que yo dejara de estar soltera y amargada, pero noticias: ¡Eso no pasara!
-Maldita sea Elyse, ¿me despertaste temprano para esto? Sabes que nada va a suceder- dije convencida pues era cierto. Esta no era la primera ni la ultima vez que Elyse hacia esto. Yo no buscaba a nadie, mi amargada soltería era perfecta para mí.
-¡Es muy amable y...-dijo pero no completo la frase.
-¿Qué?
-Tessa, solo creo que te haría bien intentarlo.
-Elyse, yo se que solo quieres ayudar pero no estoy interesada. Además, Jordan no me interesa de esa forma.
-Bueno, ¿y qué tal el chico nuevo? Dicen que es muy lindo.
-No. Ni siquiera lo conozco-dije a la defensiva. No conocía al chico y no me interesaba.
-Pero, ¿que te...
-Elyse, te agradezco que quieras verme feliz con alguien, ¡pero estoy bien!- dije moviendo frenéticamente mis brazos-. Promete que será la ultima vez.
-Prometido...
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-Llegaron temprano-dijo Matt sorprendido, ya que siempre llegabamos... tarde.
-Oh, ya sabes. Elyse quería volver a hacer de cupido- le dije y el de inmediato miro a Elyse.
-¿Otra vez?
-La última de todas por suerte.- comenté.
-No estés tan segura de eso.
Matt era mi mejor amigo desde hacía dos años exactamente. Él había sido mi compañero en secundaria pero no fue hasta que a ambos nos habían cambiado de instituto que nos habíamos hablado. Nos empezamos a juntar porque no conocíamos a nadie más y... ahora era mi mejor amigo. A Elyse la conocí al entrar en este instituto, y de inmediato nos volvimos amigas. Y aquí estamos los tres juntos.
Matt se acercó a Elyse y ella sonrió acercándose para besar a su novio.
-Amor... ¡Ugh! Esta por todas partes.- dije poniendo cara de asco mientras ambos se separaban.
Una vez en el salón y en nuestros lugares, la profesora Ratfort comenzó con la clase.
Odio las matemáticas. Intenté poner atención pero me rendí.
No es que hiciera eso todo el tiempo, pero mi horario de descanso había sido interrumpido y el tener matemáticas a primera hora no ayudaba en nada.
Unos minutos después alguien tocó a la puerta. Desde donde estaba no lograba distinguir quien era, pero algunas chicas hasta el frente soltaron algunas risitas y miradas coquetas hacía la puerta.
El chico nuevo, ¿quién más?
Luego de unos minutos el chico entro y... oh por Dios.
Ese rostro, esa sonrisa... jamás lo olvidaría. Mi corazón paró por un segundo y por un momento tuve ganas de esconderme en el baño. Pero... No era posible, ¿o si? Después de tantos años yo aún quería llorar de tan sólo verlo. No podía ser él.
-Denle la bienvenida a...
-Harry, Harry Miller.- dijo él chico mientras una sonrisa crecía en sus labios al ver a todas las chicas que lo miraban babeando.
Y si, era él.
Harry Miller. Mi pesadilla en la secundaria. Siempre burlandose por mi pelo, mis lentes...Por suerte de eso ya no podia decir nada, aunque la verdad jamás supe por qué.
Lo miré fijamente, con mi ceño fruncido. Esto era inesperado, totalmente. ¿Qué rayos estaba haciendo aquí? ¿Por qué tuvo que haberse matriculado justo en esta escuela?
Tardé un momento en darme cuenta que seguía mirándolo. Y que él también me miraba a mi. Pareció tomarle un segundo, pero su cara se transformo a la misma que le había visto portar tantas veces en secundaria en cuestión de segundos. Me miró con superioridad, sonriendo burlonamente.
Comenzó a caminar lentamente hacía su lugar aún con su mirada en mi y con esa estúpida sonrisa. Al llegar quitó sus ojos de mi para saludar a Matt que estaba a su lado y que no parecía nada sorprendido ante su llegada.
Harry y Matt eran amigos en la secundaria, aunque Matt jamás se burlo de mí. ¿Seguían siendo amigos? Matt no lo había mencionado jamás por lo que pensé que se habían dejado de hablar. Pero al verlos conversar tan animadamente ahora me hacía ver claramente que seguían siendo amigos, y peor: Matt sabía que Harry Miller, el idiota que me molestó por tantos años, iba a venir a estudiar al instituto Gadner. Y no me lo dijo.
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¡¡¡Este fue el muy esperado primer capitulooo!!!
Y esto solo acaba de empezar.
Buenooo como seguro ya habrán notado, borre los adelantos. Si, lo hice porque no me permitían subir los capitulos así que si, lo tuve que borrar, pero...ni modo.
Ahora, les pido atentamente que voten y comenten... Así que obedezcan.
Adiossss 👊
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Olvídame, si puedes...
Teen FictionYo Tessa Jones de 17 años vivo una vida tranquila: ir al instituto, salir con mis amigos, ir a fiestas... Y cero chicos. Y luego llega mi pesadilla: Harry Miller. Él arruino mi vida durante la secundaria, y ahora llega a arruinarla para la preparato...